Eran las 8 AM cuando el despertador resonó en la silenciosa habitación de Zoe Mulligan. Un brazo salió por debajo de las mantas y como si supiera exactamente lo que estaba haciendo presionó el botón de "posponer alarma", El brazo de Zoe volvió a su lugar anterior y está volteó hacia el lado de la pared. Las cortinas dejaban ver un cielo gris, algunas nubes negras venían desde lo lejos, estaba claro que iba a llover. El celular volvió a sonar, pero esta vez con un ringtone diferente. Un sonido de queja provino del montón de mantas antes de que una joven de pelo castaño oscuro se sentara en la cama. Se refregó el ojo derecho con una mano mientras que con la otra atendía su teléfono, una voz enérgica sonó del otro lado de la línea.
- Buenos días bella durmiente- dijo
- Buenos días a ti también, ¿Sabes por qué en las películas nadie llama a las princesas por teléfono para despertarlas? – respondió Zoe
- Mmmmh- pensó la otra joven- ¿Porque no hay señal en los castillos? –
- No, porque no les gusta que arruinen su sueño de belleza con ruidos molestos...- Se escuchó una risita al otro lado de la línea- Porque crees que siempre las despiertan con un beso... Es obvio, quien podría enojarse con un apuesto príncipe azul en presencia- añadió riéndose al final.
- Está bien, perdón por no ser un apuesto príncipe azul, pero soy tu mejor amiga y te conozco lo suficientemente bien como para saber que has apagado tu alarma- dijo en tono de regaño. – Y sabes muy bien que me prometiste acompañarme al funeral de Amira...-
- Lo se... ¿De verdad tengo que ir? No intercambié mas de dos palabras con ella, no la conocía. - dijo a la vez que se dejaba caer en la cama nuevamente.
- Oh no, no otra vez- la chica sonó enojada- Sabes que era mi amiga, quiero ir... Y no quiero ir sola, mi madre tiene que trabajar, no tengo a nadie más. – Zoe notó tristeza en su voz y se sintió mal, es cierto que Vicky era cercana a Amira. Vicky le había contado hablado muchas veces sobre ella, ambas estaban en el grupo de periodismo y compartían al menos cuatro horas semanales.
- Esta bien, tienes razón, ya mismo me levanto- respondió al fin decidida a salir de su edredón.
- Genial, paso por tu casa en media hora- dijo rápidamente y colgó.
La desaparición de Amira había sido una desgracia, sin lugar a dudas, solo que Zoe no la conocía lo suficiente como para estar afectada al respecto. Las únicas veces que habían hablado fue la vez que hicieron equipo en clase de biología porque Vicky había faltado y la vez que Amira le había hecho una pregunta sobre los horarios. En esas dos ocasiones a Zoe le pareció que Amira era una chica muy simpática. Todo lo que Zoe sabia de su desaparición fue que había sido hace una semana, había salido de su casa al horario habitual para ir al colegio, no obstante, jamás llegó, lo cual era muy extraño teniendo en cuenta que rara vez faltaba y que era muy comprometida con las clases. Al otro día la familia hizo el reporte de persona perdida y se abrió un caso. La semana siguiente se encontraron unos restos imposibles de identificar casi a las afueras del pueblo, pero se dijo que era ella ya que la ropa que llevaba ese día y su pulsera fueron reconocidas en la escena del crimen. Eso era lo poco ella sabía, Amira había salido de su casa el día lunes, los restos fueron encontrados el día martes de la siguiente semana y miércoles, ese día, la familia había organizado el funeral.
El mal humor de Zoe se hizo presente cuando vio por la ventana, si hay algo que ella odiaba era la lluvia. Por supuesto que si tenía que estar en casa era perfecto, pero no en un día como que el que tenia por delante.
La muchacha de pelo castaño se vistió rápidamente, se puso unos jeans negros, un sweater de lana negra y sus botas a juego. Se cepillo un poco el pelo y bajó rápidamente las escaleras, no quería hacer esperar a Vicky... Vicky, pensó, no se había parado a pensar como la estaba pasando su mejor amiga. Seguramente estaba destrozada, aun así, ella no se lo había dejado notar. Vicky era una de las personas mas fuertes que Zoe conocía, Se contaban todo , Vicky siempre parecía tener el consejo para todo. Desde el día que se conocieron en jamás se separaron, fue el primer día de clases en la secundaria, se sentaron juntas y Vicky rompió el hielo, había dicho "Linda mochila, ¿te importa si me siento?" En ese entonces tenían 14 años y hoy estaban por cumplir 18 años, estaban por terminar la secundaria, el tiempo pasa tan rápido pensó Zoe mientras se envolvía el cuello con un pañuelo.
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¿Dónde está Amira?
Mystery / ThrillerZoe Mulligan jamas había intercambiado mas de dos palabras con la desaparecida Amira Kravitz, sin embargo, una nota de un desconocido la perturba y decide indagar mas a fondo... Ahora los secretos mas oscuros la mantienen despierta por las noches.