Mírame; trueno. || terminada.

cinco.

Leila; 2 meses después.

-quizás no es para vos mateo, quizás no encontraste a la persona indicada todavía.-

-no se, lo único que se es que estoy cansado de estar mal por ella, todo el tiempo me pelotudea y me tiene como quiere. no me merezco esto.-

-no, no te lo mereces-

-¿a vos no te dice que onda, no te habla de mi?-

-no mateo, desde que nos hicimos mejores amigos casi ni me habla.-

-me da bronca, te juro que esta vez fue todo, no voy a volver con ella. me canse.-

-si van a volver teo.-

-no, porque decís eso?-

-es lo que pasa siempre, se pelean, dicen que no van a volver mas y vuelven a los días.-

-no es asi leila.-

-si es asi.-

-leila no digas boludeces, no vamos a volver mas.-

-mateo te conozco, yo te banco todo el tiempo y se que la queres de verdad, en un abrir y cerrar de ojos van a volver.-

-vos porque no me entendes leila.-

-¿es joda? soy la que te banca todo el tiempo mateo, como no te voy a entender?-

-si tanto te molesta bancarme no lo hagas mas.-

-mateo, yo no dije eso, no flashes.-

- y si leila, no entiendo porque te jode tanto que vaya y vuelva con cecilia, que te molesta.-

-no te dije eso mateo, me dijiste que ya fue todo definitivo y te dije que iban a volver, nada más.- dije mientras acariciaba su brazo intentando que se calme.

-¿como carajos haces?- dijo mientras se sentaba mirándome fijamente.

-¿como hago para que?- pregunté desentendida.

-para bancarme, ¿como haces? estás ahí al pie del cañón siempre sin importar que sea lo que pase. me escuchas con los mismos problemas de siempre, me bancas más que nadie. no entiendo, ¿como haces para bancarme siendo que soy un gil todo el tiempo?-

-lo hago porque te quiero mateo, te quiero, y mucho. y jamás pensaría que sos un gil, no entiendo ni siquiera como vos podes pensar eso.-

-no se, lo pienso seguido. igual, yo te quiero muchísimo más.-

-no como yo.-

-ay, ¿vamos a empezar a pelear por quien se quiere mas como si tuviéramos cinco años?- rio.

intente reír también, pero otra vez, no me salió.

-¿te pasa algo?-

-vos me pasas.-

-¿que?- hablo confundido.

-nada jajaja.- dije agarrando mi celular.

-ahora decime, ¿a que te referís leila?-

-a nada tonto, lo dije sin pensar, tengo la cabeza en cualquier lado.-

-¿te pasa algo conmigo?-

-¿en que sentido?-

-¿sentís algo por mi?-

pensé nuevamente en si sería correcto revelarle lo que sentía en un momento así.

no lo hagas, mira si te usa para olvidar a Cecilia, bajón pasar por lo mismo de nuevo. -recriminó mi subconsciente.-

-no amigo, te dije eso porque me hiciste poner sensible, tipo diciéndome que estoy siempre para vos y todo eso, no empecemos con lo mismo otra vez.-

-¿segura?-

-¿porque no me crees mateo? obvio que si.-

recibí una media sonrisa acompañada de un suspiro -la cual no entendí- y nuevamente lo sentí acurrucarse en mi pecho, me acomode mientras le acariciaba el pelo.

podría quedarme así con vos toda la vida, sin importarme lo que esté pasando afuera, todo se calma en mi mundo cuando estoy con vos, mateo.