Instantes.

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Harold Sullivan.
Hoy no me ha ido del todo bien, durante las primeras clases me estaba quedando dormido ya que no había dormido bien por la noche pensando en Camila mi exnovia, y ya veo las consecuencias de no dormir bien, después de clases voy a mi cafetería favorita la que está a unas cuadras de la preparatoria, desde pequeño mi papá me traía a esta cafetería siempre, por desgracia dejo de venir conmigo ya que murió el año pasado, es algo.... difícil seguir adelante ahora que no está, mamá se la pasa trabajando horas extras para poder cubrir con los gastos de la casa y yo trabajo sólo fines de semana para apoyar un poco ya que mi madre no deja que trabaje después de la escuela, ella piensa que me gustara ganar dinero y dejaré los estudios pero no es así le hice una promesa a mi papá y se la voy a cumplir.
Cuando entro a la cafetería tropiezo con una chica creo que es nueva nunca la había visto por aqui, la veo mientras saluda al dueño de la cafetería creo que ahora trabajará aqui, es demasiado parecida a Camila, tiene el pelo castaño oscuro hecha una coleta, piel morena y ojos cafés, tiene buen cuerpo....no es como que sólo me fijé en eso es solo que se le nota apesar de que intenta cubrirlo, un que si hay algo que se distingue de Camila, aquella chica tiene algo, lo expresa en sus movimientos es muy cuidadosa y precisa pero ahí algo más es como si por dentro estuviera sufriendo y por fuera sonríe apesar de como se siente.
Me he puesto nervioso pues estaba tan hundido en mis pensamientos que me olvidé de que la estaba viendo a ella fijamente hasta que estuvo lo suficiente cerca como para oler su pelicular aroma, olía entre tulipanes y algo más cereza talvez, me puse muy nervioso y no se porque.
-¿Que desea ordenar? - Pregunto aquellas chica.
-mmmmm -Fue lo único que pude decir.

-Oye tranquilo, no como chicos que se me quedan viendo hasta que casi se les cae la baba. - Y mientras decía eso reía, su risa era muy peculiar aún no sabía su nombre y ya me caía bien.

-JA JA JA que graciosa, ¿Me puedes traer un café americano?, Por favor.

-Okey en un momento te lo traigo. -Dio media vuelta y se fue.

No tardó en traerme el café, quería hacerle la plática, saber su nombre pero no sabía cómo y además había demasiada gente en la cafetería, la estuve mirando durante aproximadamente 40 minutos creo, en varias ocasiones me sonrió pero sólo eso, asi que me levanté de aquella mesa y deje pagado el café junto con una nota en la cual deje mi número, si es algo estúpido ¿Por qué quien va querer llamar a un número que dejaron en la mesa? Y que además de alguien que ni conoces, pero nunca se sabe que tal si ella sabe que yo dejé aquel número y me llama, okey dejaré de alucinar.
Después de que me levanto justo cuando estoy por salir de la cafetería vuelvo a chocar con aquella chica y lo único que hago es reír y se que ella también está riendo.
Llegó a casa mi madre no está, aprovechó para terminar mi tarea y empezar una maqueta, estoy concursando la mejor maqueta ganará una beca, y eso me beneficiaria muchísimo ya que apenas si podemos con todos los gastos y si gano no me caería nada mal, subo el volumen de la música y me pierdo entre cada frase de la música que para cuando mi madre llega son las 11 de la noche, no me había dado cuenta de lo tarde que era hasta que llego mi madre y me ha preguntado si ya había cenado cene a lo cual me regaña por no haberlo hecho.
Después de cenar tomo un baño y me voy a dormir.

¿Destino o casualidad?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora