One Last Time [KookJin]

Lie To me [Especial]

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Verlo dormir tan tranquilamente y sin preocupaciones en su rostro, era lo que Taehyung amaba más.

Una nostálgica sonrisa enmarcó su rostro, pensando, si tan solo el hermoso hombre en su cama le perteneciera completamente, todo sería perfecto.

¿Qué si no lo sabía? Claro que lo hacía, pero que podía hacer si su amor era más grande que cualquier otra cosa.

El hombre se había ganado su corazón por completo, pareciera inverosímil como después de todo, su amor por él seguía intacto.

Y que si lo llaman idiota, ¿no era el amor quién te volvía de esa manera?

Ocho de la mañana marcaba ya el reloj. Quizás era momento de que se preparara para ir trabajar. SeokJin tal vez no despertaría hasta el medio día, pues era de madrugada cuando lo oyó llegar, mientras él fingía dormir profundamente para evitar que SeokJin viera el abismal dolor que todo aquello le ocasionaba.

¿Quién dijo que el amor era solo luz y felicidad? Haya sido quien haya sido, se equivocó absolutamente. Porque para Taehyung era todo menos eso.

Sentado en la cama con los codos recargados en sus piernas, intentaba no llorar cuando observó la sortija de oro que sostenía entre sus dedos, aquella que representaba lo que alguna vez fueron él y Jin; la fiel promesa de amor que ambos se habían profesado tiempo atrás.

Algunas veces quisiera jamás haberlo conocido, porque ahora le era sumamente difícil olvidarlo. Pero regresando el tiempo atrás, cómo podría desear algo como aquello. Lo amaba tanto. 

Al parecer se habían conocido demasiado pronto, creyeron que eran el destino y el para siempre del otro, lamentablemente, no fue así. Porque Taehyung no se dio cuenta de que el corazón de su amor, ya estaba ocupado y reservado para alguien más.

Mejor dicho, si sabía, solo que siempre quiso imaginar que podría lograr cambiar eso. La emoción de los prontos sucesos, y la ilusión de casarse, lo habían llevado a creer en ello.

Intentó alejar las lágrimas que poco a poco se empezaron a arremolinar en sus ojos. Y espabilo un poco, cuando una suave y somnolienta voz le llamó.

—¿Tae?

El castaño volteó lentamente y sonrió al verlo, sus pequeños ojos estaban rojos y un poco hinchados debido a que acababa de despertar; sus brillantes cabello se encontraban en distintas direcciones, y sus mejillas, estas estaban tintadas de un ligero tono carmín que lo hacían lucir sumamente lindo.

—Pensé que dormirías por más tiempo, cariño, no quise despertarte, lo siento. —Dijo, inclinándose hacia bajo para dejar un pequeño beso en la frente de SeokJin, mismo que recibió gustoso.

—Ah nada de eso, he despertado porque ya no tengo sueño. No tienes porqué disculparte. —Sonrío tiernamente, mientras lo observaba y estiraba sus músculos.

Taehyung le regresó la cálida sonrisa, poniéndose de pie para irse a duchar y prepararse para el trabajo.

SeokJin lo siguió con la mirada y también se levantó. —Ire a preparar tu desayuno, vamos apúrate y no tardes en bajar. —Le dijo, mientras se ponía frente a él y se paraba de puntitas para dejar un pequeño beso en sus labios.

Taehyung solo lo observó irse, negando lentamente, su corazón sólo dolió un poco más.

Cuando bajó a la cocina, lo escuchó tararear alguna vieja canción romántica, mientras lo observaba mover las caderas de aquí y allá, moviendo la mezcla de los panqueques que estaba por preparar. No pudo evitar que una pequeña risa escapara de sus labios, lo que llamó la atención de SeokJin, quien volteó para reir junto a él.