No siento el mal

Capitulo 1:Genesis

La edad media,una época de paz y prosperidad,las guerras desaparecieron del mundo hace varios milenios,las armas son solo elementos decorativos y la mayor preocupación de los ciudadanos es si esta noche comerán carne de buey o de cordero.

Hace mucho tiempo esto no era así,el hambre reinaba por doquier,las guerras se sucedían una tras otra a cada cual por un motivo mas estúpido que el anterior,la avaricia volvía a los ricos mas ricos y a los pobres aun mas pobres... pero de un día para otro,las guerras comenzaron a cesar,se hicieron acuerdos diplomáticos,y una buena parte del dinero de cada reino fue distribuido entre la población,las personas comenzaron a sentir una fuerte sensación de amor y camaradería entre ellos sin siquiera conocerse,todo esto era muy extraño,pero era tan perfecto que nadie se paro a pensarlo. Un reino en concreto es conocido por la bondad y generosidad de sus habitantes,es llamado "El reino del Sol" pues según dicen puedes sentir una cálida sensación en el alma con solo poner un pie en el,y por supuesto la que seria su futura reina no podría ser otra que "la santa maría" una chica hermosa,de cabello rubio y ojos azules,desde muy pequeña domina el arte de la sanación,con su magia ha curado a enfermos y heridos,esto sumado a su dulce y apacible personalidad hace que la denominen santa.

"princesa maría,su belleza ha logrado cautivarme hasta tal punto que no creo poder seguir viviendo si no la tengo cerca,mi corazón arde y palpita por el deseo de estar con usted durante toda la eternidad,por eso yo,el príncipe Fabio,futuro rey de...."

-arrugando la carta y lanzandola al suelo- "si sigo leyendo creo que me darán arcadas.." -dice con cara asqueada-

"¡princesa! por favor reconsiderelo,el príncipe Fabio es el heredero de el reino azabache uno de los 10 grandes reinos,una unión supondría un fuerte vinculo"

este hombre de mediana altura,ojos negros y barba gris,parece tener una avanzada edad la cual se demuestra por sus modales tanto al hablar como al expresarse.

"¡el reino no necesita ese tipo de lazos! nadie pasa hambre ni sed,no necesitamos mas"

-cruzando brazos y piernas aparentemente molesta-

el hombre la mira y con una clara preocupación en su rostro se arrodilla ante ella

"¡princesa por favor! se lo suplico reconsiderelo,su majestad últimamente se ha comportado de una manera muy extraña,esta muy enfadado y creo que es porque usted se rehúsa a contraer matrimonio,por favor princesa si no es mucho pedir..."

la puerta detrás del hombre se abre interrumpiéndolo,entrando un hombre alto y aparentemente bastante fuerte,lleva una corona con muchos adornos brillantes y ropajes de la mas alta realeza "¡M-majestad!" -dice el hombre aun arrodillado- "trataba de convencer a la princesa de.."

"suficiente" -dijo el rey firmemente-

"te alegrara saber que ya no es necesario que contraigas matrimonio con el príncipe Fabio"

-dirigiéndose a la princesa-

"¿¡como!? ¿¡entonces ya no es necesario que contraiga matrimonio!?" -levantándose de un sobresalto-

"¿mh? no,lo que quería decir es que tu futuro marido ya ha sido escojido" -mirando hacia la puerta-

tras acabar la frase un chico de unos 16 años de edad accede a la sala,es un chico rubio de ojos claros,lleva unos ropajes excesivamente llamativos y no le quita ojo a la princesa a la vez que camina hacia ella,a unos metros del trono se detiene dirigiéndose a ella

"¡princesa!" -exclama en un tono exagerado- "¡es un honor para mi,Marco Augusto,heredero del reino carmesí, haber sido escogido para contraer matrimonio con una princesa tan hermosa y querida por su pueblo! ¡prometo que nuestra boda resonara en todos los rincones de ambos reinos! ¡NO! ¡de todos los reinos!"