encerrados | taekook os

𝒆𝒏𝒄𝒆𝒓𝒓𝒂𝒅𝒐𝒔 → parte única

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yoongi suspiró.

era la tercera vez que recibía un golpe -que apenas y dolia- de su amigo pelirrosa. el pequeñín llevaba como una hora pensando en que hacer.

fue de pronto cuando recibió una mirada matadora —yoongi ¿y si me ayudas a pensar? —terminó gritando la última palabra por la rabia.

—pero...

—no sé como hacer que esos idiotas acepten lo que sienten y me están exasperando— dijo. soltó un suspiró resignado y se tiró hacia atrás, siendo amortiguado por la cama.

—pero chim, deberías dejar que ellos lo solucionen solos.

—¡pero es que son unos tontos! y ninguno sabe que es realmente lo que sienten, y como no quieren aceptarlo se tratan como el orto.

—hey, cuida tu vocabulario— el mayor suspiró. —pero son cosas que ellos deben resolver.

—pero no estaría mal darles un empujonsito...

—jimin... —advirtió.

—por favor hyung —se acercó.

el pelinegro refunfuño por ser débil a esos ojitos y aquella carita tan hermosa que lo tenía hasta los pies.

—bien, pero me debes algo.

—¿qué cosa?— preguntó sonriente.

el mayor estiró sus labios y señaló a los mismos, a lo que el pelirrosa se sonrojaba.

—¿h-hyung quiere b-besitos? —. levantó su torso, volviendo a sentarse en la orilla de la cama. agachó su cabeza y tapó su cara con sus manitas.

—sip.

—pero debes de ayudarme.

—lo haré jiminie.

entonces el menor se acercó, aprovechó que estaban sobre la cama del pelinegro y que la diferencia no era nada, apoyó sus manitas en los costados, dandose impulso, cerró sus ojos a la par del mayor y beso los suaves labios de este.

solo un piquito.

y otro.

y otro.

y yoongi agarró la carita de jimin e hizo durar mucho más aquel besito. pero sin darse cuenta, el beso cada vez iba con más intensidad.

de pronto los dos se encontraban apegados sobre la cama, yoongi encima, y jimin rodendo la cadera de su mayor con sus piernas. sin dejar de besarse.

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—¿qué es lo que pasa minie? —habló por teléfono el castaño.

[—¿puedes ir a buscarme al salón de artes?]

—pero siempre está cerrado, además falta poco para entrar a clases.

[—tae, por favor, estoy atrapado.]

—voy. —comenzó a avanzar rápidamente hasta la dichosa sala.

[—taehyung, los conserjes no están, ve por alguna persona que tenga fuerza porque hay que forzar esto.]

—¿y quien quieres que venga si están todos en cla... —en ese momento, de casualidad, vio como un pelinegro ponía rápidamente sus cosas en un casillero, se encontraba cerrandolo. taehyung despegó el teléfono de su oído y fue donde el chico para hablarle. —hey ¿puedo pedirte un favor?