II

2 0 0
                                    

Unas semanas después, decidí ir al invernadero de mi madre

Un gran logro de mi parte, ya que en las anteriores semanas no me atrevía ni a ir a la cocina

Boris me acompaño hasta en jardín secreto de mi madre, así es como ella lo llamaba

El a estado conmigo, acompañándome, y ayudándome en lo que necesitara

Me insistía en que debía ir a un psicólogo, para que pudiera desahogarme y me dijera lo que en realidad vi esa noche. Pero yo me he negado a eso, yo se que no estoy loca, vi a mi madre y a mi hija esa noche, de eso estoy segura

Lo que no se es porque esa noche corrí por el sendero del bosque, porque siento algo en le casa de mi madre, que ahora es mía por herencia

No lo sé, pero siempre sentía algo extraño en esa casa cuando la visitábamos para ver a los abuelos

Un ambiente pesado y como. ¿misterioso?

No, que inmaduros pensamientos

Sumida en mi mundo estaba, que no fue hasta que Boris me toco el hombre que reaccione

---¿Qué sucede señorita? ¿se encuentra bien? --- me mira preocupado

---si, estoy bien, tranquilo, y te he dicho que me llames por mi nombre, me incomoda tanto respeto hacia mi ---estoy algo incomoda por el sentimiento de superioridad

---esta bien Margaret, pero, ¿segura de que estas bien? --- vi sus fracciones relajarse, pero su mirada decía lo contrario

---si, segura. Ahora, entremos ---respire hondo, estaba muy nerviosa, no entro aquí desde que tengo 14, han pasado 7 años desde entonces

Boris sostuvo la puerta para que yo pudiera pasar. Tengo que admitirlo, a pesar de su humilde vida de campo, es todo un caballero

En el momento en que me adentre en el invernadero, un aroma a lavanda invadió mis fosas nasales, produciéndome un sentimiento de melancolía y recuerdos de mi infancia

Mi madre usaba un perfume de este mismo aroma, decía que era una de las flores más mágicas que podían existir. Nunca lo entendí

Comencé a admirar cada rincón de ese viejo, pero hermoso invernadero. Mi madre tenia un toque especial, un sello personal. Cada vez que entrabas en un lugar, algo te hacia sentir que ella interfirió en ese espacio, el aire tenia algo especial Mi madre era única

Me quede mirando una planta en específico, una hermosa roza roja, de un color tan intenso como la sangre, de unas espinas tan punzantes como una aguja, de un encanto tan hipnotizante como los ojos de una serpiente

Aun recuerdo el día en que mi madre la instalo Fue el mismo día en que mi padre falleció

Saliendo de mis pensamientos, termine el recorrido por el hermoso lugar

Devuelta en la puerta, eché un ultimo vistazo a aquel lugar

---¿Qué harás con este lugar? --- lo miro unos segundos. El sigue maravillado con este mágico lugar

---lo conservare, y lo cuidare, tal como lo hacia mi madre cuando vivía---

---bien. Si quieres, yo puedo ayudarte--- la idea no era mala, de hecho, era muy buena, pero no quería abusar de su bondad

---no, no quiero abusar de ti, ya me as ayudado mucho--- solo puedo dedicarle una sonrisa, de esas heredadas de mi madre

--- no es abuso, además, este es mi trabajo, recuerda que soy jardinero. En serio, Magdalena, quiero ayudarte---

---Está bien gracias Boris---

NocheDonde viven las historias. Descúbrelo ahora