—Mierda… ¿dónde estoy?— dije mientras sobaba mi cabeza ya que me dolía mucho.
—¡Noa! Por fin reaccionas—
Escuché una voz pero…
—¿Estás bien?— dijo… Elm?
El era totalmente diferente pero había algo que me decía que era él.
Estaba con ropa totalmente negra y tenía… ¡¿Armas?!
—¡¿Por qué tienes armas Elm?!— dije algo alterada.
—Oh, eso… en este mundo soy Adrián no Elm y tu no eres Noa eres Ema, ¿okay?—dijo con una sonrisa que me mantenía tranquila.
—Entiendo… entonces, ¿qué haré?— dije confundida.
Me volvió a besar pero está vez era un beso más… profundo.
Gracias a obtuve mis recuerdos de éste mundo, estaba tan confundida.
En los flashbacks que tenía era todo tan… rojo, un rojo verdaderamente intenso y un olor a podredumbre por todos mis recuerdos, acaso yo era…!¿Una asesina?!
Dicen que al matar a alguien te vuelves menos humano… pero la verdad, siempre había querido saber cual era esa sensación de deshumanización, y ahora que lo sé, es realmemte una sensación fría.
—¿Ema?, ¿te encuentras bien?— escuché lo que dijo un poco aturdida.
—Sí— ahora que sabía a lo que estabamos, recordaba porqué teníamos que vestir de negro, ya que éramos algo así como mienvros de una mafia y teníamos que matar al traidor. —Vamos por ese bastardo de Yoosung— ¿esa fue mi voz?, es tan raro… pero me agrada y me asusta al mismo tiempo tener tantas emociones que son mias pero no exactamente.
—Ahora entiendes… ese bastardo de Yoosung, en este mundo hasta te intento violar… es un maldito, además traicionó al jefe y eso le costara la muerte— Adrián agarró un arma de asalto Galil, gracias a éstos recuerdo ahora sé de armas…sus ojos negros se veían con un odio y una intensa profundidad y a la vez eran como los de un tierno cachorro, lo cual es raro ya que su cara está llena de rasguños y es un matón.— Bien, vamonos mi bella dama— me agarro de la mano y yo en mi otra mano llevaba un revolver Phytom, joder… es genial saber de armas.
Mientras corriamos al lugar indicado, recordaba en la ciudad en la que estabamos la cual era México, a reconozco ya que soy mexicana… pero éste México es diferente, es más viejo, pero no quiero revolver a mi cerebro con tanta estupidez. Ahora tengo que concentrarme en matar a ese bastardo traidor y violador.
—Ya llegamos…— dijo Adrián susurrando— llegamos a un techo muy alto y con una bella vista. —¿Quieres matarlo tu?— dijo tranquilamemte.
—Oye… —le dije con tono curioso. —¿Puedes cambiar mis recuerdos? —le dije en tono serio, todo esto era raro, se supone que recordaría lo que hice.
—Estoy hablando en tu mente— escuché en mi cabeza y en eso todo cambió y aparecí en un cuarto totalmente blanco y cin una gran pantalla dónde mostraba a en primera persona a una persona que le apuntaba a alguien con un arma desde algo alto y lo mataba.
Quede aturdida… todo parecía coml que yo lo estuviera viviendo de nuevo, lo cual no era así, sólo recordaba lo que mi yo pasada hizo, en eso la pantalla cambio de plano y me mostro a mi yo pasada tomandome una ducha con Adrián, se escuchaba como él decía que estaba orgulloso de mi y que me amaba y mi recuerdo terminaba en un beso.
Y aparecía otro donde estabamos casados y teníamos un jardín con un perro enorme y amenazador, también recordaba vagamente dejar a la mafia de forma pacífica, firmando un contarto de muerte si rompiamos la confidencialidad, y miles de recuerdos pasaron justo en un momento hasta que en uno se detuvo… mi yo pasada mirandose al espejo en el día de mi boda, con un vestido blanco con encaje que resaltaba mi bella figura, un maquillaje natural que resaltaba los ojos de color miel y mi cabello café claro en un peinado muy hermoso, la yo del pasado se miraba y pensaba lo feliz que iba a ser, mi yo del pasado volteo y camino hacia una puerta y justo en ese momento se acabaron los recuerdos.
—Yo… — dije mientras sollozaba y me ponía de rodillas mientras tapaba mi vara con las manos en ese cuerto blanco— ¿Realmente sufrí en este otro mundo?, pero a la vez ¿no?— estaba realmente confundida sentía que mis recuerdos antiguos y presentes se mezclaban.
Elm se acercó y me besó la frente lo cual me ayudo a diferenciar las cosas y tener mi mente clara… pero tenía tantas ganas de besarlo y golpearlo… que acabe haciendo ambas.
—¿Qué fue eso? — dijo sobandose el estómago.
—Los recuerdos de Ema me hicieron tener ganas de besarte… y los recuerdos de Noa me hacen querer golpearte— dije sin contener mi risa.
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Atrapada En Mi Mente
Teen FictionNoa es una chica normal, con una vida normal y... todo normal, hasta que un día, alguien apareció en su vida, un chico diciendo que llevaba largo tiempo buscándola de vida en vida para estar con ella. Quién es este chico? Por qué ella? De qué rayos...