–Cómo pudiste hacerme esto, tu dijiste muchas veces que me amabas o ¿acaso solo fueron más mentiras? –dijo derramando un mar de lagrimas
–Entiende!! Yo te amo como nunca he amado ni amare a nadie... -dije acercándome para acariciarla
-¡Mentira todas las promesas que me hiciste eran mentiras! –grito quitando mi mano bruscamente
-¡Yo te amo! ¡¿Entiendes el problema que eso significa para mí?! –pregunte pasando mis manos por mi cabello frustrado
-¿Si tanto "me amas" por qué lo hiciste? ¿Por qué me engañaste? –dijo en un susurro
-Por eso mismo porque te amo, necesito que te alejes, necesito olvidarte, necesito que me odies –dije con los ojos cristalizados admito que las palabras salían de mi boca quemaban en mi garganta
-Y a pesar de lo mucho que intente odiarte no podré hacerlo, porque a pesar de todo fuiste el mejor novio –dijo con un hilo de voz
-¿Quieres saber por qué el amarte implica un problema para mí? –dije dando un paso más cerca ella solo asintió, sorbiendo su nariz –No lo tomes a mal pero aun eres una NIÑA y pues yo tengo una carrera Y que se enteren que soy prácticamente un pedófilo me dejaría muy mal parado –dije bajando la cara y metiendo mis manos en los bolsillos, preparándome para todos los gritos que recibiría
-Está bien lo entiendo –dijo limpiando su cara con la manga de su suéter –Quizás lo nuestro era conocernos, pero no estar juntos –dijo y simplemente paso por mi lado dejándome ahí parado con el corazón roto y una incógnita que jamás podría descifrar.