Cure of God

Capítulo 2 - El ascenso

Capítulo II – El ascenso

Las cosas no han parado de ponerse cada vez más extrañas, escucho a mi madre llorar por las noches, me da cosa preguntarle porque, siento que solo la abrumaría más y no quiero eso, aunque mamá dijo que no saliera, quería ver que era lo que pasaba, encontré un diario tirado en la esquina, algo sucio pero era legible, la portada del periódico decía: "¿El apocalipsis ha llegado?", me pase un buen rato leyendo el periódico, era interesante a partir de que el punto principal eran las supersticiones que tenían las personas, desastres naturales estaban ocurriendo a la vez en todo el mundo, andan diciendo que los sellos que contienen a los 4 jinetes del apocalipsis están a punto de romperse, y cuando eso pase, estaremos perdidos, por mí, yo podría morirme, la verdad no me importa, pero mi madre es la persona más importante en este mundo y si yo me voy ella se quedaría sola, creo que ya es suficiente con que el idiota de mi padre no tenga tiempo ni de verla, y claro, los religiosos y católicos estaban alterados por ello, no creo en estas cosas, pero bueno, no es como si pudiera cambiar estas cosas, entre de nuevo a la casa y mi mamá me abrazo llorando "No vuelvas a salir", hice que se tranquilizará, me dijo que había rumores de que mi padre había muerto, no contestaba para nada y recientemente uno de sus socios llamo a mi madre para avisarle de un accidente de avión, en donde estaba papá, me quede callado, no sabía si llorar realmente, pues no era como si hubiera tenido un afecto increíble hacia mi padre, pero mi mamá estaba llorando así que la abrase hasta que paro de llorar.

Ya era de noche, mi mamá se fue a dormir y yo me quede viendo la televisión, viendo como todos veían la inminente llegada del apocalipsis, me la pase horas viendo la televisión sin moverme, hasta que...me quede dormido.

Lehonor despertó dentro de un sueño, frente a él, ya hacia Dios en su máximo esplendor.

"El elegido de salvar la humanidad serás tú, Lehonor Hamilton, te nombro, el elegido. A ti será otorgado el poder que opaca a todo mal, Adrenalina, te acompañara a partir de ahora en tu odisea, demuestra que la humanidad vale la pena, demuestra que eres el campeón que el mundo ha estado esperando durante muchos siglos, este es tu comienzo, el final del mundo, te nombro a ti, Lehonor Hamilton, como Izabran Yeshúa, "el nuevo cristo", derroca a Lucifer el traidor, y trae ante todos la victoria, la victoria de la humanidad entera."

Desperté, sudando, frente a la televisión en donde no se veía nada, solo estática, no escuchaba a mi madre en la casa, subí rápidamente a su habitación, estaba dormida, la deje ahí, cerré la puerta y bajé las escaleras, mi cuerpo se sentía pesado, como si hubiera hecho ejercicio, demasiado ejercicio, era como si todo mi cuerpo fuera a sucumbir, empecé a jadear cuando ni siquiera había hecho nada. A duras penas conseguí llegar a mi habitación y cerrar la puerta, quise subir a mi cama, pero ya no pude, no podía hacer ninguna fuerza. Logre coger la sabana y me desplome en el suelo...

- ¡Lehonor! ¡Hijo, despierta!

Fue lo que escuche mientras abría los ojos, me había desmayado, ¿Qué demonios me había pasado? Mi cabeza me dolía increíblemente, pero recordaba ese extraño sueño, se había quedado grabado en mi memoria.

- Tranquila mamá, solo estaba cansado es todo...e-eso creo, soñé algo extraño.

- ¿Algo extraño? ¿Qué soñaste?

- Pues verás... ¡Agh!

Mi hombro izquierdo empezó a arderme mucho, como si me hubiera caído agua hirviendo, corrí al baño y cuando levante la manga de mi camiseta para ver lo que era...era una marca, lo vi en el espejo del baño, era un 96... ¿Pero qué mierda estaba pasando?, sentí como todos mis músculos se contraían como si estuviera haciendo ejercicio, caí al suelo como un saco de patatas, no podía moverme todo el cuerpo me dolía y empecé a sudar, todo empezó a dar vueltas, lo único que escuche antes de desmayarme fue a mi madre llamando una ambulancia y un hombre con una túnica blanca al frente mío diciendo: "Pasaste la prueba".