Lost On You

317 29 1
                                    

[Admito que cuando lo vi en ese estado solo pude regocijarme en la desesperación de su rostro. Solo por eso no le reventé la cara a ese tipo...]

—Iruma tienes una llamada.

Escuchó la voz del oficial, dejando de lado el computador, hizo su silla hacia atrás, ajustando sus lentes se encamino hacia él.

—¿Si? ¿Diga?

—Jyuto soy yo, necesito un favor...

Sus labios formaron una sonrisa anticipando la petición del hombre al otro lado de la línea, después de todo siempre era la misma.

Samatoki Aohitsugi, nunca cambias ¿Eh?

『†』

Miró el deambular de los peatones por detrás del cristal, apoyó su mentón en la palma abierta de su mano, mientras le dejaba balbucear desde el otro lado de la mesa familiar.

—¡Te digo que esos bastardos me tendieron una trampa, pero me las pagaran! —vocifero Aohitsugi tras darle una mordida a su hamburguesa. Por otra parte Iruma siguió observando desde el cristal, para él, aquella vista era una arma de doble filo, colocarse al frente podría encaminarlo a una bala segura si es que alguien les hubiese seguido, por otra parte así podía ver tanto los movimientos de afuera y adentro del establecimiento— Oe ¿Acaso no vas a pedir algo? —regresando la vista al frente le ofreció una amplia sonrisa— ¿Acaso tengo algo en la cara?

—Para nada —dejo su posición para sacar un cigarrillo de la cajetilla que se encontraba en su bolsillo derecho.

—¿Acaso interrumpí tu trabajo?

—Solo termina de llenar un informe, ya sabes papeleo básico.

Aohitsugi afilo su mirada, tomando un hondo sorbo de su refresco escrutinio sus movimientos, después de todo Jyuto nunca le diría algo que no quisiera escuchar ¿O sí?

—Supe que estuviste con mucho trabajo estos días.

—Lo normal supongo —exhalo un poco de humo.

—Si a eso le llamas estar tratando a la división de Shibuya y a Shinjuku —se quejó tras cruzarse de brazos.

—Hey Samatoki —se inclinó al frente de la mesa, su voz sonó fría y condescendiente al mismo tiempo como si estuviese hablando con un niño pequeño— deberías de dejar de causar (me) problemas.

Levantándose de su lugar dejo un par de billetes en la mesa, Aohitsugi se quedó en silencio, parpadeando un par de veces pensó que tal vez había hablado demás, sin embargo aún se sentía molesto por lo sucedido.

—¡Oe tú! —exclamo desde su lugar.

—Date prisa, te llevo a casa —declaro sin mirarle mientras mostraba las llaves de la patrulla.

『†』

El viaje había sido silencioso, algo que había causado molestia en Aohitsugi tras la verborrea con la cual solía hablarle tan elocuentemente Iruma.

Yendo al jardín trasero de la residencia miro el cielo nocturno, la noche era silenciosa y calmada, a pesar de aun mantener aun las heridas por el enfrentamiento de hace un par de horas parecía haber sido un día más entre el montón. Agradeciendo en cierta forma que Nemu, su hermana menor no estuviera ahí para verlo de tal forma recordó los viejos tiempos generando un sabor amargo en la punta de su lengua, y al pensar en su mirada llena de preocupación su faz mostró una mueca de desaprobación. Una que solo se borró al escuchar un ruido cerca de los arbustos.

Lost On YouDonde viven las historias. Descúbrelo ahora