En un lugar llamado carmesí existían seres poderosos, supremos sus poderes eran inigualables todos los seres de ese lugar lo eran. En ese lugar se encontraba un reino. Era gobernado por Bernardo un Rey soberbio, corrupto que sólo pensaba en él. Antes de que su padre muriera una bruja los había advertido que un 25 dé febrero llegará un ser mucho más poderoso que ellos llegaría a poner orden en ese lugar y haría de ese su reino. El ser sería proveniente de carmesí nacería ahí por ello cada 25 de febrero el Rey mata a cada niño que nazca en esa fecha.
25 de febrero 1998
En una casa habitada por MarthaTrens la mujer estaba embarazada estaba punto de dar a luz ella sabía perfectamente quien asesinaba a los bebés pero ella no permitiría que el suyo le pasará era poderosa. Su bebé quería salir, era hora. la mujer concentró su poder mantuvo un escudo para impedir que ese veneno en el aire matará a la criatura.
- Lo lograremos, Martha - le dijo la pertera. Martha asintió
- Tienes que prometerme algo, Melissa.- Melissa la miro- cuándo nazca mi bebé huiras con ella la sacaras de Carmesí y la cuidaras como si fuese tuya - la mujer la miró asustada.
- ¿Por qué Martha? ¿Acaso no la quieres?
- Claro que lo hago. Por eso te lo pido. Mel llevatela lejos. Por favor. Aquí corre peligro.
Melissa asintió. Martha comenzó con a quejarse del dolor. El bebé saldría.
Era un día horrible para los ciudadanos, en especial embarazadas que tuvieron la desgracia de que sus bebés nacieran en esa fecha. Desde muy temprano los ya dada las 12:00 a.m. comenzaban los asesinatos de bebés. Llanto, desesperación , se escuchaban por todo el lugar nadie sabía quien lo hacía y porque para ellos era una fecha maldita, nadie sabia que su Rey con uno de sus poderes mataba sin remordimiento a cada niño.
Martha seguía en labores de parto. Le dolía tanto tenía que estar concentrada en mantener el escudo y pujar. El escudo estaba punto de romperse y Martha de rendirse cuando de pronto el llanto de la criatura sono. Marha a pesar de estar cansada pudo mantener el escudo. Martha quería conocer e su bebé. Melissa limpiaba al bebé cuando se acercó a Martha. Melissa susurró:
-Es una niña.
