No quedaba nada más que 5 días para finalizar el semestre, finalizar con las clases e ir poco a poco dejar de trabajar para ya tener mis vacaciones. Era lunes por la mañana, Amanda y yo iríamos a clases, aunque lo único que hacíamos en la escuela esos días era solo hacer un pequeño repaso de lo que habíamos visto en clases ese semestre y prepararnos para lo que tendríamos que estudiar el próximo, por lo cual era prácticamente innecesario ir esa semana. La noche anterior me la pase practicando arquería en el bosque, hasta que fue la hora de cenar y me fui a casa.
Hoy me levante y me puso unos jeans ajustados, una chaqueta de mezclilla, una camiseta de color negro con tirantes y mis vans negras. Desayune con Amanda y fuimos al colegio, ella iba a La secundaria y yo a la preparatoria, aunque estudiábamos en una escuela la cual tenía todos los grados.
Al llegar al la escuela me separé de Amanda y fui a mi casillero en busca de mis libros, ahí me encontré con Casandra y Melisa, mis dos amigas.-Hola- dijeron a coro para saludarme –Hola- les correspondí el saludo.
-¡El profesor Dixon es el peor de todos!- Dijo Casandra enojada, tal vez porque le puso una nota que ella no se merecía, ya que ella es la típica inteligente de la clase.
-¿Por qué?-Le pregunté. –Resulta que el profesor estaba explicando algo en la pizarra y Casandra levantó la mano para corregirle y el profesor le dijo “Cállese y deje de hablar en clases” y después la envió a detención- Explicó Melisa. -¿Cómo que a detención? Es la última semana de clases, es completamente ridículo.- Les dije. –Dímelo a mi- Dijo Casandra.
Tocó la campana y entramos al salón de clases, el día transcurrió normal. Salimos una hora antes que los días normales, debido a que era la última semana y todos en la escuela andaban más apurados. Aprovechando que mi turno en la librería comenzaba dentro de dos horas más con Amanda fuimos al centro comercial a comprar ropa para el verano.
-Sarah tengo que contarte algo, pero prométeme no contarle a mamá ¿Ok?- Me dijo Amanda muy preocupada. -¿Qué ocurre? Cuéntame.- le dije. –Resulta que reprobé el examen de matemáticas.- Me contó. –Tranquila, no es para tanto. Tú tienes muy buenas notas en matemáticas y que hayas reprobado no te baja mucho tu promedio.- La consolé. –Ok gracias.- Me dijo mejor. - Pero eso no cambia que le contaré a mamá, no se enojará tanto, tranquila.- Le dije. Transcurrieron las dos horas, dejé a Amanda en casa y yo me fui a mi trabajo.
-Hola señor Smithers- Dije saludando a mi jefe. –Hola Sarah- Me dijo el hombre de no más de sesenta y cinco años.- Ahora tengo que salir, pero va a venir un jovencito que habló por teléfono por un libro que se llama “La leyenda de la Orden de la Garra” que está en la sección cinco ¿Se lo podrías entregar tú?- Me preguntó mientras se ponía su sweater. –Claro, adiós señor Smithers.- Me despedí de él y me dirigí a donde me indicó donde estaba y encontré el libro que me dijo, tenía un empastado muy antiguo de cuero y en letras plateadas decía el título del libro y tenía una huella de una garra. Junto a el me encontré uno más interesante, el tenía un empastado de cuero rojo y en letras doradas “La leyenda de la Orden del Fuego”, lo abrí y comencé a leer la historia de que eran enemigos de los de la garra y que su líder Rita murió durante su derrota y dijo que su descendiente aparecería dos siglos antes de que ella resucitara. Le di la vuelta a la página y aparecía un dibujo del bosque cercano a mi casa, una especie de mapa, no le di importancia y le di otra vez la vuelta a la página y vi un dibujo de una chica muy parecida a mi, no, no muy parecida a mi si no que era yo. Me quedé impactada y muchas preguntas pasaban por mi mente ¿Por qué había un dibujo de mí en ese libro que por lo menos debía tener 700 años? ¿Quién era esa? Mis pensamientos cesaron cuando escuché la puerta de la tienda abrirse y vi entrar a un chico muy guapo, alto, de cabello castaño y ojos azules. –Disculpa, llamé por un libro- Me dijo. –Ah sí , toma.- Se lo pasé. -¿Te gustaría que te lo envolviera?- Le pregunté. –No gracias me lo llevaré así. ¿Cuánto tengo que pagar?- -Son 50 libras.- le dije. –Ok, ten.- me pasó el dinero. –Hasta luego.- Le dije. -¿Tu estas en la preparatorio?- Me preguntó. – Sí. Supongo que tú ya estás en la universidad ¿verdad?- - No, me estoy tomando un año de relajo y luego iré a la universidad.- -¿Cómo te llamas?- Le pregunté. –William Marbury ¿Y tú?- -Sarah Johanson- Le contesté.
-Ok me tengo que ir. Adiós Sarah- - Adiós.-
Luego de eso de inmediato volví a observar el libro en el que aparecía mi dibujo, era casi imposible que hubiera en Escocia, o en algún lugar del mundo, hubiera alguien igual a mí. Tal vez alguna ancestro mío se pareciera a mi, aunque mi bisabuela o mi abuela ya me hubieran dicho que me parecía a alguien. Pero ya que , al llegar a casa investigaría acerca el tema. Con el rato llegaban clientes y yo los atendía, llegó el señor Smithers y le pregunté si podía llevarme ese libro a casa y el me dijo que si. Terminé de trabajar y llegué a mi casa a investigar y a leer el libro. Vi que la siguiente en la línea para ser la líder, tenía que ser valiente, fuerte, inteligente e intrépida. No quiero sonar muy engreída, pero creo que encajo perfecto en esa definición. Le mostré el libro a Amanda. -¿Por qué apareces tú en ese libro?- Me preguntó. – No lo sé pero tengo que averiguarlo. Lo encontré hoy en la librería y mira lo que dice.- Le mostré lo que decía.-“..Rita dijo que su descendiente aparecería dos siglos antes de que ella volviera y ella sería la elegida para salvar al mundo de la Orden de la Garra. La nueva líder tiene que ser valiente, fuerte, astuta, inteligente e intrépida. Su aspecto físico tiene que ser cabello rojo muy fuerte para representar el elemento del fuego, ojos azules los cuales cuando va a atacar se tornen rojos y su piel blanca y pura. Pero lo más importante de todo es que debe saber controlar sus poderes y capacidades de controlar el fuego…” Luego aparecía el mapa del bosque cercano a casa y un dibujo de una pequeña cabaña ubicada muy al fondo del bosque la cual se suponía que era la guarida de la Orden del Fuego. –Wow, al parecer la elegida ya esta aquí.- Dijo Amanda. – No lo sé, tal vez sea coincidencia y tan solo sea un mito todo esto.- Le dije. –No lo creo, es obvio que tú eres la nueva líder, cumples con todas las características y es muy obvio que eres tú la del dibujo.- Ya era muy tarde asique nos fuimos a dormir, ya que mañana sería día de clases.
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La Orden del Fuego.
Viễn tưởngSarah Johanson de 17 años es una chica común y corriente como todas las adolecentes normales que va a la escuela , hace deberes , trabaja , tiene amigas y hace todo lo que una chica puede hacer¿Pero que pasaría si ella se enterara que es la elegid...