Kashima, un alfa de cabello castaño, ojos cafés, musculoso y guapo, entro a su habitación en busca de su uniforme de deportes
—¡Joder Kisumi!
Rápidamente se tapó los ojos y cerró la puerta, se fue al baño y se lavo la cara, estaba harto de entrar a su habitación y ver a su hermano follando con un alfa diferente cada tres días
Luego de diez minutos Kisumi salió de su habitación y vio a su hermano viendo televisión
—Debes dejar de hacer eso, estoy harto de entrar a mí habitación y siempre verte siendo follado o dando mamadas
—¡Igual es mí habitación!
—Si no paras le diré a mamá y papá que follas todos los días con diferentes alfas
—¿A sí?..Pues si les dices, yo les diré que tú fuiste él que rompió la tubería e inundó la casa hace dos meses, y con el estado crítico en el que está nuestra pobre mami..¿En serio quieres ir y abrir la bocota?
Ahí estaba, el lado manipulador de Kisumi, algo que heredó de su madre, Oikawa
—..Ahg, bien. Pero ni sé te ocurra aprovecharte de que mamá está hospitalizado
—Si si
—..¿Acaso no te preocupa mamá?
—Claro que si
Dijo Kisumi desinteresado mientras comía un plátano
—..Mamá puede morir...y nisiquiera te importa..ahora entiendo porque nadie te quiere
—Muchos me quieren
—¡Claro que no! Nadie te quiere, el hecho de que follen contigo no significa que te quieran, entiendelo
—…………
Kashima se fue de la casa azotando la puerta, estaba harto, debía irse antes de darle un puñetazo a su hermano
Por accidente chocó con un chico, como estaba enojado no media su fuerza, y producto al golpe, el chico quedó en el suelo
—Perdón, ¿Estás bien?
—Si
Kashima se alejó, pero se sentía culpable, volteó la mirada y vio como el albino seguía en el suelo, algo no andaba bien. Suspiro irritado y se acercó al chico
—¿Qué ocurre?
—Creo que me torcí el tobillo
—¿Vives muy lejos?
—Si
—Mm..espera aquí
Kashima se fue corriendo a casa y luego de unos minutos volvió montado en su motocicleta
—Te llevaré a casa
—¿Seguro? Está muy lejos
—Da igual, además es mí culpa que te torcieras el tobillo
Kashima cargo al albino y lo subió a la moto, se subió adelante y agarró las manos del omega rodeándolas por su torso
—Agárrate bien si no quieres caer
Mahiru asintió y se aferró al alfa, Kashima encendió la motocicleta y empezó a conducir a la casa del omega
.
.
.
Kisumi caminaba por calles, sabía que su hermano tenía razón, solo no lo quería aceptar, siempre se a sentido vacío y pensó que follando con cualquiera eso se arreglaría, cuando follaba se sentía bien, se sentía sexy, sentía que no daba asco, que había gente a la cual le gustaba su cuerpo, lo hacía sentir querido, pero de cierto modo igual se sentía un poco vacío... nunca le gustó su cuerpo, su personalidad, su aspecto, odiaba todo en él
Camino al hospital, entro buscando la habitación en la que estaba su madre, al leer una puerta que decía "C-13" entro, ahí estaba Oikawa en una camilla, conectado a una máquina. Se acercó lentamente y se sentó al lado de su madre
—Ki..sumi
Hablo débil el castaño mayor y le tomó la mano a su hijo, estaba feliz, no pudo evitar empezar a llorar
—Perdón por no haber venido a verte... Quería negarme el hecho de que estabas aquí.—con los ojos cristalizados.—No quería aceptar el hecho de que puedo perder a mí mamá
Oikawa se sentía débil, no estaba nada bien de salud
—Tú eres el único que me a mostrado cariño..a mí hermano nunca le eh importado y papá siempre estaba en el trabajo...eres él único que me escucha y se a preocupado por mí..no quiero perderte mamá
Susurró Kisumi llorando, nunca en su vida de había sentido peor, ver a tu madre en una camilla no se sentía nada bien. Oikawa acercó su esqueletica mano a la mejilla de su hijo y limpio las lágrimas que salían de sus ojos
—Eres fuerte..de hecho, siempre eh pensado que eres más fuerte que Kashima y Hajime, saldrás adelante.. solo prométeme que ya no follaras con nadie hasta que encuentres a tu alfa destinado
—..¿Lo sabías?
—Las madres saben todo bebé
—..¿No estás molesto o decepcionado?
—Jamás me decepcionaria de ti.—le besa la mano.—Se feliz, ¿Bien?
Susurró Oikawa antes de cerrar los ojos
