Capitulo 2

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Soledad

Ya pasaron años de la muerte de mi padre, un tiempo largo que prácticamente mi vida ya no tiene sentido, tres meses que vivo encerrada en un mundo oscuro....

- Sole ¿nos vamos?

-Si mamá ya voy - digo mientras cepillo mi cabello - solo ayúdame

Mamá me guía hasta la calle para esperar al automóvil

- Ya volvemos Rubí y Andres, llevaré a Solé al hospital

-Ok mamá-dicen en coro ambos

Mi madre me lleva al hospital porque últimamente no me he estado sintiendo bien, he estado con fuertes dolores de cabeza e incluso hasta náuseas.

Desde la muerte de mi padre, mi familia y yo ya no tenemos las mismas comodidades de antes, a mi madre se le hace difícil lidiar con los gastos.

Al poco tiempo aparece un auto que nos lleva al hospital

~Minutos despues~

Llegamos al hospital, mi madre le comento todo lo que me está pasando y el doctor nos dijo:

-Es la estrés, Soledad seguro estuvo muy estresada estos días

Pues la verdad es que si, he estado muy estresada estos días, ya no tengo ganas para nada y simplemente estoy encerrada en mi habitación.

-Eso es todo, Sole, espero que te recuperes

-Gracias doctor-decimos mi madre y yo al mismo tiempo.

Mi madre me guía hasta afuera y nuevamente tomamos un automovil, al llegar a casa lo mismo de siempre, permanezco encerrada en mi habitación.

~Al dia siguiente~

Despierto, siento un fuerte calor, de seguro hoy será un día muy soleado.

-Buenos días Sole, ya me voy al trabajo hija

-Buen día mamá, está bien, Cuidate

-Cuidate tu - me dice y me da un beso en la frente y escucho sus pasos que se van alejando.

Esta bien, creo que tomaré una ducha, mi madre siempre antes de irse al trabajo me deja un vestido en la esquina de la cama..

Luego de bañarme Rubí me trae el desayuno:

-Buenos días Sole, aquí te dejo el desayuno

-Gracias Rubi

~Al medio dia~

-Rubi ¿podrías ir al almacen de la esquina y traerme un chocolate? Por favor

- No, no puedo ¿Por qué no vas tu?

Ufff..tiene razón porque no voy yo, total hace mucho que no salgo sola, además ya conozco por donde caminar, y se donde queda el semáforo para pasar al frente, además no creo que me vaya a pasar algo malo ¿o si?

Me pongo mis sandalias, salgo de mi habitación y bajo con mucho cuidado las gradas, una vez abajo me guío con la ayuda de algunos muebles hasta llegar a la puerta principal, salgo y siento un frío y refrescante aire que llega hacia mi cuerpo especialmente a mi cara, voy caminando y escucho como los autos bocinan, de seguro hay mucho tráfico, al parecer ya estoy cerca a la esquina.

-¡Cuidado!-una voz masculina me sorprende y siento que me está tomando del brazo

-¿Q...u...e?-digo temblorosa

-Que casi te pasas al frente sin fijarte los muchos autos que hay, imagínate en este momento estuvieras tirada en el piso ¿no te fijas?

- Yo... , yo..... , yo soy ciega-digo con una voz miedosa.

-¡Wow! Cuanto lo siento yo, yo no sabía, deberías de tener más cuidado, o almenos tu familia o los que están encargados de tu cuidado

- Si, tienes razón, yo, yo debo irme - digo e intento irme corriendo pero el me detiene

-¿Qué pasa? Yo no muerdo - se rie a carcajadas- ¿Te acompaño a tu casa?

-No es necesario

- Soy Alan Foyth y tu ¿cómo te llamas?

- Soledad Bilbao

- Bien, ahora déjame acompañarte

- Vivo a media cuadra

- Vamos entonces










Perdon por no haber estado actualizando ultimamente.
Prometo que estaremos actualizando mas seguido
Como siempre espero que haya sido de su agrado y si les gusto no olviden regalarnos una estrellita☆ ❤

SIN TU MIRADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora