Ateos y Católicos - Larry Stylinson (One Shot)

Parte I

Harry iba a la iglesia todos los domingos, tenía una família muy conservadora, por ello, tenía que siempre vestirse lo más formal posible para asistir a la misa.

Era patético que unos padres obligaran a su hijo de 8 años ir a la misa y guardar respeto, pero a Harry le gustaba ir allá, le gustaba el silencio y la tranquilidad de la capilla. Le gustaba creer en Dios.

Pero aún más, le gustaba ver todos los domingos al "chico punk" como le gustaba decir. Siempre era muy callado, bufaba y rodaba los ojos mientras todos rezaban, pero a Harry le gustaba observarlo. Le parecía hermoso, pero nunca se dió el lujo de hablarle.

*****

Un domingo, el "chico punk" salió de la capilla durante el Padre Nuestro. Harry lo miró salir y le preguntó a su mamá si podía ir al baño, pero solo siguió al "chico punk".

El misterioso chico se encontraba sentado en una de las bancas afuera de la iglesia, miraba a las personas que pasaban en la calle y ni se dió cuenta de que Harry estaba justo detrás suyo.

-¿Qué haces aquí? -preguntó Harry haciendo con que el chico se asustara y se volteara furioso.

-¿Quién eres, niño? -le preguntó con fastidio. Harry se sentó a lado suyo, en una distancia considerable.

-Soy Harry. ¿Por qué estás acá afuera si el Señor nos espera adentro? -insistió mirando la ropa del chico. Se vestía totalmente de negro y llevaba un piercing en la ceja. Harry, en cambio, llevaba un traje gris y sus pequeños rizos levemente peinados hacia atrás.

-Tan joven y tan idiota. -suspiró Louis.

-Pero mi mami dijo que la iglesia era la casa de Dios... -dijo Harry haciendo un puchero.

-Son puras mentiras, ese tal "Dios" no existe, acéptalo. -bufó enojado.

-Pero... -intentó decir Harry pero Louis lo interrumpió.

-¡Pero nada! Dios no existe, si tu "mami" te dijo eso es porque ella también cree en una persona que no es real.

-Dios no es una persona, es una figura que vive en el corazón de cada ser humano. -se defendió Harry.

-Pues, por lo menos, no vive en el mío. Necesitas dejar de ser tan idiota, niño.

-No me digas niño, ya te dije que me llamo Harry.

-Ok, Harry, por cierto, me llamo Louis.

*****

Las semanas pasaron y Harry, siempre a la mitad de la misa, se escabullía con Louis para sentarse en la misma banca donde se habían conocido. Ambos se habían vuelto grandes amigos, pero Harry sabía que era un peligro andar con Louis.

-¿Por qué no crees en Dios? -le preguntó Harry un domingo.

-¿No te acuerdas? Te lo dije cuando nos conocimos, Dios no existe. -respondió Louis acariciando los rizos de Harry.

-Pero... ¿por qué todos creen en él si no es real?

-Porque son unos idiotas, nosotros, los ateos, tenemos la miente mucho más abierta.

-¿Qué son los ateos? -preguntó Harry curioso.

-Son los que no creen en Dios. Tú, y la mayoría de las personas, son cristianos, quienes creen en Dios. -explicó.

-Yo quiero ser como tú, Lou... quiero ser ateo.

*****

Después de unos meses, a Harry le había empezado a gustar Louis. Sabía que estaba mal, ya que él era un chico y Louis también, pero le encantaba Louis de todas formas.

Y, un domingo mientras se abrazaban sentados en la banca, Harry decidió confesar su amor hacia Louis.

-¿Lou? -preguntó interrumpiendo aquel momento de tranquilidad y silencio entre ambos.

-¿Qué pasa, Hazz? -preguntó Louis acariciando su brazo con los dedos.

-Tú... me... me gustas. -dijo finalmente sonrojado.

-Tú también me gustas, Harry. -dijo Louis enserio mirando a Harry a los ojos.

-Pero... eso está mal... mi mamá dijo que a los chicos les debe gustar las chicas... -suspiró Harry.

-Tú mamá miente. -dijo seguro.

-Pero ella dijo que estaba en la Bíblia...

-La Bíblia solo cuenta mentiras. ¿Te gusta alguna chica? -preguntó Louis.

-No... me gustás tú... -sonrió.

-Entonces no hay problema, el amor es solo uno, no puedes elegur a quien amar, siendo chica o chico. No te encuentres estúpido por gustarte un chico, los otros son estúpidos por creer que esto no es correcto.

-¿Entonces podemos estar juntos? -preguntó Harry esperanzoso.

-Solo si confías en mí. -dijo Louis tomando las manos de Harry y acercándose a su rostro.

-Confío en tí. -dijo Harry por fin uniendo sus labios a los de Louis en un tierno beso.