CAP 4

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Fui a la localidad donde vivía antes Amber. Recorriendo las casas, todas eran pequeñas y modestas, de no más de un piso, era muy extraño ver alguna que estuviera extendida a un segundo nivel, la gente parecía sencilla, pero por la forma en la que me miraban no parecían gustarles los extraños, cuando pasaba frente a un grupo de personas me miraban y me examinaban, murmuraban cosas y me hacían sentir sumamente nerviosa.

He preguntado a todas las personas que la conocían y de alguna forma ellos sabían todo lo que le paso... a ella y a... Damien, cuando decía sus nombres las personas actuaban nerviosas y me negaban todo, aseguraban que solo se trataba de una historia y que realmente nunca paso eso que se cuenta. Y que, si fuera real, de todas formas, no conocían el paradero de ninguno de los involucrados, pero me advirtieron que debía dejar de investigar sobre ellos.

Me he negado y he continuado con mi labor de investigar. Necesito respuestas.

Cuando estaba a punto de darme por vencida una joven chica de piel pálida y ojos avellana se interpuso en mi camino y me miraba atentamente con sus grandes ojos. Me seguro que los demás mentían, y que nadie quería meterse en problemas porque temían de Damien, pero eso no la detuvo a ella, me conto todo lo que sabía respecto a los hechos. Aun así, solo me dijo lo que yo ya sabía pues ella tampoco tenía conocimiento de que había pasado con los hermanos Blake, solo que a veces Amber ronda el pueblo, pero no habla con nadie y siempre tiene su rostro cubierto de alguna forma, así que no se puede asegurar que se trate de ella.

Se ah echo tarde y tenía que volver a mi casa, no tenía suficiente dinero como para pagar un taxi que me llevara a mi casa, pues tras estar internada en el hospital solo tenía lo que llevaba puesto.

Recuerdo que no debí de haber caminado por esta zona... no cerca del bosque... pero era la única forma de llegar a casa, era un camino largo de un solo sentido y rodeado por completo de árboles que daban inicio al bosque por ambos lados del camino, los autos se encontraban ausentes y solo me quedaba la escasa luz que aún quedaba del sol que ya se estaba ocultando. El miedo invadía cada centímetro de mi cuerpo... el apareció... el nuevamente. Y una vez más mi cuerpo no me respondía, el miedo me congelaba por completo y sentía que mi corazón se iba a salir de mi pecho, y respirar me parecía tan pesado y difícil.

-De viste de haber hecho caso a las advertencias - dijo mientras jugaba con su cuchillo pasando su afilada punta por mi rostro, no pude ver su rostro, su cabello y capucha lo cubría, además, la ausencia de luz no ayudaba mucho. Su voz era profunda y ligeramente gruesa, logro que un escalofrió recorriera mi cuerpo aun inmóvil.

De alguna forma use todas las fuerzas que me permitía y logre mover mi cuerpo, un paso hacia atrás, tratando inútilmente de alejarme de él, pero el daba un paso hacia adelante, alcanzándome con cada uno que yo retrocedía, hasta que choque a espaldas con un árbol, era inevitable.

Cuando logro acorralarme me di cuenta de que solo estaba jugando conmigo antes de terminar con mi vida y por fin acabar el trabajo que no pudo cumplir hace dos noches, una lagrima broto de mis ojos, los cerré y mi respiración se volvió cortada y cada vez más difícil de lograr, de alguna forma logré articular una palabra...

-Damien... - dije en un susurro y él se detuvo, abrí los ojos y él tenía su vista fija en mí, con mucha atención y el ceño fruncido.

I LOVE YOUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora