Es cierto que no existe un sistema político perfecto, tampoco existen presidentes que logren cambiar a México de un día para otro, la libertad y la igual en su estado más puro solo con parte del discurso idealista de quienes pretenden un país equitativo, que la globalización difícilmente nos traerá a todos a la modernidad y derribara fronteras tanto físicas e intelectuales, que la democracia es la cura para la pobreza, los conflictos armados y el regazo económico, es algo que con el tiempo México ira solventando ya que es un problema que siempre a tenido, nos falta mucho para ser primer mundo, pero al menos se desarrolla con armonía.
Es necesario resaltar que no existe la receta para hacer de este mundo un lugar perfecto para vivir y que para hacerlo más habitable, simplemente con el tiempo las cosas van fluyendo, como lo demuestra en la actualidad nuestro presidente Andrés Manuel López Obrador, puede que en un pasado no funcionó correctamente nuestro sistema político, pero en todo gobierno existe un lado positivo que lo hace destacar.
Los avances serán notables con el paso del tiempo siempre y cuando la actitud y aptitud que muestro nuestro gobierno, instituciones, políticos, organizadores y la sociedad actúe de una manera correcta, positiva y a disposición de escuchar y acompañar a nuestro presidente de la república en sus decisiones, pero lo más importante que consideramos fue que el mismo jefe de estado decida por el bien y la honestidad ya que si se muestra la contrario jamás se lograra un cambio. De los anteriores presidentes y de sus errores se aprender, toda la historia de México es muy valiosa y debemos tenerle al menos una mayor importancia de la que se le da ahora.
