Capitulo 1.

302 24 4
                                    


"Quizá, te convertiste en algo mas importante que mis aspiraciones."


_Natori y Natsume.

Quizá, el día en que decidió dormir en aquel extenso trigal, sin importarle el constante cosquilleo en su cara de las semillas amarillas y brillantes que pronto darían que cosechar, el destino lo obligo a resolverlo con ignorancia y reposar. y quizá, el haber hecho tropezar sin intenciones a aquel joven sencillo también había hecho parte del juego que el destino, o, probablemente algún ayakashi le hubiera estado tendiendo. Al principio, cuando vio su rostro, no evito pensar que cada rasgo delicado de su cara, junto a sus ojos de aspecto rasgado y de un hermoso color dorado, eran parte de uno de los muchos espíritus que observaba a diario. pero el hecho de que las personas no se cuestionaran el porque de sostener una figura invisible, le llevo a pensar en que, aquel chico, que sin duda podía ver el tatuaje que recorría casi todas las partes de su cuerpo, era humano. y al darse cuenta de esto, quiso saber mucho mas de él.

Nunca creyó encontrar a alguien con un pasado tan oscuro, y un corazón que era actualmente tan blando, frágil, y amable. cada aspecto, aunque fuera el mas mínimo, le parecía encantador. y la primera vez que lo vio sonreír, no quiso dejar de hacerlo. pensó por primera vez que si fuera por él, podría abandonar aquel trabajo que a Natsume, nombre del muchacho, tanto le inquietaba en ambas partes. porque junto a él no hacia falta seguir con aquel linaje de exorcistas, porque no deseaba ver el rostro afligido de Natsume al enterarse del sufrimiento de un ayakashi, o verlo preocupado por su bienestar. que, aunque la culpa le hiciera bucle en la cabeza por pensarlo, le encantaba aquella preocupación dedicada a él. Un espacio en la mente del menor estaba ocupado por las letras "Natori Shuuichi" y no podía pedir otra cosa mas que eso.

Si alguna vez hubiera tenido la oportunidad de evitar que Natsume estuviera involucrado con los Yokais y el mundo que los rodea, hubiera tomado todas las opciones que se le ofrecieran. porque sabia lo que se sentía estar solo y no tener quien te escuche y crea, es difícil vivir con miedo y sentir que nadie comprende nada, sentirse perdido y fuera de lugar; fueron los sentimientos con los que le toco cargar desde que nació. es por eso que, le gustaría haber tenido la oportunidad de hacer que Natsume sonriera mas cuando era niño, que tuviera una familia estable, y amigos, muchos amigos. aun si todo eso implicaba el jamas conocerse. Amaba a Natsume, pero no soportaría verlo sufrir ni llorar. porque aunque él se viera hermoso con la expresión que fuera, una sonrisa plantada en su rostro significaba días de alivio al corazón del mayor.

Hiiragi a menudo se pregunta por él. "Natsume es muy amable, algún día se meterá en un problema en el que no encuentre una salida" es lo que ella suele decir. y en el fondo de esas palabras, comprende esa preocupación. y aquel "problema en el que no encuentre una salida" significa un "si esta en graves problemas, acudiremos". Y le alegra saber que ella se siente así, y aunque a veces sienta celos, sabe que son innecesarios, porque ella sabe sobre que quizá se ha vuelto un pedófilo y se ha quedado flechado de aquel muchacho amable que siempre lleva un mapache gordo encima. aquel gato que se convierte en un gran y poderoso ayakashi que, por razones desconocidas para él, se mantiene cerca del menor. No evita inquietarse cuando escucha su voz gruesa y firme declarar que Natsume es de su propiedad, no le agrada esa afirmación que esta llena de seguridad; y que su "presa" no se molesta en negar. "Nyanko-sensei a veces dice eso para espantar a los otros ayakashi, esta bien." es lo que él una vez le respondió cuando se armo de valor y lo enfrento. disgustado solo puso una cara seria. Ya que no podía discutir con él.

a veces lo observa y se ve a si mismo, débil, temeroso, solo. y se siente feliz de que después de todo lo malo por lo que paso, él pueda estar ahí y apoyarlo, ser su soporte cuando sienta que perderá la cordura o cuando tema de algo relacionado con un Youkai. y en el fondo, es feliz con el hecho de que este no se convierta en exorcista, no le importaría estar siempre protegiéndolo y ser su maestro, pero se moriría de un infarto si algo le sucediera, y, egoistamente; quiere que Natsume lo necesite, quiere escucharlo pedirle ayuda cuando la necesita, quiere un motivo que respalde el siempre querer estar cerca de él. porque es la nueva aspiración que ha nacido desde el fondo de su corazón cuando lo conoció, y supo que tenia demasiados secretos y dilemas que no podría sobrellevar solo. porque al parecer, todo a su alrededor se ha vuelto lo suficientemente insignificante como para dejarlo de lado al escuchar su llamado. Quizá, sus aspiraciones no fueron lo suficientemente grandes para contrarrestar el amor juvenil que nunca tuvo y en su adultez apenas vino a presentarse. Quizá...

-Natori-san, ¿ocurre algo?

su mirada nunca podrá despegarse de la contraria, ni alejarse de su calor. dándose cuenta con la primera vez que lo vio directamente a esos ojos sinceros, y apretó con amor aquella mano. sonriendo al sentirlo cerca.

-Nada, Natsume.

... sus aspiraciones no fueron lo suficientemente tediosas para luchar contra el palpitante corazón que gritaba su nombre.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 19, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Exorcista de amor. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora