I'll be Your Bitch Tonight.

1

Hoseok estaba raro y él lo sabía. Volvía tarde del trabajo, a veces casi a la hora de dormir y venía cansado, siempre cansado. Algo le pasaba.
La pregunta aquí era ¿qué?

Muchos dirían que debería haberle preguntado y no hacerse suposiciones, pero, si bien Min Yoongi era un chico muy directo al decir las cosas, no era bueno preguntando por ellas. Así que lo más parecido a preguntarle a Hoseok que encontró, fue preguntárselo al mejor amigo de éste.

—¿Hoseok está engañandome?

Taehyung escupió el chocolate que estaba bebiendo.
—¡¿Para eso me invitaste aquí?!

El pelinegro limpió su rostro con una servilleta — ¿Eso es un sí?

— ¡Qué va! Hobi jamás te haría eso. —volvió a beber. — Y yo pensando que era algo más importante.

—Pues, está actuando raro.

— Él es raro.
¿Y por qué no le preguntas directamente a él qué le pasa?

—Creí que su mejor amigo lo sabría.

Taehyung puchereó, desviando la mirada. De hecho, estaba algo molesto, también notaba que Jung actuaba raro. Ser su mejor amigo, y no saber qué le pasaba, lo hacía sentir pésimo.
—La verdad es que no me ha dicho nada. —lo miró — Le he preguntado y siempre desvía el tema. Creí que, tal vez, había peleado contigo y no se atrevía a decirme, que por eso me habías llamado hoy.

— Mmm... — frotó su cien con la mano, buscando que sus neuronas conectaran de la manera correcta y le dieran la respuesta que estaba buscando. — Antes de todo esto, su hermana llamó, pero nunca me dijo qué pasó.

—¡Oh, sí! ¡Dawon!

—¡¿Sabes qué le pasó?! — preguntó con esperanzas.

—No, sólo recordé su nombre.

Min chasqueó la lengua molesto.
—Está bien, supongo que se lo preguntaré yo mismo.

—💕—

Luego de una ducha, Hoseok entró a la habitación y se encontró con Yoongi en la cama, sentado y tapado hasta su cintura.

—Ah~ hogar, dulce hogar~ — canturreó, adentrándose a la cama y recostandose al lado de Yoongi — ¿No te acuestas? Tengo frío~ — se tapó hasta los hombros, mirándolo desde abajo.

— Es que quiero hablar.

—¿Sí? —se sentó — ¡Está bien! ¿Quieres contarme cómo fue tu día?

—De hecho, iba a preguntarte cómo fue el tuyo.

—Ah... —rascó su nuca — Pues, normal, ya sabes. Otra vez me hicieron quedar hasta tarde, nada importante. Hablemos del tuyo.

— ¿Qué tanto te hacen hacer en la cocina? ¿Por qué ni siquiera me dejas pasar por ti al volver? ¿Seguro te quedas ahí o-

Un gran bostezo pésimamente fingido por parte de Hoseok, lo interrumpió. — Uy, mira la hora. Qué sueño que tenemos.
Hasta mañana. — se acostó rápidamente, tapándose hasta la cabeza y dándole la espalda. — Apaga la luz, que no la regalan.