¿Y si te quedas?

Capitulo 2

Si mamá, tengo todo empacado. — bufo aún como adolescente irritada, a lo que mamá ríe. – hija solo me preocupo por ti, no te estreses. – lo sé mamá.

Terminé de empacar todas mis cosas y salí a tomar un poco de aire. Me siento muy triste y con el corazón nostálgico, nunca pensé estar mudándome sola a otro país. Recién cumplí mis 18 años y fui aceptada en la universidad de Cambridge en Reino Unido para estudiar medicina. Me duele dejar todo atrás para comenzar desde un punto nulo, pero todo será por un bien mayor. –llegué al lugar donde caminaba perdida en mis pensamientos, abro la puerta del establecimiento y me dirijo a la mesa de siempre, frente al gran ventanal de cristal. – extrañare tanto este lugar.

Hola, nena–saluda mi amiga dándome un beso en la mejilla.– pedí dos chocolates calientes con espuma.– gracias Bethy– le respondo.

¿Recuerdas la última vez que nos reunimos aquí a esta hora?– pregunté soltando una pequeña sonrisa inocente.– como olvidarlo, trataba de que superaras a .... – se quedó en silencio y dirigiendo su mirada a mi– a jacob –terminó. Sé que no fue la mejor etapa de mi vida, recién perdía al amor de mi vida, se marchó a vivir a otro país de América y duré semanas encerrada en mi habitación, una que otra noche llorando y meses tratando de sobrellevarlo, pero hasta ahora he podido superarlo aunque no he salido con nadie más. – ¿todo bien?– pregunta mi amiga algo insegura.— Todo bien– contento mostrándole una amplia sonrisa a lo que ella respondió con otra sonrisa.

Sus chocolates chicas– Gracias!–dijimos al unísono.

Bethy, te voy a extrañar nena– cae una lagrima por mi mejilla la cual limpio con mi mano derecha. Viendo esto ella se acerca a abrazarme– también te voy a extrañar, princesa.– duramos un largo rato abrazadas, al separarnos nos dimos cuenta que ambas estábamos Llorando. Terminamos de tomar nuestros chocolates, pagamos y nos aproximamos a la salida –¿A qué hora sale tu vuelo?.– pregunta mi amiga.– no Bethy, no haremos esto, sabes que no me gustan esas despedidas. Te escribiré cuando llegue. Nos damos un último abrazo– Gracias por ser mi mejor amiga, Nicolle – Gracias a ti por todo– nos separamos y camino a mi hogar nuevamente tomando el camino más largo, quiero despedirme de este lugar donde crecí, donde estudié y donde me gradué, donde hice mis primeros amigos. Sé que este será un cambio muy grande y que no será fácil. Nada lo ha sido últimamente, pero las ganas de superarme han sido aún más grandes y sé que lograré conquistar todo eso que tanto anhelo.

Al llegar a mi casa introduzco la llave de la puerta de enfrente para poder entrar, cuando por fin estoy adentro, camino hacia mi baño, lo que más quería era tomar una ducha de agua fría, lo sé, pensarán que quise decir agua caliente, pero no, fría logra relajarme por completo.

Ahora me siento en la orilla de mi cama observando con nostalgia cada parte de mi habitación.— cuanto extrañaré todo esto– dije mientras limpiaba lágrimas que caían por mis mejillas. Comencé a recordar todas las cosas que pasaron en este lugar, desde mi primera pijamada a los nueve años hasta la pérdida de mi virginidad a los diecisiete. La primera vez que lloré aquí fue por haber pedido mi juguete favorito, la primera vez que estuve abrazada con jacob una noche completa viendo películas aunque al final siempre me dormía. El día que me gradúe de la escuela por completo, tres Semanas buscando el vestido perfecto. Son tantos los recuerdos que tengo. Son 18 años de mi vida, de mi historia dejados atrás.– ¡futuro, sorpréndeme!– dije quedando en un sueño profundo.

Me despierta el sonido de mi alarma, ¡Dios, cállate ya!!!– dije aventando algo contra la alarma, aunque no estoy muy segura que sea ya que tengo aún mis ojos cerrados.

Hija– dice mamá mientras toca la puerta. Abre mamá– grito.— nena, despierta, aquí está tu desayuno– dice mientras lo coloca encima de la mesa de noche de mi habitación.–Gracias ma'– me levanto de la cama y me aproximo a bañarme antes de desayunar.

Abro la llave de la bañera y Me quedo observándome en el gran espejo que tengo frente a la bañera. Estoy algo pasada de peso– pienso. Mientras me desnudó y entró en ella. Me recuesto un momento ella, necesitaba respirar, todo esto está siendo difícil. Ojalá y papá si venga a llevarme, se que son casi dos horas de camino, pero un esfuerzo me encantaría notar de su parte.

Termino de bañarme y camino hasta mi armario, abro las puertas de este y busco entre las ropas que he de dejar aquí. Esto estará perfecto–pensé. Me visto y me coloco frente al espejo. Llevo jeans negros y un suéter blanco con rayas negras, cabello recogido para total comodidad y una chaqueta de mezclilla por precaución.

Mamá– grité desde mi habitación.
¿Qué sucede Nicolle?– dice mamá al abrir las puertas de mi habitación. Por lo agitada que está creo que subió las escaleras de pronto. Estoy lista, extrañare todo esto mamá, será difícil, pero sé que es mi decisión. — mamá solo me abraza– nena, me harás mucha falta.

Mamá y yo nunca nos hemos separado y por eso duele tanto, siempre hemos estado juntas, cuando regrese se que se pondrá muy contenta. Me hizo prometer venir siempre para navidad.

Ha sonado el timbre y mamá bajó las escaleras para ver quien era. Nicolle, es tu padre– grita mamá desde el piso de abajo.

Miro mi habitación por última vez, deje todo en su sitio, me vuelvo a mirar en el espejo, tomo mis maletas y cierro la puerta. Todo será para mejor– dije soltando un largo y pesado suspiro.

Hola papá— saludo con un beso en la mejilla. Hola cariño– saluda papá.
¿estás lista?– pregunta papá tomando una de mis maletas. No, pero vámonos.

Miro a mamá por última vez. Tranquila mamá nos estaremos hablando siempre, se que me vas a extrañar e igual yo a ti, pero tranquila que no será para siempre, vendré a visitarte en las navidades. Mamá se había casado, así que tengo padrastro y hermanastro también. Por esa parte se que no estará sola, pero aún así es difícil para ella. Me acerco para abrazarla y ella corresponde mi abrazo–mamá comenzó a llorar. Se preguntarán porque ella no me lleva con papá, pero le pedí que no fuera porque no me gustan las despedidas. Con esto me basta. Te amo mamá– me separo de ella, tomo mi maleta y la coloco en el asiento de atrás del auto de papá.

Abro la puerta del copiloto y me coloco el cinturón al sentarme. Papá puso en marcha el auto, yo voy mirando por la Cristal de el auto el lugar donde crecí y ahora dejo para cambiar de ambiente, para crecer aún más, muchas cosas nuevas vendrán.

Una hora después

Me encuentro esperando a que llamen mi vuelo, estoy algo ansiosa, ya me despedí de papá, estoy sola aquí justo como quería. Sabía que si estaba acompañada iba a llorar y no me iba a querer ir, pero es algo que necesito.

Vuelo 14-06 con destino a Reino Unido, por favor abordar en puerta principal. — este es mi vuelo, aquí comienza todo.

–Nicolle torres.