encerrados | taekook os

𝑒𝑥𝑡𝑟𝑎: 𝑜𝑝𝑒𝑟𝑎𝑐𝑖𝑜𝑛 𝑡𝑎𝑒𝑘𝑜𝑜𝑘

Porque no puede faltar una primera vez UwU

Capítulo con mucho fluff.

Mayúsculas activadas ah.

Capítulo bieeeeeen largo (4500 palabras)

•♡°:.*.:°♡•

—Uh...

—¿Qué sucede Tae?

El castaño revolvió una vez más los objetos desordenados y luego se frustró por no encontrar lo que buscaba.

—No encuentro el bloqueador ni el repelente de mosquitos...

Jimin levantó una ceja, soltó una risa y habló: —Tae, fue lo primero que colocaste en la mochila.

El mencionado se giró para encararlo —¿De verdad?

—Sip— y sonrió.

El castaño se dirigió hasta la cama de su habitación para dejarse caer en ella mientras soltaba un ruidoso suspiro.

—¿Por qué estas tan distraído?

Taehyung lo observó con un puchero y luego cubrió su carita con sus manos.

—¿Qué pasó bebé? —preguntó suavemente el pelirrosa mientras se ubicaba a su lado, se recostó quedando cerca y viendolo de frente, para hacerle saber que era escuchado.

—Peleé con Jungkook...

—¿Por qué? ¿Quieres decirme que fue?

—Él dijo que iba a dejarlo solo por ir al campamento.

—Pero no es porque tu quieras ir... ¿Él sabe eso?

El castaño negó, soltó un suspiro pero luego sus ojos se abrieron con sorpresa, miedo también.

—Jimin.

—¿Mh?

—¿Que fecha es hoy?

—Domingo 29 de Agosto —dijo luego de ver en su celular.

El castaño gritó en frustración, luego comenzó a golpear su cabeza con sus manos, a lo que el pelirrosa lo agarró y preguntó que pasaba.

—¡El miércoles es el cumpleaños de Jungkook! ¡¿Cómo pude olvidarme?!

—¿Qué qué? Cumpl- no manches, como no se iba a enojar-

—¡Uh cállate!

—Y yo que estaba ayudandote.

—Soy un idiota —se puso de pie para ir a buscar a su madre al living, mientras su bajo amigo lo seguía por detrás, queriendo saber que iba a hacer.

La señora se encontraba de espaldas, mientras lavaba lo que sea que fuera eso, sin sentir que Taehyung caminaba hasta ganarse detrás de ella.

—¡Mamá!

—¡Ay! —. Saltó en su lugar por el susto —Taehyung por Dios, me asustaste. —Se puso de frente para observar a su hijo —¿Qué pasa?

—Mamiii— alargó la última vocal, signo de que iba a pedir algo. —Recuerdas que mañana voy a un campamento ¿cierto?

—¿Cómo podría olvidarme de eso?

—No se responde una pregunta con otra, —mencionó el pelirrosa, recibiendo una mirada algo tenebrosa de parte de la madre de su amigo, —eh, digo, ustedes sigan, voy a la habitación de Tae, con permiso. —Y se retiró del lugar.