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Desde hace un tiempo el mercenario bocazas, conocido por ser extremadamente violento y un asesino de primera clase, había decidido dejar ese mundo atrás, pensó que sentar cabeza ayudaria a estabilizar su vida y ser mejor persona, por lo que decidió dar el siguiente paso con el amor de su eterna vida, su amada Vanessa.

Después de casarse decidió unirse a S.H.I.E.L.D. con la intención de enderezar su vida laboral y así fue como conoció a una gran persona, a alguien que fue paciente, se preocupó por él, le demostro afecto y lo impulsó a ser cada vez mejor persona, era una de las tristemente pocas personas que lo habian tratado así en toda su vida, por lo que no pudo evitar sentir admiración y cariño por aquel chico, el hombre araña.

Hacían patrullaje casi todas las noches y ambos se divertían mucho con los chistes ocasionales que se les llegaban a ocurrir (a Deadpool casi toda la noche y Spidey preferia soltar su aresenal de bromas durante las peleas, al parecer le encantaba burlarse de los villanos) y, después de terminar su ronda de patrullaje cenaban cualquier cosa que encontraban y se sentaban en la orilla de algún edificio a comer y hablar.

Aquella noche las cosas habían estado bastante movidas, un robo en un banco, un choque automovilístico, Deadpool se resbaló y calló de un edificio de 10 pisos rompiéndose varios huesos por lo que tuvieron que parar un buen rato y, por último, se encontraron con quien menos se esperaban, Venom.

Venia buscando venganza conta Spider-Man por su última derrota y se veía realmente enojado. Pelearon durante un buen rato, al final, como siempre Venom terminó perdiendo gracias a Deadpool, pero antes de desaparecer amenazó a Spidey.

- Anda con cuidado Spider-Man -mencionó mientras se alejaba- cuando tu compañero se valla no tendrás tanta suerte -finalizó y luego desapareció en la oscuridad.

Spider-man no padeció tomarle mucha importancia a las palabras del simbionte, pero Wade sí. Se encontaban cenando burritos en la cima de un edificio, Peter movia sus pies tranquilamente mientras observaba el paisaje de los múltiples edificios y rascacielos iluminando la oscura noche al ritmo que comía, disfrutaba esos momentos por que en su ajitada vida era muy difícil tenerlos. Pero Wade estaba tenso y alerta pensando en que Venom atacaría en cualquier momento.

- ¿olvidas que cuenta con un exelente sentido arácnido y que es uno de los mejores héroes de Nueva York? Él estará bien, ya no te preocupes y come que me muero de hambre - le recordó una de sus voces, Blanca.

- Pero tu viste esa cosa, parecia mierda negra que cobró vida y va tras Spidey - comentó su otra voz llamada Amarilla.

- Amarilla tiene razón, alguien con sed de venganza puede ser muy peligroso -pensó Wade sabiendo que sus voces lo escucharían.

- Él sabe defenderse

- Pero somos un super equipo, no puedo dejar que algo malo le pase.

- ¿Por que no lo seguimos hasta que sepamos que está en un lugar seguro?

- ¡Eso jamás! Sabemos lo importante que es para él su vida privada.

- No vamos a invadir su privacidad, vamos a asegurarnos de que este seguro, al final nos lo agradecerá.

- Tiene razón, vamos a seguirlo para que no le pase algo.

Antes de que Blanca pudiera replicar, la voz de su acompañante los sacó de su burbuja.

- Hey Deadpool ¿estas bien?

- ¿Eh?-levantó la vista para encontrarse con su acompañante parado en la orilla del edificio, al parecer estaba a punto de irse-Si ¿por que lo dices?

- Por que estas callado, eso es preocupantemente anormal en ti.

- ¿De qué hablas? Estoy perfecto y hermoso como siempre, Spider-Man.

Estas palabras en lugar de calmar a Peter lo hicieron preocuparse más, estaba extrañamente acostumbrado a que Wade lo llamara "Spidey" ó "baby boy" incluso algunas veces lo llegaba a llamar "Cariño" cosa que no le molestaba, pero tampoco podía decir que le agradaran mucho los últimos dos, así que cuando lo llamó "Spider-Man" (por primera vez en lo que llevaban de conocerse) se preocupo por él aún más.

-No lo creo -se acercó a él y agachandose puso la palma de su mano en la frente de Wade- Tal vez tienes fiebre ó no te regeneraste bien después de la caida -comenzó a golpear suavemente el cráneo del ex mercenario como si de una puerta se tratase al mismo tiempo que hablaba- ¿Hola? ¿Hay algo ó alguien ahí? Si lo hay ¿Podrían regresarme al Wade que conosco? Se los agradecería mucho.

Wade río levemente y tomó la muñeca del arácnido para alejarla de su cabeza.

- Hey tranquilo baby boy ó matarás a mis últimas dos neuronas.

Peter soltó una pequeña risa infantil, como un niño pequeño y travieso.

- Ok ya -se soltó del agarre de Wade al bajar su mano- ¿Seguro que si estas bien?

- Segurísimo.

Se quedaría más tiempo a averiguar lo que le pasaba, pero recordó que ese viernes tenía que estar en un lugar antes de las 12:00 pm y al parecer Wade ya estaba bien, bueno algo así, tratandose de él no se atrevía a asegurar algo, mucho menos que estuviera del todo bien.

- Eso espero, no hagas algo estúpido y vuelve a tu casa con Vanessa que de seguro te esta esperando.

- Hacer algo estúpido es mi segundo nombre.

- Tu segundo nombre es Winston.

- No menciones ese feo nombre, Stanley.

Peter no entendió a que se refería cuando lo llamo Stanley, y preferia no preguntar, a veces Wade llegaba a ser muy raro.

- Bueno, adiós Wade.

Lanzó una telaraña y se fue, pero no en dirección a su casa.

Sin perder demasiado tiempo Wade comenzo a seguirlo.

Se encontraba a tres  edificios de distancia del arácnido, observó como este se detuvo en la orilla de no un edificio cualquiera, si no la gran torre de Oscorp.

- ¿Qué carajo esta haciendo? ¿Acaso no sabe que el loco dueño de esa empresa es el duende verde? -susurró Wade al ver la tranquilidad con la que su compañero se quedaba en el techo de Oscorp.

- Parece que espera a alguien -observó Blanca.

- Parece algo ilegal.

- No seas tonta, Spidey nunca se involucraria en algo así.

Para ese momento Wade ya se encontraba a un edificio de distancia de Oscorp y de su cinturón ya habia sacado unos binoculares y un instrumento de hackeo con el cual estaba encendiendo de manera remota el intercomunicador del trepa muros,cosa que logró fácilmente.

Mientras tanto en el techo de la torre Oscorp Peter esperaba tranquilo mientras veia Nueva York de una manera que pocos pueden, sonrrio al recordar que él le había dicho que ni siquiera el brillo de la gran manzana encendida se comparaba con el maravilloso brillo de su sonrrisa y de sus ojos, cuando el sonido de una puerta abrirse y cerrarse lo sacó de sus pensamientos y al voltear ahí estaba él, sonrriendole como solo él podía.

Wade vio como las cámaras en el techo giraban, dejando al arácnido en un punto ciego.

- Esto no puede ser bueno -pensó.

- Si alguien se tomo las molestias de girar las cámaras es por que definitivamente no quiere que nadie se entere de eso.

- Tiene que ser alguien importante como para tener acceso a la seguridad de la torre.

- O alguien muy listo, de cualquier modo esto no va a salir bien.

Wade vio cómo la puerta se abría y cerraba y de esta salió nada más ni nada menos que Harry Osborn, el hijo del duende verde.

¡Infiel!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora