Almas Gemelas - Spideypool

Parte 1

Cada persona que existe en el mundo tiene a su alma gemela y a cierta edad aparece su nombre tatuado en alguna parte de su cuerpo.

Para el pequeño Peter de 4 años, esa historia le fascinaba, pues vivía con la ilusión de encontrar a esa persona destinada para él. Solía preguntarle al respecto a sus tíos, los cuales siempre terminaban contando la historia de sus padres: Tony y Steve, quienes a pesar de ser diferentes y sobre todo ser de épocas distintas lograron complementarse y estar juntos.

Y aunque escuchar esas historias alegraban su inocente y joven corazón, sabia perfectamente que el nombre de su alma gemela no llegaría hasta en unos años.

¡Oh, pobre e inocente Peter!

A la corta edad de seis años, el pequeño niño pasó todo un día quejándose de un ardor y picazón bajo su cadera, cerca de su nalga derecha.

Sus padres, preocupados por su hijo, lo revisaron notando como en esa zona aparecían unas lineas negras que no mostraban nada lógico.

Nerviosos solo le dijeron al niño que se trataba de alguna alergia pero Peter no era tonto, ¡Por dios!, su padre era el mismísimo Tony Stark, obviamente era listo. Pero, no dijo nada y solo se retiro a su habitación.

Los adultos se miraban entre si, algo nerviosos pues sabían lo que esos trazos significaban. El nombre del alma gemela estaba apareciendo en su hijo.

—Sabemos lo que quiere decir, Tony —comentó el Capitán al ver a su esposo sentándose en el sofá de la sala.

—Ni se te ocurra decirlo —Amenazó. Pero, Steve lo ignoró.

—El alma gemela de nuestro hijo es alguien mayor.

—¡Con un demonio, Steve! ¿Que mierda te acabo de decir? —Exclamó Tony mientras se tiraba al sofá y cubría su rostro con ambas manos.

—Lenguaje, por favor. —Dijo Steve y se sentó al lado de Tony —Nuestro hijo está destinado a alguien mayor que él y no lo podemos evitar. Te recuerdo que sucedió lo mismo contigo.

—Debe ser de familia que terminemos con mayores.

Ambos rieron y por el momento decidieron dejar el tema en paz.

Cuando Peter tenia doce años podía escuchar como sus compañeros decían emocionados que empezaba a aparecer los nombres de las parejas destinadas, aunque solo eran trazos intendibles, se veía su emoción. Pero el niño no participaba en aquellas conversaciones, pues él ya tenia el nombre completo y marcado en su piel.

Cuando sus padres preguntaban por aquello, el pequeño se limitaba a contestar "no aparece" y eso tranquilizaba a los adultos, pues creían que lo que hace años sospechaban solo se quedaba en eso, sospechas y Peter con los años ignoraba el nombre olvidándose que lo tenia escrito.

Así fue pasando el tiempo hasta sus 15 años y Peter pasó a ser el amigo y vecino hombre araña, cosa que cuando sus padres se enteraron pegaron el grito en el cielo, pero fueron aceptándolo eventualmente, siempre y cuando el chico usara el traje que su papá Tony hizo para él (con modificaciones marca Stark).

Pero aún así no pudieron protegerlo de evitar conocer al mercenario bocazas Deadpool, quien se esforzaba en pasar tiempo con el adolescente. Al principio a Peter le incomodaba e incluso le irritaba pero con el tiempo la cercanía se volvió en algo usual, como cada noche de patrullaje encontrarse en la cima de un edifico y comer los extravagantes alimentos (por no decir grasosos) que llevaba el mercenario.

ººº

Spidey llegaba tarde (muy tarde) al encuentro con Deadpool, pues en el camino tuvo que evitar un asalto a una tienda que le provocó más problemas de lo esperado.