SEVEN DEADLY SINS. [IronStrange Week 2019]

Grandes Pelotas

Autora: @AguileraHolmes (pues quien más xd)

Universo: AU (Tony y Stephen son estudiantes y están juntos en un equipo de Futbol)

Advertencias: AU, Romance, Smut. Acoso Sexual.

Resúmen: Tony no puede dejar de pensar en Stephen y sobre todo en su gran... Capacidad para atrapar los balones. :v

§

Corrió apurado hacia las duchas, revisó la hora y bufó, la práctica había acabado hace veinte minutos pero el se había quedado coqueteando con las porristas.

Llegó y se quitó la camisa, entró en uno de los cúbiculos y comenzo a bañarse, libero la tensión al sentir el agua recorrer su cuerpo. Terminó de bañarse lo mas rápido posible y se cambio la ropa. Estaba dispuesto a irse de ahí, pero escucho una voz conocida...

Si no se equivocaba, y nunca lo hacía; era Stephen Strange su tosco compañero de equipo, o «El hechicero » como los aduladores lo llamaban, según porque siempre atrapaba los balones por arte de magia. Se preguntaba porque diablos estaba duchandose ya que el no entrenó.

Pero no sabía que cantaba, y a decir verdad lo hacía muy bien, sonrió y se acercó un poco a la rendija de la puerta para confirmar si era él dueño de la voz.

Pero terminó fijandose en todo menos su voz, sus hombros anchos cubiertos de jabón, su torso definido empapado; se sonrojo al pensar que era muy similar a un lavadero, continuó con su apreciación, notando sus brazos fornidos, bajó la vista hasta la V en su cadera y vió su miembro.

Sus ojos por poco abandonan sus órbitas y su mandíbula cayó al piso al notar el tamaño peculiar del pene del pelinegro.

—¡Por Dios! ¡El hechicero lo tiene supremo! —exclamó en un susurro.

Stephen se volteó asustado al escuchar eso y Tony a duras penas se escondió y salió corriendo del lugar con el corazón en la mano.

Ya estando en clase, Stark no podía concentrarse, la imagen de la polla de Strange rondaba su cabeza, se preguntaba como se vería erecto, o quizá como se sentiría en su interior. Meneó su cabeza tratando de alejar sus pensamientos y llevó su mano hacia su mejilla notando que el calor que irradiaba de ella era similar al calor en su entrepierna; se había excitado solo con pensar en la hombría de Stephen.

Los minutos se le hicieron eternos hasta que la campana sonó. Sin pensarlo dos veces huyó de ahí hacia los baños, encerrandose en una de las cabinas, sentandose en la tapa del inodoro, suspiro pesadamente y se bajo los pantalones, libero su miembro y empezo a acariciarse, subiendo y bajando su mano en toda la longitud de su erección, se mordió los labios para acallar los gemidos que amenazaban con salir y aumento la intensidad con la que se masturbaba.

–Stephen... –soltó en un jadeo antes de correrse en su mano. Se limpió y se reacomodó la ropa y salió de la cabina, se dirigió al lavabo y notó que Strange salía de otra de las cabinas asustandose al instante. ¿Lo habría escuchado jadear su nombre? No lo sabía, la expresión en el semblante del pelinegro no se lo decía, haciendo caso omiso a sus pensamientos regresó al salón.

En la mañana siguiente, fue hacia la cancha de futbol, tenía entrenamiento para el partido de esa noche. Se colocó en fila junto a sus compañeros a esperar las ordenes de la D.T