Mi mejor amigo es el Playboy "MJP 2"

20. Casi

-As-

Corro por los pasillos para poder llegar a tiempo a la próxima clase, chocó contra algunos estudiantes que transcurre en el pasillo y unos papeles de la clase de arte se vuelan y debo de volverme a buscarlos. tocó la puerta y el profesor sale me ve de arriba abajo y enarca una ceja.

-Señorita, son diez minutos de retraso.

- Lo se, lo se la profesora de arte no me dejó salir antes- suplico con la mirada.

-Lo lamento pero son las reglas- el caso cerraba la puerta cuando escucho- señor Silva ya es la sexta vez que le llamó la tensión, tome sus cosas y salga ahora mismo de mi clase- que raro de, Luke, nótese mi sarcasmo.

El me ve de arriba abajo y me sonríe me hace señas con la cabeza de que lo siga entonces así hago lo empiezo a seguir por todo el largo pasillo y el pregunta:

-¿Qué hace Pinto aquí?, Deberías estar allá adentró- señala una parte de atrás del pasillo refiriéndose a el salón.

-Bueno la profesora de arte me pidió que la ayudara con unas cosas luego me dios unos trabajos míos, y después de un rato muy largo salí de allí diciendo que iba tarde.

-Pero yo lo hubiese hecho rápido, ¿o es que hiciste algo más antes de llegar al salón?- lo miro y asiento- prosigue.

-De un momento a otro empezó a hablarme de que si yo fuese su hija sería más fácil ya que manejar a una adolescente con las hormonas alborotadas y lesbiana no era fácil- el alza ambas cejas.

-¿La hija de la profesora de arte es lesbiana? - asiento.

-Esto queda entre nosotros, Luke, nadie lo debe de saber - el asiente y me doy cuenta de que estamos en el patio donde están las canchas de fútbol y baloncesto, el se dirige a donde están las plantas más altas cubriendo o por completos, ¿Y si sale una serpiente y me muero virgen?.

-No hay serpientes aquí, yo vengo muy seguido....- parece que no escucho lo otro, menos mal- y no sabía que eras virgen.

-Ah, si eso...bueno ya lo sabes- trato de restarle importancia.

Nos adentramos más y más hasta un punto en el que las plantas son de menos altura y a lo lejos puedo ver el mismo sendero por el que caminamos y una pequeña casita. Cuando me fijo mejor veo que nos dirigimos aquella casita que se ve algo abandonada.

-Llegamos, As.

-No sabía que había una casita en la preparatoria.

- Es porque no estamos en la preparatoria, descubrí este lugar hace un año; es una casita que se encuentra en un callejón que está justo al lado de la preparatoria pero como nadie lo ha ido a cuidar las plantas se han apoderado de ahí- asiento.

-¿Y porque los cuidadores no han cortado aquellas plantas?- señaló las de tamaño monstruoso.

-Tal vez llegó el rumor de que hay más de una serpiente ahí y de las venenosas y hablé con la directora diciendo que sería un dolor para su bolsillo pagar a unos exterminadores y más en el momento en el que pasaba la preparatoria- asiento recordando la mala racha del año pasado la preparatoria casi se queda sin fondos- y luego a ella se le olvidó eso y los de la limpieza prefieren dejar eso así- asiento.

Estuvimos casi 2 horas hay adentro en las cuales pasó mucho o eso pienso yo.

Estamos jugando a las atrapadas, sí sé que es infantil, pero no teníamos nada más que hacer así que me escondí detrás de una silla ya que la casita no tenía electricidad, él me encuentra y me iba a tomar de la cintura para hacerme cosquillas, cuando tomó con fuerza una de las sillas, y cuando él me intenta jalar me terminó cayendo y el cae sobre mí.
Sus labios rozando los míos nuestras respiraciones eran una sola y si tan sólo hubiese tenido el valor de moverme un poco tal vez lo hubiese besado por fin.

Sentía como sus carnosos labios rozaban los míos nos mirábamos a los ojos y nadie hacía nada para moverse, nos quedamos mirando los labios de cada uno, intenté acercarme un poco cuando el teléfono de él solo y se separó de mí.

-Va a ser la hora de la siguiente clase, debemos darnos prisa- el toma su mochila y yo toco mis labios con mis dedos.

-Casi...- susurro para mí.

-Vamos, As- me levanto y lo sigo. Llegó a mi salón y entro el entra a otro, veo a Brit la cual estába en la clase anterior y me pregunta que paso.

-Casi- es lo único que logró articular.

-¿Casi que, Astrid?

-¡Maldita sea casi lo beso y no hice nada...!