Conejito Playboy «myg + pjm» +18 [Trad.]

Capítulo 5

Jimin se despertó a las 12:14 pm un sábado por la tarde. Se había dormido antes de masturbarse pecaminosa mente la noche anterior. Todavía se sentía mal por eso. Sin embargo tenia un largo dia por delante, por lo que no tenia tiempo para quedarse sintiéndose culpable.

Todos los sábados trabajaba un turno en Bunniez desde las 2 hasta la medianoche para obtener algo de dinero extra. Jimin odiaba los sábados. Sabía que estaba obligado a ser acosado sexualmente al menos 3 veces esta noche. Todos los hombres borrachos y escalofriantes de Seúl estarían en Bunniez, y Jimin, por decir lo menos, no estaba preparado. No era viernes, Yoongi no sería su protector esta noche.

Se arrastra fuera de la cama y camina hacia la cocina para hacerse unos huevos, tocino y tostadas. Termina de hacer su desayuno y prepara una taza de té. Después de que termina, se abre camino hacia la mesa de su comedor. Se sitúa y comienza a bajar mucho. La atmósfera de su apartamento era solitaria, por decir lo menos. Vivía solo, lo que le dificultaba poder ordenar cualquier cosa. Siempre estaba ocupado, y por eso, su departamento estaba hecho un desastre.

Jimin oye un pitido en su teléfono, y desvía su atención del desayuno. Él mira hacia abajo para ver aparecer el nombre de su maestro de baile, lo que le hace gemir internamente.

J-hope:

Asegúrate de llegar a tiempo el lunes por la mañana, tenemos una nueva rutina para revisar :D

Jimin suspira y deja su teléfono de nuevo, sin responder. Se sentía interminable para Jimin; sintió que vivía un estilo de vida programado permanentemente: trabajar en un bar barato para alquilar dinero, ir a la escuela, aprender nuevas rutinas de baile con Hoseok y luego volver a casa y tal vez encontrar tiempo para escuchar música o, en su último caso, masturbarse. Él podría muy bien llamar a sus padres en Busan y pedir un poco de dinero extra cada mes. Sin embargo, Jimin era terco. Si sus padres supieran que él estaba luchando tan mal, nunca lo dejarían vivir solo en Seúl. Sabía por qué decidió estudiar en Seúl, y no iba a dejar que se le pasara a sus padres que estaba luchando y corría el riesgo de perder todo por lo que trabajaba tan duro.

Jimin se puso su abrigo para salir de la casa hacia el trabajo. Era un día de otoño bastante frío, y tuvo que amurallarse para trabajar. Quería ahorrar un poco de dinero extra para la comida, y el trabajo estaba cerca, por lo que realmente no había necesidad de un autobús.

Finalmente llega a la entrada para Bunniez, y resopla muy fuerte antes de entrar.

~

Jimin está en su camerino, preparándose antes de que tenga que entregar las bebidas. Jin está a su lado en su tocador de vanidad, pasando una mancha de labios rojos a través de sus labios. "Es tan difícil ser bonito, Jiminie. Hice mi rutina de baile y uno de esos jodidos cerdos trató de llegar al escenario y agarrarme el culo. Al menos que pague por VIP primero", se queja Jin, levantándose de su asiento. A Jin realmente le gustaba ser tocado durante los bailes VIP. Acompañando a todo el hecho de que se sintiera sexy haciendo su trabajo. Amaba cuando los chicos lo deseaban. "Vamos a servir bebidas antes de que deduzcan nuestra paga". Jimin se levanta de su silla y se dirige a la salida, tragando saliva. Él sabe lo mal que está la multitud esta noche.

Sale y le sirve a un par de hombres sus bebidas, ganándose un silbato ocasional o un llamado de gato, pero, sin embargo, no fue tan malo. Jimin se sintió casi aliviado al final de su turno, solo le quedaba una hora para tener que trabajar en las mesas.

Camina hacia Jin y sonríe: "De hecho, hoy no he tenido un cambio tan malo".

"Hablaste demasiado pronto", dice Jin, señalando a un tipo sudoroso en la espalda, "Ese hombre te solicitó en VIP".