No creía que las personas
pudieran llegar a cambiar,
hasta que me encontré a mí misma cambiada
y quise volver a ser lo que era.El ayer me lastimó mucho,
tanto que me hizo cambiar,
por eso he de anhelar el anteayer,
y lo que solía ser de mí.A ella,
la que se fue y no sé por qué,
la guardo dentro de mi corazón,
y siempre dejo el portón abierto,
por si desea volver.No hay rencores,
ahora estoy más preparada
para lo que ha de venir,
soy justo lo que necesito.