Capítulo 31 (maratón 1/5)

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Narra Joel

Al momento en el que __________ me dijo que Juliana en realidad era Kristy me sentí un completo imbécil, estúpido.....ash ni siquiera había una palabra que me describiera, me acosté no se cuantas veces con esa víbora que ahora me doy asco.

Ahora todo tiene sentido, por eso Juliana conocía todo de mí y de ______ por eso cuando me llegó le llegó el paquete a ______ sabía perfectamente que ella es mi esposa y por eso se me insinuaba y hacía todo lo posible para que yo cometa estupideces como la que hice hace unos minutos....¡todo era un maldito plan de esa perra para que mi matrimonio se fuera por un tubo directito a la m...! ¡pero yo soy el único imbécil culpable!

Así que me fui a mi oficina y la encontré tan feliz de la vida y la puta razón era yo porque seguramente ya vió que abrí la maldita carpeta.

- Joel mientras no estabas vino un inversionista y dijo que el proyecto está en la etapa final y que necesitaba de urgencia el dinero. Joel tenías que pagar eso ya....¿en que estabas pensando?

- no...mejor dime tú en que estabas pensando Juliana, o debería decir Kristy.

- no...no sé de que me estas hablando- intento irse pero el la tomo del brazo

- sabes perfectamente de qué te estoy hablando...eres una maldita- ella solo se río y se soltó del agarre

- no Joel yo no soy la maldita el único que si lo es eres tú. Tu fuiste el único culpable de que mi primita haya pasado el peor infierno junto contigo. Y además de que eres tan estúpido que hiciste todo lo que yo quería, no obtuve tu amor pero por lo menos ya no seguirán juntos.

- ¡eres una madita perra!- ella alzó los hombros sin importancia- ¡quiero que cojas tus cosas y te largues de mi oficina!

- tú no puedes hacerlo, no tienes el poder suficiente además que yo tengo el contrato de mi tía

Joel sentía mucha ira e impotencia en su interior ya que quería acabar de una vez y para siempre con la perra de Juliana pero no podía hacer nada por el maldito contrato.

- si no tuvieras ese contrato te juro, te juro que te sacaba de mi empresa para siempre. Eres una víbora no se como pude haberme acostado contigo

- para que lo sepas yo en ningún momento te obligue a que lo hicieras tú viniste conmigo, a tu propia voluntad.

- enserio que eres despreciable, como pudiste hacer tanto daño a tu propia familia.

- esa...esa no es mi familia. Esa es una maldita perra que me quitó todo lo que yo alguna vez quise. Una mamá que te apoye en todo lo que tu quieras, que no te obligue a conseguir un esposo millonario pero ves ella lo tiene todo.

- no me vas hacerte sentir lástima porque por tu culpa el amor de mi vida me debe estar odiando ahora mismo.

- pues me vale, porque ese era el plan ahora ni tu, ni ella serán felices y tendrás que aguantarme viéndome todos los días como tu secretaria- sonrió burlonamente

- eres una hija de....- la tomé del brazo demasiado fuerte que vi su expresion de dolor enserio que a esta si me daban ganas de golpearla

- me vale, ya te dije y sueltame que me esta doliendo el brazo- forcejeaba pero el la apretaba más

- Joel sueltame de una maldita vez que yo no soy ________ yo si me voy a denunciarte.

Él solo se resignó y la soltó, iba a odiarla por el resto de su vida pero tendría que soportarla por el maldito contrato.

- ahora si me permites tengo que ir a trabajar.

- eso es lo que crees niña- entró mi mamá.

- ¿mamá?

Me casé con una bestia ~Joel Pimentel y Tú~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora