Única parte

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–La primera vez que vi a Joel Pimentel pensé: Tengo que organizar la boda y los papeles de adopción para los cinco hijos que vamos a tener, para los dos perros y el gato, de inmediato.

Cuando el posó su mirada en mí me sentí el ser más afortunado, porque de las cientas de personas que habían ahí, él me miró a mí.

Cuando él sonrió, mi conciencia lo definió, ese chico tenia que ser mio por siempre.

Iba a ser mi novio y luego mi esposo. Era el amor de mi vida, no había duda.

El primer: "Hola" que escuché salir de sus labios me hizo creer que en su anterior vida debió haber sido un "Tritón", destinado a encantar con su melodiosa voz a cuanto marinero navegaba por el mar.

Joel escuchó atentamente cada palabra que le dije.

Tuvimos una conversación tranquila y cuando la noche amenazaba con acabarse, le pedí a mi preciosa compañía volvernos a ver.

Él aceptó.

Tal vez no debí hacerlo, porque yo sabia que Joel jamás mostró demasiado interés en tener algo más.

Él siempre aceptaba mis propuestas porque era demasiado amable e incapaz de dañar mi pequeño corazón que más tarde yacería desecho en mi pecho.

Si es que aún estaba ahí.

Aveces a mitad de la noche le cuestiono aunque el ya no esté: "¿Por qué no dijiste que no a esa primera cita, Joey? No querías dañarme lo sé, pero luego me dañaste mucho más. Debiste decir que no."

La primera vez que nos besamos fue como tocar el cielo... para mi.

Cuando hacíamos el amor no existía nadie más que él y yo en nuestra habitación.

No necesitaba ninguna otra cosa si tenia a Joel a mi lado. Lastima que para él yo nunca fui suficiente.

No es mi intención que piensen en Joel como una mala persona, porque él es de las mejores personas que he conocido en toda mi vida.

Joel es un ángel caído del cielo. Está en la tierra para brindarle un poquito de alegría a personas infelices como yo.

Duro y frío.

Creo que así era yo antes de él.

Duro y frío.

Así fui yo después de él.

Joel fue tan amable de invitarme a su graduación en la universidad.

Me vio de pie con una mueca que pretendía ser una sonrisa, me vio calmado y feliz pero estaba muriendo por dentro en el suelo al verlo con él.

Pero tenia que fingir porque yo le dije que soportaría el dolor, que me dijera la verdad. ¿Por qué estaba tan distante? ¿por qué ya no me besaba? ¿quién era el chico del parque?

Le dije: Dime la verdad, mi corazón y yo podremos superarlo.

Entonces él se sinceró conmigo.

Y dolió. Claro que dolió.

Quiero que esto deje de doler.

Tal vez si dejo de llorar no lo sentiré más.

Esa clase de pensamientos se repetían en mi cabeza.

Hace tiempo le escribí una carta:

"Cariño, Dios sabe que trate de sentirme feliz por ti. Sé que lo estoy, incluso si no puedo entender porque dejaste de amarme. Si eres feliz con él, estoy feliz por ti.
Con amor, Riki."

Duro y frío.

Joel bailaba con él mientras yo estaba mirando mi teléfono, esperando un mensaje suyo, un simple mensaje que no llegaba.

Entonces agarraba la botella y volvía a servirme otra copa.

Recuerdo cuando yo era su ámbar, porque hubo un tiempo en el que Joel me amó. Pero dejó de hacerlo y ahora él es su sombra de oro.

No quiero ser duro y frío.

Por eso empecé a hablar conmigo mismo y a decirme que podía encontrar una salida a todo esto.

Hace poco volví a escribirle:

"Desearía poder arreglar esto, pero aquí me despido. Estoy feliz por ti, sé que lo estoy incluso si no puedo entender porque no pudimos ser felices juntos. Si eres feliz con él, estoy feliz por ti.

Aún te quiere, Riki."

He llorado mucho por él.

Como quizás muchos de ustedes han llorado por las personas que han amado o siguen amando.

Y llorar estaba bien, porque nos desahogabamos de esa forma. Pero, ¿en que punto cambiamos las lágrimas por el alcohol?

¿Por qué destruimos aún más nuestra vida?

Yo conocí a un muchacho que me enseñó que la vida no terminaba en Joel, al contrario había un después de él. También me enseñó porque existía ese "después".

Joel no era mi persona, yo no era la suya. Y aunque me costó mucho entenderlo, lo hice, estoy aquí y llevo 14 meses sin probar ni una gota de alcohol.

Recuerden que cada uno de ustedes merece ser feliz, eso es lo que hubiera querido la persona que amaron tanto.

Joel me enseñó el principio del amor, y aunque aparentaba, no me enseñó el final.

Si sus pulmones aún pueden llenarse de aire, la vida sigue.–

Los aplausos se escuchan fuertemente por todo el establecimiento.

Apenas Riki baja del podio, Zabdiel corre a abrazarlo.

–Estoy muy orgulloso de ti. Eres un gran ejemplo.

Riki le sonríe tímidamente y antes de que responda algo su celular suena.

Respira profundo antes de contestar –¿Hola?

–¿Riki? Soy Joel, espero no estar interrumpiendo algo importante. Solo llamaba para preguntarte ¿como te fue en tu discurso? Aunque sé que lo hiciste bien– se escucha como ríe un poco.

–Creo que lo hice bien. Me aplaudieron– bromea.

–También llamaba para felicitarte por los 14 meses, ¡Felicidades!

–Gracias. Felicidades a ti también por los ¿6 meses?

–Si, gracias.

–Por cierto, ¿como está tu esposo?

–Erick está muy bien, ahora se le dio por comer solo ositos de goma amarillos, ¿puedes creerlo? Creo que el embarazo le está afectando.

–Dile que le mando un saludo y espero que su bebé nazca bien.

–¡Bebé, es Riki, te está saludando!– grita Joel y se escucha como Erick responde también con un grito –¡Riki, dile a Joel que me deje comer gomitas– Riki ríe –ya sabes que es muy berrinchudo y ahora que está embarazado a empeorado– complementa el rizado.

–Tú deja que como sus gomitas– habla Riki a modo de regañó –tengo que colgar, los chicos y yo iremos a cenar.

–Que bueno. Adiós, Riki.

–Adiós, Joey.

–Espera...– Joel lo frena antes de que corte –se feliz, Riki, se muy feliz.

–No te diré lo mismo porque sé que ya lo eres.

Suspira después de colgar.

–Me encanto tu discurso, eres muy valiente, te admiro.

Riki sube la mirada para ver a la persona que está hablando porque claramente no es su amigo Zabdiel.

Es un chico alto y rubio, muy simpático, que le sonríe tiernamente.

Y es ahí donde las mariposas vuelven a revolotear en su interior.

Está feliz, no solo por Joel sino también por él mismo.

–♥–

Happy for you→Rikel←OSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora