𝐒𝐎𝐋𝐈𝐀 𝐏𝐄𝐍𝐒𝐀𝐑 ¦ eremin

↬O16

El moreno despertó a media noche sobresaltado, sudoroso y con un mal sabor en la boca. Había oído de las supuestas pesadillas que la mayoría de soldados de la legión tenía pero no pensaba que fuesen así de horribles. A pesar de no recordar con exactitud lo que había sucedido en el sueño su cuerpo seguía temblando.

Inhaló y exhaló estrepitosamente repetidas veces hasta sentirse más tranquilo, siguiendo el consejo que su fallecida madre le daba cada que tenía sueños malos.

-¿Eren?- oyó musitar la suave voz de Armin, quién estaba justo en la parte superior de la litera que compartían.- ¿Estás bien?

Su dulce voz le calmó y entonces recordó lo que había soñado. Armin, Mikasa, todos, siendo deborados por aquellos enorme seres de rostros enfermizos, quizá a ojos de veteranos como el capitán Levi o el comandante Erwin el sueño era algo monótono nada fuera de la realidad, pero el para el, el simple hecho de recordar esas imágenes creadas por su imaginación le daba escalofríos.

Quería subir las escaleras de esa litera y estrujar entre sus brazos al rubio, la simple idea le hacía sonrojar y sentir su cuerpo arder, como si tuviese fiebre pero más placentero. De pronto el miedo se había desvanecido, a pesar de que lo que pasaba en su cabeza eran sucesos imaginarios, no podía evitar sentirse una pequeña chispa de emoción.

¿Sería raro dormir con su mejor amigo?... ¿Amigo?

En ocasiones el moreno se sentía raro al llamarle "mejor amigo" a quien casi besa, pero aún no sabía si llamarle "amor platónico" o algo similar, pues el nunca había amado a alguien antes, por ello el amor se le hacía algo complicado y se sentía confundido sobre que era realmente lo que sentía por Armin. ¿Quizá sólo lo apreciaba demasiado? Algo así como su relación con Mikasa.

-¿Eren enserio estás bien?-le escucho preguntar de nuevo, pero ahora la mitad de su cabeza se asomaba dejando ver solo sus aniñados ojos azules y su pelo caer hacia abajo a causa de la gravedad.

-Armin, tengo miedo.

Quería dormir con Armin está noche pero le avergonzaba que Jean y Connie- quienes dormían en otra litera en el otro extremo de la habitación- le vieran durmiendo con su amigo.

-¿Porque?- cuestionó de nuevo. A pesar de no poder ver su rostro completamente sus ojos se mostraban preocupados, preocupados por el.

-Tuve una horrible pesadilla.- a pesar de haberse calmado hace un rato no le costó nada fingir el susto que se había llevado hace unos segundos.

-Oh, tranquilo solo fue un sueño- le consoló poniendo una de sus manos en su cabeza, palmeandola suavemente.-Ire a dormir, si necesitas alg-...

-Si, necesito que duermas conmigo- dijo subiendo el tono aún más de lo debido. Noto como Connie se retorció entre las sábanas. Asustado, hizo los sonidos que las madres suelen hacer cuando sus bebés lloran e intentan callarles- Sh, sh, sh, sh~

Cuando dejó de moverse fue cuando soltó un suspiro aliviado, volvio su mirada a Armin quién le miraba interrogante.

-¿E-escuché bien?- pregunto titubeante y un tanto sorprendido por la extraña petición de su amigo. Eren asintió mientras jalaba insistente la manga de su suéter con delicadeza

-Por favor, tengo miedo...- rogó.

Vio a Armin soltar un suspiro para volver a subir a su cama y bajar por las escaleras de la litera junto a una almohada y su sábana.

-Gracias, Armin.

El castaño se hizo a un lado mientras palmeaba un costado de la cama, Armin se sentó primero para posteriormente subir ambas piernas y después dejar caer su torso sobre el colchón. Se dió la vuelta dándole la espalda a Eren.

Eren pudo notar el nerviosismo de el ojiazul al oír como tamborileaba con uno de sus dedos la madera de la cama.

-Armin- le llamo de nuevo. El nombrado volteo una parte de su cabeza hacia el, a pesar de la oscuridad pudo notar el inmenso rubor carmesí que había en sus pómulos-¿Puedo abrazarte?

Pareció sorprendido por la aún más extraña petición, parecía bastante avergonzado así que en respuesta solo asintió con timidez. Eren sonrió triunfante mientras pasaba su brazo por su torso atrayendolo a el, pegando su pecho a su espalda, poniendo su cabeza en la nunca de Armin. Al estar tan cerca pudo escuchar como su corazón latía fuertemente.

Probablemente después de esto Armin tendría aún más razones para evitarle, pero por eso se preocuparía después, hoy iba a disfrutar la compañía que había en su cama.

El moreno no tardó mucho en volverse a quedar dormido, más sin embargo se vio obligado a pararse antes que todos para así no le vieran durmiendo con Armin y evitar chistes groseros por parte de Jean.

Probablemente a este no se le cruzaría por la cabeza lo que realmente estaba pasando, ya que era un idiota, pensó Eren, más sin embargo no quería tenerlo llamándole miedoso o otro tipo de cosas.

• • •

Nota de autora: Bueno, les quería agradecer a las personitas que leen y votan por la historia, los quiero mucho 💞 gracias a ustedes ahora somos la historia nomber guan en la categoría eremin ;(

Also les quería hacer spam de mi historia de one-shots de aot, por si gustan pasar a leerla, prometo actualizarla seguido ;(

Este capítulo va dedicado a estelar111, quién también tiene una bonita historia de mis bebés ❤️