"Yo amo a mi mamá", dirá cualquier hijo del mundo, pero a mí, no me superarán, no superarán el indescriptible amor que siento por ella, por que yo lo digo con el corazón, alma, seriedad y seguridad, amo a mi mamá.
A ese ser, que sufrió por mí, por sólo tener el deseo de tenerme en su vida para llenarme con su amor y cuidarme, sin esperar nada a cambio. Únicamente lo mismo, amor.
Río de los que dicen que no creen en el amor, no se dan cuenta que gracias a tal manía siguen de pie, al amor de su madre. El único amor que es incondicional y a muerte desde el principio, sin nisiquiera mencionarlo. Te das cuenta.
Aquella persona que mueve mundos para que no te falte nada, la única persona que estará para tí cuando todo se te caiga, incluso tu columna más fiable, la más resistente y durarera se caerá sobre tí traicionándote, pero nunca tu madre, por que es parte de tí. El día en que caigas en lo más profundo, ella también, para ayudarte a volver a subir.
Madre
¿Quién te escuchó cuando no se te entendía, de tanto desconsuelo?, ¿quién te sostuvo la palma de tu mano, mirándote con ojos brillosos preocupados...?
¿Quién te enseñó a amar de verdad...?
En vez de castigos, me das consejos de vida, en vez de golpes y gritos, me das caricias y risas, y ante cualquier adversidad, ya me preparas otro camino. Desde muy antes.
Tal parece que sabes la historia de mi vida, ves las cosas venir a leguas, tal como águila, estás preparada para protegerme de eso que no faltará por intentar hacerme daño, tal como leona... más te importa mi sueño que el tuyo, tal como búho en su nido.
Tus consejos son más sabios que el refrán de aquél que vivió 100 años y no se olvidó de sus errores...
Eres la más cierta en horas inciertas... una casa con puertas abiertas...
Eres la senda más apacible, cubierta con suaves brisas, apuntando hacia el cálido ocaso.
Envidio tu sabiduría, idolatro tu fortaleza... practico tus métodos.
Aunque él ya no esté, gran parte de su ser, se queda contigo, lo conocías de pies a cabeza, qué significaba cada mirada o tono. Sabrías con certeza lo que diría en cada situación, lo que pensaría o haría...
Recuerdo que me habías dicho que mire al cielo, que la estrella más brillante es él, tú eres la otra estrella, con los pies en la tierra.
Madre, siento que he empezado a vivir hace poco, que he dicho muchas cosas que no querría decir, otras que no quería hacer, pero ahora, siento que puedo reformar todo de vuelta, y es cuando más necesito de tus guías.
Fuiste a rehacer tu vida, convertiste tu nuevo hogar en un jardín de fantasía, a tu compañía, le enseñas a vivir de la buena manera, no tardaste en ganarte los corazones y confianza de una gran familia, tienes tantos hogares, para tí, de aquellos que habitan en tu corazón...
Haré mi mejor esfuerzo por sacarte una sonrisa por cada lágrima dedicada a mí, por tus preocupaciones y precauciones, tus insomnios, tus dolores de cabeza, tus enfados contenidos transmutados en armonía.
A mi mayor acreedora, que me dió alas y caminó por las espinas de mi camino para apartarlas.
A mi tabla de naufragio, que me ayuda a flotar sobre mis incertidumbres.
A mi compañera de vida, mi creadora, brindadora de luz.
Te dedico esta breve escritura.
Mi mayor fortuna, oculta a simple vista, por qué tardé tanto en darme cuenta de tu valor?
