Capítulo 86: un trago- Parte 1: ¡Ya es suficiente!

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Marco de tiempo: Teddy tiene catorce años, Phoebe once, Henry tiene nueve años y Caleb tiene dos años.

POV de Christian

Cada noche es algo y mi paciencia se está agotando. Cada noche llego a casa del trabajo alrededor de las seis y últimamente no hay nadie en casa. Ana está corriendo con los niños y todas sus malditas actividades en su búsqueda para que seamos como "todos los demás" y lo he tenido. Esta noche voy a recuperar el control. Todas estas actividades en las que están mis hijos son ... ridículas. Club de teatro, béisbol, clases de piano, clases de violonchelo, clases de baile, tutorías para esto y aquello, grupos de juego, cursos de enriquecimiento después de la escuela ... jodidamente suficiente. Eso es sólo mis hijos. Luego está Ana. Comité de recaudación de fondos del hospital, Presidente de Coping Together, Vicepresidente de Junior League, CEO a tiempo parcial de Grey Publishing y Presidente de PTA en la escuela de Phoebe y Henry. He terminado con esta mierda. Quiero a mi familia en la mesa y ya no voy a aguantar esto. Maldición, me parezco a mi padre, pero mis hijos están agotados y nosotros somos los padres que lo dejamos pasar.

"Señor ... ¿todavía quiere conducir a la práctica de béisbol de Henry o nos dirigimos a casa?"

Miro mi reloj. "No vuelvas a casa". Quiero poner las ruedas en movimiento para mi discusión con mi esposa. "¿Dónde está Caleb? ¿Está con Gail o Ana?" Ver esto es lo que quiero decir. Ni siquiera sé dónde está mi hijo en este momento.

"Está con la Sra. Grey y Reynolds dijo que está lanzando un ataque de llanto ahora mismo. No creo que haya dormido una siesta hoy". Oh, por el amor de Dios, no le pago a Taylor 500 mil al año para controlar el horario de siestas de mis hijos. Ana necesita obtener una revisión de la realidad.

"Pasemos por ahí y atrapémoslo. Pobre niño es arrastrado a todas partes". Taylor cambia de dirección y nos dirigimos al campo. Cuando llegamos, encuentro a Ana en su celular, Reynolds persiguiendo a Caleb y Henry está listo para batear en un juego de práctica. Me paro detrás de la cerca del plato y veo a mi hijo de nueve años en el plato. Este niño está dotado. Espera para balancearse al mejor lanzamiento y luego lo clava para llegar a la segunda base, pero mantiene su estómago como si tuviera un calambre. Él me mira y sonríe cuando me ve aplaudir. Sé que debo intensificar más, pero no puedo hacer todas estas prácticas. Al menos nunca me pierdo los juegos de mis hijos, pero no me involucro mucho en las funciones extracurriculares. Ana y yo acordamos que ella es propietaria de esta parte de sus vidas a cambio de trabajar solo un día a la semana. Pero mis hijos están demasiado extendidos y claramente no está funcionando. Miro hacia abajo cuando siento pequeñas manos en mis rodillas.

Papá ... arriba ... me voy a casa ahora ... por favor. "Recojo a Caleb que se ve cansado y está lleno de manchas de lágrimas marcadas de suciedad.

"¿Qué te pasa amigo, has estado llorando?" Beso su rizado cabello cobrizo y él pone su cabeza en mis hombros. El niño está agotado.

"Hola ... No pensé que ibas a venir. Ya que estás aquí, creo que iré temprano a la clase de baile de Phoebe para que podamos ir a casa. ¿Greg va a llevar a Teddy a casa?" Ana mira a Taylor que mira su teléfono y asiente con la cabeza que el CPO de Teddy lo llevará a casa. Solo miro a mi esposa. "¿Qué? ¿Por qué me miras así Christian?"

"¿En serio, Ana? Este hombrecito está agotado hasta las lágrimas ... ni siquiera sabemos cómo nuestro propio hijo está llegando a casa después de la práctica ... no hemos cenado con la familia en días y no tienes ningún problema con esto "Ya terminé con esta mierda y cuando llegue a casa ... estamos arreglando esto. Esperaré aquí con Henry ... y mantendré a Caleb ... pero esta mierda termina esta noche. Y mientras estamos en eso ... tengo un cheque redactado para enviar al fondo del hospital: puede retirarse de ese comité y decirle al Dr. Iwantto fuck Ana Grey que está renunciando al comité ". Me estoy inclinando para que solo ella pueda escucharme. Bueno pensé que solo ella podía oírme.

Ana y Christian- teniendo un bebeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora