Omega ||Spideypool||

Cap 1: Beta

Wade, Wade Winston Wilson tenía un problema. Bueno, tenía demasiados problemas, demasiados para llevar la cuenta para ser honestos. Pero en ese instante de su vida tenía un problema que era el único que le importaba.

Estaba enamorado.

Si, ya le había gustado gente antes, pero nunca se había enamorado de nadie, por lo cual esto le causaba demasiados problemas.

Sabía que nunca iba a tener oportunidad con esa persona pues era un mercenario, hablaba de más y viniendo de la boca de muchas personas: "era desagradable." Mucha gente le había dicho que él era asqueroso o cosas por el estilo durante toda su vida, pero lo peor de todo el embrollo es que era un omega.

Todos siempre se fijan en los omegas "comunes", en los que son bajos, delgados, delicados, con piel perfecta, linda cintura, ojos grandes, labios rojizos y cabello sedoso. Esos completamente sumisos y lindos, pero Wade no era para nada un omega lindo.

Era muy alto (1.87 para ser exactos), su cuerpo era ancho, era musculoso, tenia cicatrices horribles en toda parte de su cuerpo, no tenía un cabello bonito, no tenía nada atractivo. Tal vez estas cosas serían atractivas en un alfa, en un alfa fuerte y enorme pero él no era eso, él era un omega, por lo cual sabía que su amado nunca lo iba a escoger, no iba a escoger al único omega en el mundo que no era adorable y delicado.

Así que siempre usaba parches. Normalmente se ponía uno, a veces dos o tres y si "no es muy sano usar más de un parche" pero eso no le importaba en lo más mínimo. Una bomba no lo podía matar ¿que le iban a hacer unos parches con químicos? Absolutamente nada, así que iba a usar incluso cien de esas cosas si tapaban su aroma.

Claro, no los usaba específicamente por su heroico compañero, si no por que sabía que así se evitaba muchos, demasiados problemas que no necesitaba y que se negaba a recordar, así que no hablaremos de eso ahora. Pero sabía que la vida era mas fácil si pretendía ser un beta.

Mejor hablemos de como ya se mencionó, el problema principal del mercenario, el problema llamado Spider-Man el cual justamente estaba ahí, columpiandose hacia su azotea, viéndose majestuoso, trayendo a él ese delicioso aroma de granos de café, madera y lluvia. Era un olor tan agradable, era algo que amaba de él.

-Tienes el buffet?-

-Acaso lo dudas?-Preguntó mostrando las dos cajas de comida mexicana para llevar, alzando su máscara hasta su nariz para mostrar su enorme sonrisa.

-Sueles olvidarlo.-Respondió el héroe, también alzando su máscara sólo lo suficiente para sacarle la lengua.

-Bueno, tienes razón.-Dijo dándole su caja de comida, comenzando a comer de su chimichanga.-Aún que no se por que actúas como si fuera el fin del mundo cuando se me olvida.-

-Si supieras que esto es lo único por lo que me sigo juntando contigo.-Bromeó comenzando a comer, riendo cuando el mercenario se hizo el ofendido.-Aún que tú eres el que empezó a hacer un drama de esto cuando apenas nos conocimos, solo deja que te lo recuerde.-

-No voy a negar que hacía algo de drama moderado.-Spidey rió.-Pero es que no comías nada! No se en que trabajas pero ganas prácticamente nada y no te iba a dejar sin comer. Si tengo que comprar esto todos los días lo haré con gusto si con eso ingieres algo.-Mencionó tajante, concentrándose tanto en su deliciosa comida que no vio el leve rubor de su compañero y su dulce sonrisa.

Después de eso se dedicaron a comer en silencio sólo con una que otra ocurrencia por parte de Wade, lo mismo de siempre, lo único que a Wade le parecía nuevo era lo mucho que su compañero se reía de sus comentarios.

Claro, de vez en cuando reía cuando algo le parecía una buena broma, pero en esos momentos cada tontería que decía venía seguida de una pequeña risa o leve carcajada del arácnido. No sabia a que se debía ese cambio de humor, pero no le molestaba, adoraba esa perfecta sonrisa que el menor tenía.

-Hoy estas muy alegre ¿esa chica ya te aceptó una cita?-Decidió preguntar, viéndole con curiosidad.

-Eh? Chica?-

-Si, la pelirroja de la que siempre me hablas!-

-Oh, Mary Jane... no nunca podría llegar a tener una cita con ella.-respondió riendo.

-Mira, siempre que hablas de ella la pintas como algo inalcanzable y lo entiendo, te gusta pero de seguro no es algo del otro mundo. Ademas, aun que yo no sea capaz de ver tu rostro, con ver esa sonrisa y la punta de tu nariz puedo decir cien por ciento seguro que eres alguien apuesto.-Dijo de forma tan rápida y atropellada que Peter apenas y captó la mitad de las palabras pronunciadas.

-Ah... ¿que?-Volvió a reír.-No es por eso! Es solo que... bueno, ella es una beta.-Dijo encogiéndose de hombros para seguir comiendo.

-Y eso es malo por que... ?-

-Ah no me mal intérpretes! No tiene nada de malo y no estoy juzgando sólo que siempre creí que era una omega. Siempre olía a flores y hace unas semanas descubrí que era por un perfume.-dijo riendo apenado.-Podría tener una cita con ella, pero si llegáramos a tener algo sería algo informal, algo con límite de tiempo.-explicó, aun que Wade aún le veía confundido debajo de la máscara.

-Por qué sería algo de poco tiempo? No lo entiendo.-

-Esto va a sonar muy anticuado pero si voy a pasar mi vida con alguien quiero que sea un omega. Quiero poder hacer un lazo, tener cachorros y tal vez... se que casi nunca pasa, que normalmente se le ve como mito pero tal vez sería lindo encontrar a mi destinado.-Dijo mencionando lo ultimo con más pena.

-Entonces... no te gusta nadie y no saldría a con un... beta?-pregunto Wade en voz baja, jugando con sus dedos. No es como si esperara que el arácnido se fijara en él pero no podía tener ese de tell de esperanza.

-Bueno, como dije podría hacerlo y sobre gente que me gusta... tengo mi tipo, lo curioso es que solo he encontrado mi tipo en betas, tal vez sea una señal.-

-Y cual es tu tipo?-

El héroe sonrió, viendo al paisaje.-Dulces, gentiles, divertidos, amables, espontáneos, curiosos...-comenzó a decir, volteando a ver a Wade.-Y al parecer, betas.-Terminó de decir, acercando su mano a la más grande pero el mercenario rápidamente se puso de pie.-Pasa algo?-

-Ah... p-perdón! Yo tengo que irme, se me olvidó que tenia que hacer eso de ea cosa de bueno, ya sabes como son estas cosas.-dijo riendo retrocediendo lo más rápido que podía para comenzar a correr antes de que sus piernas se pusieran de gelatina y fuera muy tarde para encerrarse en su cuarto.

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Ya que por fin tengo luz ya subo esta cosa que según yo hice más decente pero de seguro sigue igual de kk

Espero actualizar pronto, no leemos luego!
☆Con amor, la escritora☆