P E C C A T O

Capítulo 3: Nel Buio

Pasaron 6 días, y no lo vi. La boda se acercaba cada vez más con ella mis inseguridades y miedos.
¿Casarse a los 21? ¿Qué tan loca estaba?.
Me mire nuevamente en el espejo, me estaba probando el vestido, era hermoso pero no sentía que me pertenecía.
Althea estaba pendiente del celular, pocas veces me dedicaba una mirada y  levantaba los dedos en signo de aprobación, en el 4 vestido me di cuenta que no estaba para nada interesada.

Maldita oxigenada.

— Oxigenada, ¿Me puedes prestar atención? — le llame la atención.

— Perdón, estoy conversando con el hombre de mis sueños. Sabes como me pongo con el, dame 10 minutos y sere toda tuya. — Althea hace varios meses me platicaba de un hombre que la traía loca, pero no podían tener nada serio, ya que el desconocido era de otra ciudad.

Amor a distancia.

Rodé los ojos, 10 minutos. Si claro, la conocía lo bastante para darme cuenta que esos minutitos serian horas. Fui de vuelta al probador y me quite el vestido.
Al mirarme al espejo descubrí lo palida que estaba, mi pelo negro al igual que mis ojos, no llamaban la atención. Pero en el pueblo si, para ellos lo negro era peligroso. Más si la chica nueva era todo eso, mis ropas oscuras la mayor parte del tiempo llamaban la atención.

Me puse mi vestimenta de vuelta, derrotada, no había vestido que me hiciera sentir segura en la boda.

No sabia si era lo correcto.

La palabra casarse era demasiado grande para mi.
Sali del probador, en busca de Althea, Pero en vez de eso me encontré una nota.
'' Tasia.
Perdón, se me adelanto un inconveniente. Te veré luego, te quiero. ''
Perfecto mi unica amiga me abandono, negando con la cabeza salgo de la tienda despidiendome de la chica que me atendió empujo la puerta, la campanilla suena en mi salida.
El día nublado, es más deprimente que los anteriores, mi vida paso de aburrida a más aburrida. Camine por el pueblo en dirección a mi trabajo, era cajera en un pequeño negocio de artesanías y chucherías.
La caminata fue fría, meto mis manos en los bolsillos de mi abrigo, buscando algo de calor.
El pueblo en si era pequeño, todos se conocían, me estaba acercando a mi trabajo cuando veo a la señora Joan hablando con alguien afuera del local, La señora Joan era la dueña. Ella al igual que yo, fue en su momento '' nueva'' en el pueblo, se rumorea que es una bruja.
No es muy querida por aqui, por eso me sorprende que este platicando con alguien.
Al acercarme más, me di cuenta que era James. Joan se percata de mi y me sonríe.
— Neve, llegaste en el momento preciso, este chico necesita trabajo. Y lo contraté, tiene un buen aspecto y inspira misterio. ¿Qué más puedo pedir? me da confianza, asi que desde hoy trabaja para mi, sera tu compañero — la señora Joan hablo tan rápido que a penas pude procesar lo que acaba de decir.
Era como obvio, es una Bruja. ¿De verdad creían que le molestaría trabajar junto a un demonio?.
Sin nada más para decir, solo asiento, paso al lado de ambos, sigo el pasillo estrechó.
El local llamado El toque de lo inevitable, se ubica en el centro del pueblo, viene poca gente, las personas del pueblo creen que es un lugar secreto de brujas, duendes, entre otros. La mayoria entran por curiosidad pero siempre se llevan algo.

¿Casualidad?

No se crean, la señora Joan puede persuadir a cualquiera, pero aun así Los pueblerinos piensan que es una bruja, con malas intenciones.

Entro al final, buscando mi casillero. Para guardar mi mochila y poder ubicarme en la caja. Al abrir el casillero, miro el espejo y me encuentro a James detrás mio.

veo fijamente sus ojos verdes y por minutos me pierdo en ellos

Cierro el casillero, para darme la vuelta.
— Hola de nuevo, dolce.— su voz áspera, recorre mis oidos. —¿Puedo usar el casillero al lado tuyo? – Pasa por al lado mio, rozando mi hombro con su pecho, me detengo para apreciar como viene vestido.
Chaqueta negra, pantalones negros y una polera roja. Todo en el grita misterio, su cabello desordenado, da una impresión de recién levantado.
— Hola de nuevo, james. — Le sonrió para alejarme de los casilleros y ubicarme en la caja.
hoy sera un dia, no tan aburrido.
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La señora sale por la puerta con el libro que le acabo de vender, un Especial. Asi los clasifica Joan, cuando se tratan de rituales.
— Neve, ¿Podrías decirle al misterioso que me ayude a cargar unas cajas al camión? — Joan se asoma por la puerta de su oficina.
— Claro, no te preocupes le avisare.— Cierro la caja con la llave, para luego salir y buscarlo entre los estantes de libros.

El local es bastante grande por dentro, tiene en si 6 secciones de libros o artículos.
1° Susurros : Donde encuentras eso que andas buscando y rituales.
2° Sperare (esperanza) : La última que se pierde.
3° Vecchie Storie (viejas historias) : Historias escritas, contadas por los pueblerinos de todo el mundo.
4° El Salvador : Para los creyentes.
5° Sobrenatural : Lo inexplicable, encontrarán de todo.
6° Salvezza (salvación) : Una seccion con solo 3 libros que hablan de la salvación y el perdón.
Hay una 7° sección: Shinjitsu : Lo oculto por el mundo.

La séptima seccion es una zona vip, ahí se organizan las reuniones de Joan y su aquelarre. Esta prohibida la entrada si no perteneces a el.
Sigo buscando a James, lo veo saliendo de la secta sección, recuesta su cabeza en la muralla, susurra algo al viento y aprieta su puño.
— James— solo pronunciar su nombre hace que su cabeza giré y nuestros ojos se encuentran.
— Dolce — se acerca y me abraza, me quedo quieta y me susurra al oido.

Salvami.

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Nota de la autora:

Hola, ¿Qué tal?
Hasta aqui el capitulo 3 espero que les guste.
no olviden, votar y comentar.
tambien pueden compartirla con sus amig@s :(
los amo❤️
Nel buio: en la oscuridad.