Capitulo I

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Siento mi cuerpo muy pesado, tengo mucho calor, como si tuviera el sol justo sobre mi cara, pegado a mí. Un aroma a dulces petunias me invade por completo, al fin algo familiar en un lugar tan desconocido para mí. Abro mis ojos y veo una habitación pequeña, de unos pocos metros cuadrados con una puerta cerrada, el colchón sobre el que estoy recostada es bastante cómodo, jamás había estado en un lugar como esté, pero tampoco recuerdo estar en otro lugar que no sea el actual. Me siento en la orilla de la cama, y veo como pasa el tiempo en un reloj blanco justo frente a mi...una...dos...tres horas y nada, nada venia a mi mente de tal lugar. Dieron las doce y un cuarto, cuando por fin logro oír algo al otro lado de la puerta.
Abre la puerta un chico de unos diecisiete años, ojos castaños preciosos, una nariz perfecta y ni hablar de la sonrisa de par a par que puso al entrar como forma de saludo, estaba acompañado de una niña que le aproximo unos quince años, bastante bonita a mi parecer, pelo rojizo y bastante alta, con una piel blanca como la de Blancanieves. Estaba muy sorprendida, realmente no entendía nada de lo que estaba pasando, y me atreví a preguntarles:
- ¿Dónde estoy? - Con una voz más tartamuda de la que suelo tener.
- Estas en las nubes... Bienvenida, soy Antonio. - Me responde con una dulce y sincera voz.
- ¿A que te refieres? Eso es imposible. – Estoy segura de que están bromeando, como el lugar donde estoy van a ser las nubes, ¿Acaso pensaran que estoy tan loca como para creerme semejante estupidez?
- No es imposible, es la realidad. Tu nueva realidad, acompáñame, te mostrare algo...- Me dice muy seguro de sí y casi obligándome a seguirlo, como si tuviera otra opción.

Antonio sale por la puerta muy calmado, lo sigo, intentando no entrar en desesperación hasta que me expliquen que esta ocurriendo. Detrás de mí la chica pelirroja cierra la puerta de la habitación y comenzamos a caminar por un largo pasillo traslucido, como las nubes, ya no había dudas, ¡podía caminar sobre las nubes!, me siento tan sorprendida como se estarán sintiendo ustedes, cosas imposibles estaban convirtiéndose en realidad.
Luego de caminar o mas bien flotar por un tiempo, llegamos al final del pasillo, donde había una puerta muy grande con bordes muy lindos, todo era de color blanco en ese espacio. Al salir, veo cinco puertas mas, igual de grandes y una pantalla gigante al medio de ellas, aquella pantalla era muy extraña, muy moderna, era como un vidrio pero podía atravesarse, en el habían, al igual que puertas, cinco listas con seis o siete nombres, no me detuve mucho tiempo a verlo porque Antonio seguía avanzando deprisa por entre las puertas, pasando un pequeño puente cristalino, llegamos a una especie de escuela, tenia un piso y era bastante amplia, había mucha gente moviéndose para todos lados. Al entrar, todo se detuvo, como si se parara el tiempo, la gente dejo de hacer todo y me observaron, seguimos avanzando hacia una mesa larga en el centro, donde había todo tipo de alimentos, en ese momento entendí, que no era una escuela, si no el lugar donde almorzaríamos.

- Sírvete todo lo que desees, debes estar hambrienta, ten aquí tienes un plato, si quieres más están por allá. Olivia y yo estaremos de aquel lado esperándote para explicarte todo y responderte lo que quieras saber. – Dijo Antonio señalándome un montón de platos que se encontraban apilados en un rincón y una mesa blanca con dos chicos y una chica sentados.
Le agradecí, tomé el plato y comencé a servirme comida, realmente no comprendía nada, ¿Será este un sueño?, sin tomarle todo el peso al asunto, caminé con mi plato a la mesa blanca que estaba en una de las seis esquinas y me senté, todo era como el primer día de clases, te encuentras todo desorientando queriendo que te expliquen donde está todo.
- Hola, soy Chloe... ¿podrían explicarme ahora que está sucediendo? – dije intentando darles a conocer mi tremenda ansiedad e impaciencia que estaba sucumbiéndome.
- Bueno, ya sabemos tu nombre, pero tu no conoces todos los nuestros; Ellos son Sam, Adam y ella es Alisha, ah claro, ya conoces a Olivia y a mí, Antonio, tu fiel servidor. – Fue inevitable no soltar una carcajada con su tono en el que se presentó a sí mismo, un tanto carismático.
No tuve tiempo de responderle, cuando Antonio comenzó a explicarme que estaba ocurriendo.
- Como te conté en tu habitación estas en las nubes, exactamente, sobre ellas, nosotros, los pertenecientes a los Clanes, podemos hacer tal cosa, caminar sobre las nubes, volar, y mas cosas que te enseñaremos con el tiempo.
- ¿A qué te refieres con Clanes? – me siento aún más confundida que antes.
- Clanes, a ver cómo te explico... tú tienes dieciséis años y te elegimos para que pertenezcas a nuestro Clan, especialmente yo, fui el que te analizo durante un largo tiempo para hablarte, nosotros somos los llamados "Ángeles", pero no somos Ángeles reales, no estamos muertos, pero al pertenecer al Clan adquirimos varios poderes, por así decirlo, entre ellos el encanto, que en unas semanas te explicaremos como funcionan tus poderes. Además, adquieres uno propio, por ejemplo, Olivia tiene la sabiduría, aprendió en un par de días, lo que nosotros en semanas estabamos en proceso. Sam se transforma en otros seres que el piense, Adam puede crecer o disminuir a tamaños que ni te imaginas, Alisha puede curar a las personas solo con tocarlas y yo puedo teletransportarme al lugar que quiera sin importar distancias, de ti depende el tiempo que te tomes en descubrirlo, en general, tu escogiste pertenecer a nosotros.

- ¿Escoger?, yo no escogí nada... - no recuerdo jamás haber visto a esas personas antes, ¿escoger?, no entiendo a que se refiere que me analizo antes de hablarme si nunca lo hizo hasta hoy.

- Si, precisamente Chloe, tu escogiste, fue tu elección... Durante doce meses estuve observándote, viendo tus actitudes, tus comportamientos, si eras digna de entrar a nuestro Clan, y al yo ser el líder, no puedo poner en riesgo a mi equipo por una mala elección. Al pasar ese tiempo, me aproxime a ti y te explique todo lo que ahora te cuento, pero te advertí los riesgos, sin sacrificios, no hay recompensas, ¿no?

- No entiendo a lo que te refieres Antonio, ¿Qué tipo de sacrificios hice?

- Volver a nacer... por supuesto conservando tu edad, pero empezando de cero, ya te eh dicho todo lo que debes saber para empezar de nuevo, en un par de semanas ya deberías de conocer tu poder propio y los chicos durante estos días te enseñaran el lugar y las personas. Olivia te explicara todo lo que debes conocer de tus poderes, el como controlar el vuelo, las reglas, y básicamente lo que hacemos aquí. Alisha te enseñara a pelear y defenderte. Espero te sientas en casa, porque este es tu hogar, estaremos para lo que necesites, solo evita hacer tantas preguntas, que a nadie le agradan los nuevos cuando son preguntones.

No entendía nada, la duda y la curiosidad para saber que vendría luego me carcomían por dentro, ¿Cómo era posible volver a nacer? y aun así permanecer con mi edad, pero lo que mas me alteraba era no entender porque Alisha tendría que enseñarme a defenderme... ¿defenderme de qué? y a pelear... ¿con quien?, no entendía nada de lo que ocurría, en mi mente se me cruzaban muchas cosas por la cabeza, pero si todo esto no es un sueño estoy muy ansiosa por descubrir mis "poderes"... Necesito entender que esta pasando aquí, iré a buscar a Olivia antes de que se me pierda de vista.



Espero les guste el capituló, pronto subiré los demás...☺️ .
No se salten el prólogo, ya que de todas formas es importante para comprenderlo bien 😊

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