quien me dejo atrás

2 de febrero

Último año de bachillerato, ay cuánta nostalgia y más porque mí madre decidió cambiarme de colegio y meterme a otro uno de gran prestigio, mí madre siempre decía que el colegio del que venías sería tu carta de presentación en la universidad, a mí en lo personal me daba igual en qué lugar este, solo me importa ser feliz y disfrutar el momento, pero siempre que algo cambia me siento algo sentimental, ya que siempre habían cosas que extrañaría; siempre he dicho no hay nada que un nuevo comienzo, por suerte mí mejor amiga se quedaría conmigo la conozco desde la primaria vaya que es una chica única, como decirlo ¿Mí par perfecto? Somos como mantequilla de maní y jalea, aunque ella sea alergica al maní.
Hoy es mí primer día en aquel nuevo mundo, la razón por la que mí madre decidió cambiarme es porque ahora ella recibió una herencia inmensa por parte de mi abuelo, nunca lo conocí, mí abuela me contó que se había escapado con su amante y que para su mala suerte de él está murió años después de casarse sin darle un solo hijo, por lo que toda su fortuna quedo a manos de mí madre.
El uniforme no me gustaba la falda me parecía muy corta y los colores muy comunes, aunque no me sorprendo nunca me gustaron los uniformes escolares, en todos los colegios a los que fui siempre se molestaban por hacer alteraciones a los uniformes y esta vez no será diferente; algo de encaje color ocre al borde de la falda, en las mangas de la camisa unos pequeños detalles color dorado, unos zapatos de tacón corto y una moña de color Rojo en mí cabello y unas pantimedias azules, maquillaje muy discreto y listo, seguía esta rutina desde secundaria; me dirigí hacia la cocina desayuné con Andrea en la cocina ya que mí madre se había huido ya a su trabajo.
Ahora que teníamos dinero y éramos multimillonarios teníamos un chófer este se llamaba André a lo que me dijo mí madre me contó que sus padres eran inmigrantes italianos y que estos a causa de problemas económicos pidieron a André les ayudará, hoy sera la primera vez que lo vea me preguntó cómo será, al salir ahi estaba un muchacho de ojos miel y cabello del mismo tono, puedo jurar por diosito y todos los santos que parecía un dios bajado de olimpo, sin pensarlo mis mejillas empezaron a arder, por su rostro y físico el cual para resaltar diría muy bien cuidado, le cálculo unos veinticinco años, estaba apoyado a un costado del coche y al darse cuenta se puso nervioso, se puso de pie y me saludó como si fuese la señora de la casa

— Buenos días señorita Blanco

— Ay vamos, no es necesario tantas formalidades, dime April, tú debes de ser André, bueno vámonos

No entiendo cómo fue posible que yo una de las personas más obvias, torpes y despistadas haya podido guardar la calma de esa forma, me abrió la puerta de aquel sedan negro la cerro con cuidado y condujo hasta mí nueva escuela. La zona en la que se ubicaba era una de las mejores de la ciudad, apuesto a que en esta escuela solo me encontraría niñitos consentidos al llegar el estacionamiento estaba lleno de automóviles mejores que el de mí casa y de ellos bajaban como lo había dicho niñitos mimados, me despido de André y doy mí primer paso hacia este nuevo y exótico mundo, cuando empiezo a caminar para entrar siento que alguien me tapa los ojos y poniendo una voz ronca me pregunta ¿ Quien soy ? , Cómo no reconocer esa bromita y ese carisma es Mel

— no lo sé yo creo que eres un depravado sexual y si no me sueltas te golpeare - me suelta para poder hablar .

— si hubiera sido un depravado creo que no te hubiera hecho caso

— ay ajá ¿te crees chistosa?

— Ha pasado mucho tiempo

— No exageres solo pasaron dos semanas desde la última vez que nos vimos

— ¿Enserio, dices que no es mucho?, Esta no es mí April qué hiciste con ella alienígena malvado

— mira la lleve a mí nave y la utilice para experimentar