Viviendo Un Sueño

Capítulo 8

La chica se llamaba Dania y desde el primer momento me cayó bien, parecía muy maja y muy lista, y su plan, simplemente era perfecto.
- ¡Aaaaaaa! - grité cuando acabó de contarmelo - ¡¡te amo, te amo, te amo!!
- Shhh - me intentó tranquilizar cuando vio que llamé mucha atención.
- ¿Pue pue puedo? - pregunté.
- Pero no sé si funcionará.
- Conmigo todo funciona, yo consigo lo que me propongo.. hace poco, en la estación de renfe, me libré de una cola larguísima tirando un bote de gas al suelo.
- ¿Fuiste tú? ¡¿Pero cómo se te ocurre?! ¡Eso podía causar efectos secundarios! - me empezó a regañar Gabri.
- ¿Enserio? ¿Un bote de gas? - me preguntó Dania sin poder aguantarse la risa.
- Sí, pero no era perjudicial - me reí - no veas la cara de miedo que tenían todos.
- A mí no me hace gracia, yo también me asusté.
- Jajajaja ¡no me jodas! Pero si solo yo puedo hacer cosas de esas jajaja 
- ¿Sabes qué? Puedes unirte al plan secreto. 
- ¡Gracias! 
- De nada, pero primero tienes qus ir y avisar a mi amiga, está la tercera en la cola.
- Ok, ya voy - dije y me di media vuelta.
Cuando ya Dania no nos podía oír, Gabriela me tiró de la manga para llamar mi atención.
- Tía, ¿para qué quieres hacer eso? Sabes que si algo sale mal vas a tener problemas con la policía, podrán encerrarte en alguna institución, etc.
- A ver Gabri, que secuestrar a alguien tampoco es tan grave..
Gabriela me miró con cara de asesina.
El plan de Dania y su amiga Naomi parecía una película de acción y eso me gustó mucho. Ella y su amiga llevaban vigilando la fábrica desde que se enteraron que ahí había seis chupa-chups que contenían entradas dobles para el concierto. Desde hace tres semanas pasaban el día espíando y haciendo anotaciones que creían que les servivrían ahora.
Sabían qué hacía cada unos de los trabajadores, a qué hora y en qué día de la semana..
El día que más importaba era el sábado, el día antes de salir a la venta los chupa-chups. Sí, mañana salen a la venta. Por eso la cola es tan larga, todas las Directioners que no consiguieron entradas para el concierto están ahí, pensando pasar la noche a las puertas de la fábrica, haciendo todo lo posible para cumplir su sueño. Si no hubiera conseguido las entradas seguramente estaría ahí también - pensé, pero me quité ese triste pensamiento inmediatamente de la cabeza. Llegamos a la cola.
- ¡¡¡Naomi!!!- gritamos Gabriela y yo a la vez.
- Soy yo - contestó la chica - ¿qué pasa? 
- Somos Ana y Gabriela - dije en alto - venimos de parte de Dania, nos dejó unirnos al plan - susurré.
La chica no ocultó su enfado. Cogió el movil y llamó a su compañera. La regañó mucho, no le dejó decir nada al respecto y colgó. Al ver nuestras caras nos pidió perdón y dijo que era un impulso, que estaba desesperada por conseguir las entradas, y como solo se puede comprar dos chupa-chups por persona, pues entonces quiere que el plan funcione, y como Dania siga añadiendo gente no va ! funcionar. Yo la entendí perfectamente, pero Gabri no y si no fuera porque la tiré de la manga, se hubiera ido. 
- ¿Entonces podemos unirnos al plan? - pregunté.
- Claro, solo que tenéis que leer todos los apuntes que hicimos y prepararse para esta noche.
- ¿Esta noche? ¡No jodas! ¡Mi madre no me va dejar! ¡Joder! ¡Mierda! Bueno, la voy a llamar, a ver que me dice, le diré que Gabri tiene familia aquí y que nos encontramos con ellos y nos invitaron pasar esta noche en su casa. - dije cogiendo mi movil y marcando el número de mi madre.
- A mí no me metas en esto - dijo asustada Gabri.
- Hola mamá, mira, que Gabri tiene familia aquí, en Castilla y nos invitaron a quedarnos esta noche en su casa, ¡puedo? 
- Claro que puedes, cariño, pàsatelo bien. - me permitió mi madre y colgó.
- ¡¡Te dije que a mi no me metieras en tus planes locos y malvados, ya es demasiado para mí, estoy asustada, al final voy a terminar castigada como siempre cuando te hago caso!! - se enfadó mi mejor amiga.
A mí me hizo gracia y lo único que se me vino a la mente es reirme, así que al igual que Naomi me empecé a reir. Gabri no ocultó su decepción pero se quedó con nosotras.
- Ahora hay que pensar que le diremos a tu madre.
- Quizá.. nonono.
- No, Gabri, ¡dilo!
- Pues que me quedé en la casa de mi prima, o mejor, en la casa de mi hermana, ella me cubrirá.
Me sentí muy orgullosa de ella en ese momento, ¡por fin empezó a pensar como yo! 
- Entonces el tema de quedarnos esta noche aquí está resuelto, muy bien, ahora vamos a leer los apuntes y prepararnos. - dije sin darle notar a las chicas lo contenta que estaba.
Nos despedimos de Naomi y fuimos a por los apuntes a donde estaba Dania. Ella nos los dio y también nos dio las llaves de su casa. Me sorprendí mucho, nadie en toda la Tierra le daría las llaves de su casa a unas desconocidas, ella era diferente.
- Confío en vosotras. Id a leer y cabiaros a mi casa, mis padres están de viaje asique nadie os molestará.
- Gracias. - dije sin poder creerme lo buena persona que era Dania.
Antes de despedirnos, la chica nos dio su dirección, luego nos fuimos.
Mientras íbamos en la dirección de su casa estuve pensando mucho..
"Y cambiaros, cambiaros, cambiaros.." esa palabra no se me salía de la cabeza. Estuve pensando porque lo dijo, si no llevábamos nada de ropa.
Luego esa bombilla se me encendió..
En las pelis de acción todas las chicas van super sexys vestidas de negro, seguranente las chicas quieren ir igual, pero eso significa que...
- ¡Tenemos que ir de compras! - grité cuando ya casi llegamos a la casa.
- ¿Qué? - me miró con mala cara.
- Sí, no te has dado cuenta que nos dijo que nos cambiáramos? 
- Es verdad, pero no tenemos tiempo.
- C'mon Gabri..
- Ok, ¡vamos! - dijo Gabri excitada.
Fuimos y pasamos una tarde genial. Nos probamos ropa, comimos, bebimos.. hasta que nos dimos cuenta de..
- Joder, ya son las 19:30, ¡tenemos que ir a prepararnos! - dije preocupada.
- ¿En serio son las siete? ¡Joder, vamos!
Al llegar a casa, lo primero que hicimos es ir a darnos un baño, luego nos pusimos ropa interior y una bata de baño y empezamos a leer los apuntes, hemos tardado una hora y media, cuando ya por fin los entendimos, nos vestimos y nos quedamos esperando a Dania. Llegó 15 minutos después. El plan había coenzado...