Calvario sin final

Siempre lo mismo

Luego de tanto tiempo presa de aquel dolor había llegado alguien el cual cambió todo. Me hizo sentir libre como los pájaros. Sentía que podía tocar el cielo son sólo estirar mi mano. Todas nuestras charlas eran un mar de carcajadas al cual me encantaba hundirme. Estaba todo el día ebria por la felicidad que él me brindaba. Desgraciadamente la persona que logró desencadenarme me estaba atando a otra tortura que no noté hasta el día de hoy, cuando él desapareció, cuando me di cuenta que todo había sido un engaño, una mentira, una falsa afirmación que aunque por momentos me hizo la persona más alegre del mundo después logró que volviera a mi calvario. Duele. Duele mucho. Podría decir que aun más que antes. Fue como si le dieran un dulce a niño y luego se lo sacaran. No entiendo como caí tan bajo. No entiendo como creí todo. No entiendo como estoy llorando otra vez por una razón que me prometía firmemente no volver a hacerlo. No me entiendo. ¿Por qué me ilusiono? ¿Por qué creo todo? ¿Por qué pienso que tengo posibilidades? Idiota de mí. Nunca podré tener una vida como tanto anhelo. No debería creer que podría. No debería volver a intentarlo. Siempre termina así de mierda. Siempre.