El Malvado Plan de Dongpyo

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Al notar que ambos no se dieron cuenta de su presencia gracias a que estaban inmersos en su propia burbuja, Dongpyo se les acercó y puso sus brazos en los hombros de Wonjin y Hyeongjun a lo que ambos se tensaron y no supieron cómo responder excepto quedarse en silencio esperando a que no haya visto esa escena.

Con su típica sonrisa Dongpyo preguntó si pasaba algo malo, a lo que ellos con miedo seguían sin responder.

-Vamos, no soy tan malo como para delatarlos al frente de todo el mundo. Simplemente a la próxima que se pongan cariñosos, me invitan- dijo Dongpyo caminando hacía la salida del baño mientras se reía, pero lo que ellos no sabían era que Dongpyo llegó a tomarles una foto en su momento de cariño y ahora serían los primeros en involucrarse en su plan.

Al día siguiente

-¡Hyung!- gritó Dongpyo mientras corría hacía Wonjin que inesperadamente no estaba acompañado de su chico como es usual. Para Wonjin, Dongpyo era ahora un chico con el que debía tener cuidado si no quería que nada malo pasase y su racionamiento no estaba del todo equivocado.

-Vamos a un cuarto de entrenamiento, necesito que hablemos a solas un momento, ¿puedes?- dijo con inocencia esperando a que el mayor que lo estaba viendo con duda aceptará-

-Está bien...

. . .

-Vayamos al grano, Wonjin... A partir de ahora quiero que hagas lo yo que diga si no quieres que esta foto circule por todo internet- le muestra la pantalla de su teléfono -Sé que eres inteligente y no querrás que esto destruya tu futuro como artista como a ese idiota de Seobin que descubrieron su pasado.

Wonjin desesperado luego de entender la situación intentó quitarle por la fuerza el teléfono a Dongpyo -¿Eres idiota? ¿Crees que no tengo más copias guardadas de esta foto?-

-Dongpyo, ¿por qué harías algo como esto?... ¿te he hecho algo malo?, apenas estamos comenzando nuestra vida aquí y ya tengo que soportar estas cosas, vamos...- Wonjin cada vez sonaba más perdido y decepcionado, sabía que no podía hacer nada, así que su única opción era rendirse ante ese pequeño malévolo que estaba frente a él.

-Solamente haz lo que te digo, Hyung. Nada malo te pasará entonces, hasta luego. Ah, y ni se te ocurra decir alguna palabra de esto a alguien- dijo Dongpyo mientras salía del cuarto con una sonrisa.

¿Ahora qué seguía en sus planes? Decirle exactamente lo mismo a Hyeongjun.

. . .

-Dongyo, por favor te lo ruego, no expongas esa imagen, te daré todo lo que quieras, por favor...- Hyeongjun lloraba desconsoladamente mientras sostenía la mano de Dongpyo.

-...Haz todo lo que diga- Y así fue como el plan de Dongpyo para sus primeras víctimas estaba yendo a la perfección. Sabía que ahora con eso que había hecho, la relación de ellos se estropearía y se alejarían el uno del otro para proteger sus futuros.

Estropear su relación no era algo completamente necesario para cumplir su plan de infectar a todos los 100 participantes, pero a Dongpyo le había molestado aquella felicidad con la que se veía la pareja y necesitaba destrozarla a toda costa.

Dongpyo no contactó más con Wonjin ni Hyeongjun por dos semanas enteras y mientras tanto se divertía en las noches con sus compañeros de habitación e incluso chicos de otras habitaciones que se unían a las orgias que hacían donde nuestro querido Dongpyo era el protagonista.

Pequeños rumores comenzaron a circular de que Dongpyo era una pequeña perra que aceptaba sexo sin protección a cambio de nada. Algunos chicos se comenzaron a intrigar por aquello, así que iban en las noches a la habitación de Dongpyo a comprobar si eran ciertos los rumores o no y terminaban formando parte del pequeño harem que Dongpyo había formado donde todos padecían VIH sin apenas haberlo notado.