El vecino de ojos verdes

4

Cole

Logre ver cómo Dylan se sentaba enfrente de Jess, ella lo miraba confundida mientras que su amiga se veía nerviosa
Intentaba no mirarlos demasiado pero la insistencia de Demian y Jonathan en hablar del tema me hacía más difícil no tener la curiosidad de verlos...
logre ver las miradas de Dylan en mi dirección durante algunos momentos, tenía tantas ganas de oír su conversación, pero las voces de tantas personas dentro de la cafetería me lo impedían completamente, lo único que alcanzaba a percibir eran algunas risas y miradas hacia nuestra mesa...
No lograba descifrar la mirada de Jess, a veces sonreía, a veces se quedaba seria... no sabía si la estaba pasando bien o mal, al mismo tiempo yo no podía dejar de mover mi pierna bajo la mesa, conforme pasaba el tiempo se intensificaba cada vez más.
Después de unos segundos parecidos a horas Dylan se retiró de la mesa de Jess con una papa en su mano y una sonrisa enorme en los labios

-Lo hice-hablo Dylan sentándose

-¿Y bien?-pregunto Demian-¿que te dijo?

Dylan nos miró sonriente, lo cual causó que mi desesperación se intensificara

-Tengo hambre chicos-Me miro-¿te vas a comer eso?

-Por el amor de Dios-Me exalte-¿que te dijo?

-Creí que te daba igual-Me respondió irónico 

-Me da igual, solo que...-

-Entonces  si te da igual no tienes por que saberlo, ¿oh si?-me miro desafiante

Mire a Dylan mientras movía mi boca de un lado a otro intentando contenerme de decir algo de lo que me pudiera arrepentir
Me estaba cansando de su comportamiento hacia mi.

Imbécil

Hable en mi cabeza mientras aventaba mi comida en su lugar, alejándome rápidamente de la mesa, sabía que si me quedaba ahí un momento más no podría contener mis ganas de golpearlo, así que simplemente me puse los audífonos mientras contaba del diez hasta el uno dentro de mi mente, me ayudaba a relajarme, aunque aún podía sentir las miradas de nuestros amigos, y la de Dylan, que en ese momento me parecía completamente repulsiva, aunque fuese igual a la mía.

-Cole, espera-Lo oí mientras volteaba los ojos

-Ahórratelo-conteste antes de salir por la puerta de la cafetería

Ojalá le haya dicho que no, hablaba mi mente con insistencia

Sabía que Dylan traía algo entre manos, no es que el no fuera así antes, es decir, él era bromista, molesto y algo inestable, pero justo hoy se estaba comportando como un verdadero idiota y ya me estaba cansando.

Camine hacia mi siguiente clase dos minutos antes de que el timbre sonara, el salón estaba completamente vacío lo que no me sorprendía ya que la mayoría llegaba cinco minutos después de que la clase comenzara, incluyéndome, pero ahora, aunque solo sean dos minutos quiero estar solo, sin mis amigos, sin la gente yendo de un lugar a otro y sin Dylan por supuesto.

Me senté en la última fila de izquierda a derecha mientras sacaba mi libro de la mochila, leer era una de las cosas que mas disfrutaba de la vida, lo hacía entre clases, viajes largos y madrugadas...

Unos segundos después pude notar una presencia dentro del salón, no tenía que levantar la mirada para saber que era Demian quien había cruzado la puerta.

-Demian-Hable antes de mirarlo

-Nunca fallas-sonrió mientras se sentaba enfrente de mi

-Es mi especialidad-añadí irónico-Y... Sabía que me buscarías, piensas que te metiste en problemas