reencuentro || one shot ; kookmin

01

Jimin

Bueno, estoy realmente nervioso. Hoy después de 3 semanas vuelvo a ver a Jungkook, bueno a él no le gusta que lo llame así pero él no está aquí aún así que gozaré de decirle así, por ahora.

Realmente lo extrañé mucho en estas 3 semanas, mi Daddy salió de la ciudad por temas de trabajo. Por suerte la universidad me hacía distraerme, mi primer año en la universidad, la verdad no es nada fácil.

Hoy me levanté temprano para poder bañarme y buscar mi ropa de hoy a la noche con tiempo, la verdad me demoro bastante escogiendo la ropa si se trata de Jungkook. Quiero que hoy todo salga bien, sólo él y yo sin mi madre de por medio. La verdad es que mi madre no estaba de acuerdo con la relación que tengo con Jungkook, dice que es anormal el que yo tenga 18 y él 28 pero a mi la verdad no me parece tanto la diferencia de edad, cuando uno está realmente enamorado creo que eso es en lo que menos se fija.

(...)

Ya son las 19:45 y el vuelo de Jungkook llega a las 20:00, dijo que pasaría a recogerme así que yo ya estaba listísimo esperándolo. Me puse a ver la televisión para matar el tiempo, mi mamá había salido a no sé donde, por lo tanto me sentía tranquilo ya que no me estaba taladrando el oído con sus sermones de media hora.

Me perdí mirando el televisor pero me alarmé un poco al escuchar el sonido del timbre, miré la hora y eran las 20:40, efectivamente debía ser Jungkook. Está demás aclarar lo nervioso que estoy.

Fui corriendo a abrir la puerta no sin antes ver que mi atuendo esté prolijo al igual que mi cabello. Sin más, abrí la puerta y ahí estaba él, con una gran sonrisa en su rostro. Rápidamente lo abracé con todas mis fuerzas.

— Creo que alguien me ha extrañado mucho.— dijo él mientras dejaba un beso en mi cuello.

— ¿Cómo no iba a extrañarte? Te fuiste por un mes. — me separé viendo su rostro fijamente. — Acaso... ¿Tú no me extrañaste?— formulé la pregunta con mi rostro decaído, él rápidamente notó eso.

— ¿Qué? Claro qué si te he extrañado, Daddy ha extrañado mucho a su Mochi. — dejó un beso en mi nariz. — Bien, ¿Nos vamos? — asentí feliz.

Cerré la puerta con llave y Jungkook me guío hasta su auto abriéndome la puerta. Una vez en el auto hablamos de muchas cosas, él me comentó un poco sobre como le fue afuera en el trabajo y yo le comenté sobre lo agotado que me tenía la universidad.

Llegamos a su apartamento y en cuanto entré quedé mudo. El apartamento de Jungkook estaba solamente alumbrado de velas.

— Y-yo, Jungkookie, no sé qué decir, esto es precioso. — besé sus labios de una manera delicada.

— Lo que sea para que mi Mochi esté feliz. — pude sentir su fuerte agarre en mi cadera, dios como extrañaba eso.

En un pestañear de ojos ya nos encontrábamos en el sofá besándonos como bestias, demostrando lo mucho que nos habíamos extrañado.

— ¿Mochi ha extrañado a su Daddy?

— Claro que si.

— Demuéstrale a Daddy lo mucho que lo has extrañado, demuéstrale como sólo tú sabes hacerlo.

Me puse de rodillas y bajé su cremallera lenta y delicadamente, obviamente su amiguito ya se encontraba despierto.