¡Shh! °Yoonmin°

¡Shh!

Yoongi soltó otro suspiro cruzando sus brazos en su pecho e inclinándose un poco en su silla mirando al pelirrojo frente de él con una ceja arriba. Se preguntaba por sexta vez en el día como podía soportar a ese niño de mejillas regordetas y ojos pequeños.
Vestido con el uniforme correspondiente y sus dedos pequeños tamborileando la besa en un ritmo indefinido, sus ojos fijos en su persona y una sonrisa decorando su rostro ocultando sus ojos.

-Profesor Yoongi, ¿usted jamás a pensado en cambiarse el color de cabello? Tal vez un aguamarina... No, no, no, ¡mejor un azul!. Se vería espectacular.-Jimin apoyo su barbilla en una de sus manos.-Yo mismo puedo pintarselo, si lo desea.

-Park, haz silencio, estamos en un exámen.-Reclamó el mayor pellizcando el puente de su nariz por el repentino dolor de cabeza que empezó a atormentarlo.

-Yo ya terminé hace 5 minutos.

El mayor se levantó.-Mientras el exámen aún se este realizando, manténgase en silencio.

-Claro profesor Yoongi, me quedaré callado.

Yoongi empezó a caminar por los espacios que las filas de mesas del salón dejaban una al lado de la otra, asegurándose que ninguno de sus alumnos se copiara. Con las manos en la espalda y postura recta, paso de largo al pelirrojo quién soltó un suspiro aburrido.

Jimin miro el techo sin dejar de tamborilear la mesa, su pie empezó a subir y a bajar en un ritmo al mismo tiempo que sus labios emitían una melodía suave.

-¡Shh!

Jimin dejo de emitir la melodía al recibir el shitido del profesor Yoongi, miró la hoja de su exámen ya resuelto en la mesa y doblo la hoja hasta hacer un tubo, se llevó un extremo del tubo a la boca y empezó a soplar como tocando una trompeta. Otro shitido del profesor lo hizo callarse y rodar los ojos.

Una sonrisa traviesa se dibujó en su boca y volteo un poco viendo la espalda de su profesor caminando por el pasillo hasta el final del salón. Miró a la pizarra y se estiró en su asiento.

-¿Sabe profesor Yoongi?-Jimin escucho el gruñido de fastidio del profesor desde el fondo del salón e incluso sintió como rodó los ojos.-Ahorita que me acuerdo, yo lo ví en estos días. Estaba en una cafetería y tenía un perrito ¿Es suyo? Es muy lindo ¿Cómo se llama?-Jimin escucho los pasos del profesor acercarse a la primera fila que era donde se encontraba.-Yo tengo una gatita de solo unas semanas, la recogí de la calle hace dos días. Mi madre es alérgica a ellos pero como está de viaje puedo aprovechar para cuidarla y después le conseguiré un hogar.-El profesor Yoongi se acercó hasta el chico y le quitó el exámen de la mesa.-¿A usted le gustan los gatos?

-No.-Yoongi miró a su alumno recolectando la paciencia que no tenía para no gritarle.-Puedes irte temprano Jimin.

-Pero no puedo irme a mi casa hasta que el timbre-

-Ya lárgate Park.

-Pero-

-¡Shh!

-Profesor Yoon-

-¡Shh!

-...-Jimin se encogió en su asiento ante la mirada del mayor, aún así, sonrió con burla.-Gracias profesor Yoongi, usted es el mejor.

-Ya largate.

Jimin se levantó colgando su mochila en el hombro, dió una reverencia al mayor y salió corriendo del salón con una enorme sonrisa. El silencio repentino del salón fue opacado por las risas de los alumnos al show que monto el pelirrojo, pero una mirada de parte del mayor causo el deseado silencio que quería el profesor y todos volvieron a su exámen.

Yoongi camino hasta su escritorio dejando el examen del pelirrojo en la superficie de madera y sentándose en la silla. Soltó un suspiro, que bueno que era viernes y ya no soportaría a Jimin por dos días.