El domingo familiar de Alexia como siempre transcurría con normalidad, sus primos corriendo de un lado a otro, gritos, baile, canciones, borrachos por ahí y la deliciosa comida de su abuela. Estaba un poco aburrida ya que su primo Jordán se había ido con Maison a su departamento para traer unas cosas, el timbre sonó y Alexia fue a ver quién era.
-Hola. -Frunció el ceño al ver a José ahí, con una caja de lo que parecía ser un pastel.
-Hola, ¿Qué haces aquí?. -Le preguntó mientras lo dejaba pasar.
-Me dijiste que tus reuniones familiares eran las mejores, así que quise confirmarlo.
-Alexia sonrió. -Pues bienvenido seas.
-Ale, ¿Quién es?. -Preguntó su madre con Alejandro en brazos.
-José. -Se acercó a ella y la saludo.
-¿Cómo estás José?.
-Bien y ¿Usted?.
-Me alegro, bien gracias a Dios ¿Vienes por la comida?. -José se quedó en silencio. -Porque si es así, bienvenido seas, hay asiento para otro.
-Gracias señora.
Ella le sonrió y entro a la cocina.
-Te presento a mi familia, ven. -Lo tomo de la mano y lo llevó hacia el jardín.
José no podía estar más feliz, había decido tomar el consejo de Alfonso y ganarse a la familia de Alexia. Tenía razón, la familia influye mucho en las elecciones de tu vida y en tus amistades, si toda tu familia quiere a una persona, tú eres feliz y la aceptas completamente pero si no es así, la situación se vuelve muy incómoda y poco a poco te alejan.
-Familia. -Gritó Alexia para llamar la atención de todas las personas que se encontraban en el jardín. -Les presento a José, es un amigo.
-Hola. -Todos saludaron.
-Ella es mi tía Cindy, mi prima Marcia su hijo Ignacio y el bebé que tenía mi mamá era su otro hijo Alejandro, mi hermano Maikel, mi tío Carson, su esposa Anais y mis dos primos Gemma y Gabriel, mi madrina Beca, mi tío Willy su esposa Nina y mis primos Andrés los hijos de Andrés la pequeña Amanda y Jesus y Alejandra el hijo de Ale, Adrian , falta mi primo Homero y su hija pero ellos vendrán más tarde, en fin esta es mi pequeña familia. -Alexia sonrió.
-Si que es pequeña. -Se rió. -Mucho gusto.
-Bueno, también falta las parejas de ellos y otra gente ahí, pero son todos. -Se encogió de hombros. -También está Poppy. -Señaló a su perrita quien corrió hacia ella.
-¿Todos se reúnen los domingos?.
-Casi todos, son pocas las veces en la que todos podemos estar juntos.
-Wow, es mucha comida.
-Demasiada pero sorprendentemente llega hasta sobrar.
Jessy llegó con una bandeja de limonada y Alejandro tenía un pequeño vaso de plástico que se iba a tomando poco a poco y con cuidado de no caerse.
-Seguro tienes sed, ten. -Le entregó un vaso a José y otro a Alexia. -Atiende a tus invitados.
-Ella asintió. -Lo siento.
El timbre sonó nuevamente y esta vez fue Marcia la que fue abrir la puerta.
-Alexia, llego Joshua. -Gritó Marcia entrando al jardín con el atrás.
-Hola familia. -Gritó y saludo a todos con un abrazo. -Hola. -Saludo a Alexia con un beso en la mejilla.
-Mira José, él es Joshua mi vecino. -Los presento, los dos se dieron la mano. -También viene a comer los domingos.
