Wei WuXian si recuerda el pasado, especialmente aquel día en el que quería decirle la noticia que más esperaba junto a la persona que amaba hubiera pensado que sólo era un sueño, que la felicidad de aquel entonces no era nada más que algo inventado por su imaginación y ni siquiera decir que ya no sabía que era lo real o ficticio para él, pero esas palabras que le llenaron su corazón con aquel calorcito fue todo lo que necesito para saber que todo lo que estaba sucediendo era real.
- [Felicidades. Está en estado] - le dijo la mujer viendo unos papeles en su escritorio.
Aquel día llevo sus manos a su plano vientre y él no podía creer lo que escucho, pero estaba más que seguro que no eran imaginaciones suyas y el sonrió con lágrimas en sus ojos de pura felicidad al saber que tendría un hijo con el amor de su vida... pero jamás imagino que todo lo que sucedería a continuación destrozaría su mundo y felicidad.
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El sólo recordar ese momento le hacía doler el lugar donde se encuentra su corazón... claro que ahora no le duele tanto como hace 16 años atrás. El pudo salir adelante y más con saber que su pequeño estaba dentro de el en espera de poder conocer a la persona que sería su rayo de luz y esperanza, y ahora, que está con el no pudo estar más que en lo correcto y ahora su corazón le pertenece al hombre que es su esposo y padre de su pequeño bollo y su actual hijo aún no nato, el cual al parecer se vuelve demasiado inquieto si no tiene a su padre al menos una hora al día cerca, ya que en ese momento le estaba dando leves golpecitos en señal de que quería que su padre le diera mimos y que le hiciera lo mismo a su mami.
- Ya pequeño, si vamos con tu padre. Pero deja de darme tales golpes - reía mientras se acariciaba su pancita, la cual se tranquilizó al oír la voz suave de su progenitor.
Wei WuXian rio nuevamente y sin detenerse y a paso seguro se dirigió al patio de entrenamientos de aquel lugar que ha sido su hogar desde después del nacimiento de su pequeño A-Yuan y en el cual sabe que encontrará a esa hora a su esposo entrenando a los menores y que ahora nadie le tenía miedo al modo de enseñar y que tenía hasta el respeto de todas las personas que son de su clan y todos le agradecen a él por el cambio bueno que provocó en el mayor.
Dicho y hecho. Su esposo estaba ahí, supervisando los entrenamientos de los menores junto con el de su hijo y el cómo este mejoraba cada día más, siendo un prodigio desde que tomó la espada y el arco, siendo igual de bueno que él.
Para todos, A-Yuan es el orgullo de Qishan Wen y que sus padres lo son todo para el menor y ahora que será hermano mayor se ha esforzado aún más en poder proteger a su madre junto con su herman@, ya que su padre es muy fuerte como para que alguien lo proteja o eso el mismo Wen RuoHan le ha dicho y hecho prometer al menor.
Pero regresando al presente. Wei WuXian camina elegantemente mientras la servidumbre le saluda y reverencia dándole una sonrisa que el devuelve del mismo modo, haciendo que las personas de más edad, que llevan años en el lugar le agradezcan en silencio su existir en el lugar y haber cambiado a su señor a bien.
Él sabía sobre la fama del pasado de su esposo. Sobre como su secta de regia con mano dura sometiendo a otras sectas más pequeñas y de como de estas sólo quedaban cenizas de lo que habían sido en vida.
Muchas sectas temieron a la secta Wen, pero cuando el llego allí y conoció a Wen RuoHan de verdad, supo que ambos tenían muchas cosas en común y que con el tiempo que compartían, veían que el mismo líder iba cambiando con ayuda del menor.
Así fue que antes de que naciera el pequeño A-Yuan ambos se volvieron pareja. Cuando su pequeño bollo cumplió los 3 años, el hombre que se consideraba sin corazón y una coraza irrompible, tuvo su momento de debilidad al momento de pedir la mano del menor, el cual con lágrimas le dio el sí.
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Nadie como tu
FanfictionSi los ancianos no hubieran echo lo que hicieron el no sería feliz con la persona menos esperada para todos. Todos adquirieron una idea equivocada de aquel hombre de carácter severo y estricto, pero el menor ha convivido con aquel hombre, el cual es...