1. Origen/ Motivación/ Pasado.

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Origen:

Touya Todoroki, ahora conocido simplemente como "Dabi", sin que nadie supiera su verdadero nombre o de dónde venía, ingresó a la Liga de Villanos.

Su interés en este grupo comenzó luego de su aparición en el ataque a USJ, lugar donde se suponía que los futuros aspirantes a héroes irían a entrenar, que de igual manera se transformó en la cuna de la primera derrota hacia ellos. Primeramente, sólo se limitaba a escuchar las noticias sobre ellos, el daño que causaron y como pretendían que trabajaban pero luego de que Stain, el Asesino de Héroes, supuestamente se uniera a ellos antes de su inminente derrota, hizo que le interesara aún más, logrando así, contactar con su proveedor y lograr ser parte de ellos. Sin embargo más fue su sorpresa al enterarse que su líder tenía la actitud de un niño, cosa que lo desanimó, llegando a creer que ese sujeto solamente los llevaría a la perdición.

Pero aún así lo siguió.

Cuando le revelaron los planes del tenían para futuro tuvo un poco más de confianza. Podría existir una forma de llevar perfectamente a cabo su plan, y así, terminar con esa molesta sociedad en la que viven.

Motivación:

Todo lo que tenía que hacer era calcinar personas, ¿No es así? Realmente no tenía una motivación en un principio, pero luego de que su ataque al campamento de los mocosos de U.A. resultara como lo planeaban se encendió una chispa dentro de él, la cual mantenía (o eso intentaba) viva.

Aunque no le gustara la idea de trabajar en equipo siempre obedecía sin rechistar aunque pareciera que no fuera así.

Las cicatrices que tenía por todo su cuerpo le daba un aspecto tenebroso, aunque la manera en las que se estamparon en su cuerpo no fue la mejor posible.

Su Quirk, le permitía sacar inmensas llamas de su cuerpo. Éstas eran demasiado fuertes para él, así que la mayoría de sus heridas fueron provocadas por él mismo, provocándole un terrible dolor en ellas cada vez que utilizaba por mucho tiempo su Quirk.

Unas grapas eran muy evidentes en el área de su rostro y muñecas. Quién sabe en qué otro lugar tendría más de ellas, pero el sólo imaginar el sufrimiento que tuvo que pasar hacía que a cualquiera se le oprimiera el corazón a cualquiera. O eso decía su compañera Toga, quién a pesar de no llevarse muy bien, siempre podría contar con ella.

Pasado:

Después de todo él era un Todoroki. Ninguno de los hijos del héroe número dos tenía un bonito pasado. Mucho menos él que era el mayor de todos. Y peor aún si te eligen como el sucesor de Endeavor.

Según su padre, al tener su mismo poder podría ser más poderoso que él si lograba dominarlo a la perfección, por lo que decidió entrenarlo día a día.

Y tal era la ambición de su padre que no se dió cuenta del daño que le estaba haciendo tanto a él como a su madre y hermanos.

Un día más de entrenamiento fue en el que la mayor desgracia ocurrió.

Como ya era costumbre, Enji luchaba contra él. Mientras más se defendía más sentía que iba a caer desmayado en cualquier momento y un golpe en el estómago fue el detonante de todo. Una furia infinita combinada con odio y frustración lograron que Touya usara todo su poder.

Sus flamas, las cuales normalmente eran de un vivo color anaranjado se tornaron en llamas de un color azul fuerte, con las cuales demostró que él era poderoso.

Su padre alababa su hazaña ya que incluso al mayor se le dificultaba usar ese tipo de poder. Y el que su hijo lo haya usado como si fuera normal que lo hiciera lo llenó de esperanza. Si con eso superaba a All Might pues entonces cualquier cosa que pasara no le importaría.

Y así fue.

Luego de haberlo mantenido durante un rato, el pequeño comenzó a dar gritos despavoridos, puesto que su mismo poder le había hecho un daño enorme. Se retorcía en el piso aguantando el dolor, sin ser atendido, pues su padre había ido en busca de su esposa para mostrarle el poder descomunal que tenía su hijo, siendo tanta la sorpresa de ella el ver todo lo contrario. Ver a su pequeño retorciéndose del dolor mientras su padre sólo veía lo que había hecho y no lo produjo, le partió el alma.

Inmediatamente corrió hacia él, levantandolo para llevarlo al hospital más cercano, puesto que sus brazos estaban completamente quemados.

Enji, ahora se encontraba decepcionado. Su hijo, poseedor de tal poder, era un completo debilucho que no aguantaba su propio poder.

No recordaba que incluso él tenía problemas con su poder.

Pasó varios meses con vendas por todo su cuerpo, ya que no solamente sus brazos fueron los afectados. Su cuello y piernas tenían marcas también como muestra de los peligros que conllevaba el uso de su poder.

Cuando volvió a hacer uso de él notaron que sus llamas habían quedado permanentemente con ese color azul intenso. Lo producía en cantidades pequeñas puesto que aún no se recuperaba del todo.

El héroe, al ver que ahora le era inservible, decidió tomar a otro sujeto de pruebas: su hijo menor, Shoto, quién además de poseer el poder de su padre tenía el poder de su madre. Ambos por partes iguales.

Touya se molestó aún más con él porque al menos con él empezó a entrenarlo cuando ya era un poco mayor, pero con Shoto fue mucho más diferente. Con Shoto comenzó a entrenarlo desde muy pequeño y siempre lo sometía a duras pruebas que a penas completaba.

Sentía que ya no aguantaría más. Su padre había comenzado a golpear a su madre por defender a Shoto, pero como siempre, su madre intentaba ocultarlo. No lo lograba del todo puesto que los moretones en su cuerpo eran mucho más evidentes con el paso del tiempo.

Finalmente, el día en el que se aburrió de todo. Enji, tan obsesionado con hacer de Shoto una máquina que le ayudara a completar todo lo que él no pudo —en términos de héroe— le ponía duras pruebas, pero a pesar de eso nunca se atrevió a tocarle un sólo cabello para que entendiera que lo estaba haciendo mal.

Sin embargo ese día todo cambió.

Shoto se había quedado dormido debajo de un árbol que estaba en el patio de su casa, cansado por todos los entrenamientos de parte de Enji, así que se puso a descansar un momento. Endeavor, por supuesto, se enfadó con él.

Antes un simple "espero que no lo vuelvas a hacer" o solamente castigarlo un poco pudo haber sido suficiente, pero ahora, el líder de la familia, llegó hasta donde el pequeño bicolor se encontraba durmiendo, y tras verlo tan plácidamente dormido, Enji lo levantó, sujetándolo del cabello para luego lanzarlo con fuerzas.

Esto enfureció a Touya, por lo que le causó unas quemadas en la espalda del héroe, las cuales, luego de tantos años, incluso podría ser mentira que realizó esa acción.

Al momento de confrontarlo también él recibió un golpe en el estómago, cosa que alertó a su madre y así poder resguardarlos. Sin embargo no fue capaz de llegar a ellos, pues Enji la golpeó de igual manera. Fuyumi, impotente por no poder hacer nada, simplemente los vió mientras las lágrimas rodaban por toda su cara.

Ya harto de eso, Touya solamente tomó un abrigo y se fue de ese lugar con la esperanza de no volver nunca.

Para defenderse de los abusivos que intentaban atacarlo tuvo que usar demasiado su poder, logrando así que sus heridas empeoraran.

Un día, luego de una pelea contra unos tipos que intentaron asaltarlo, se excedió, usado así todo su poder, calcinando a esas personas, se quedó varado en un callejón, desangrándose, hasta que un hombre extraño se le acercó y le ofreció su ayuda, a lo cual aceptó.

Durante un tiempo fue el sirviente de ese sujeto, hasta que escuchó sobre la existencia del Asesino de Héroes. Cuando lo atraparon y se hizo viral su vídeo supo que ese era el camino que tenía que seguir. Destrozar a los falsos héroes como su padre quién solamente buscaba más poder era su misión.

Supo que estaba vinculado con la Liga de Villanos, así que fue directo a ellos.

Ahora Touya Todoroki no existe. El único que existe ahora es Dabi, el Villano.



















Día 1 de la Villain Week UwU

Villain Week Stories 2019Donde viven las historias. Descúbrelo ahora