Familia Soñada

Tony bajo de la tarima lo más rápido que pudo e intento seguirlo pero el público se lo impidió cerrando el camino.

-¿Y el cap? – dijo Tony en cuanto llego donde estaban sus amigos
-Dijo que tenía una emergería y se fue – informo Natasha
-¿Una emergencia? – dijo intrigado y busco con la mirada. La pelinegra qué se le había pegado como garrapata a Steve seguía en el lugar. Entonces ¿Steve se había ido solo? El porqué era la gran interrogante si ninguno de los vengadores había sido convocado ¿Cuál era esa emergencia?

Con un mal presentimiento Tony salió del lugar sin escuchar a nadie, activó su traje y ascendió impulsado por los propulsores

-V.I.E.R.N.E.S. ¿el capipaleta ya llego a la torre? – pregunto mientras volaba
-El capitán Roger no se ha dirigido a la torre, señor – dijo la A.I.
-¿Cómo que no fue a la torre? – dijo Tony deteniéndose abruptamente – entonces ¿dónde está?
-El capitán Roger está entrando en el orfanato Estrella de Mar en Brooklyn – dijo la A.I
-¿Orfanato? – dijo Tony atónito – dame las coordenadas en este momento. ¿Qué hace mi anciano en un orfanato?

El orfanato Estrella de Mar en Brooklyn era un lugar que albergaba a unos cincuenta niños desde recién nacido hasta los quince años. Había sido afectado durante el ataque de los Chuturis, pero un donador anónimo había cubierto toda la reparación

Tony bajo en mitad del patio mirando en todas direcciones mientras todos los niños se aglomeraban a su alrededor

-Dese prisa hermana – decía Steve con un niño en brazos – cada minuto cuenta – Tony – dijo sorprendido – ¿Qué haces aquí?
-Es lo que yo te pregunto a ti, Rogers – dijo el moreno con cierto desprecio en la voz
-Me duele – sollozo la pequeña en sus brazos
-Tiene fiebre alta – dijo Steve – y el trafico esta terrible. Voy a tener que… – Tony toma al niño – ¿Qué haces?
-Alcáncennos en el Hospital Presbiteriano – dijo Tony antes de salir volando con los prepursores de sus pies
-¿Dijo el Hospital Presbiteriano? – pregunto la religiosa sorprendida – nosotras no podemos…

Cuando Steve y la monja finalmente llegaron al hospital, cuarenta y cinco minutos después, se encontraron con Tony en la sala de espera, quien ya no usaba su traje

-¿Cómo esta Peter? – fue lo primero que la religiosa pregunto en cuanto entro al lugar
-Al parecer es una infección – dijo Tony – ya lo están tratando. En un rato lo pasaran a una habitación y lo podremos ver
-Gracias – dijo la monja – y disculpe que suene maleducada, pero… – miro a Steve – nosotras no tenemos como pagar este lugar
-¿Quién dijo que ustedes pagaran algo? – dijo Tony
-Tony… – dijo Steve sorprendido
-Hermana – dijo este – podría darle los datos del niño a la enfermera, por favor
-Gracias – dijo la mujer – muchas gracias. Que Dios se lo pague – y se alejo
-¿Por qué no me lo contaste? – dijo el castaño a boca jarro – ¿Por qué no me dijiste que tenías un hijo?
-¿Qué cosa? – dijo Steve sorprendido – ¿de dónde sacaste que…? – exhaló cerrando los ojos – Tony, Peter no es mi hijo
-No mientas Rogers – dijo furioso Tony – ya investigue y vas a verlo a él y a sus dos hermanos menores cada semanas. Prácticamente has donado todo lo poco que tienes a esos niños. Cuando sales a media noche es al orfanato a verlos. La bebe…, Morgan, ella es tu hija ¿no es cierto? ¿Cómo pudiste mentirme? ¿Qué clase de monstruo eres? Abandonaste a tus…
-¡Yo no abandone a nadie! – grito Steve – ¡yo asesine a sus padres!
-¿Qué cosa? – dijo Tony totalmente atónito
-Sus padres murieron durante los ataques a Nueva York el año pasado por los Chitauri – dijo Steve – yo los saque de debajo de los escombros, pero sus padres… su madre… con su último aliento me hizo jurar… que los cuidaría. Los lleve al orfanato y cubro sus gastos.
-Por eso… - dijo Tony
-Me he encariñado con ellos – dijo Steve – tanto así que intente adoptarlos. Pero soy soltero y mis oportunidades son pocas. Por eso estaba buscando la manera de pedirte matrimonio
-¿Pe…? Tú… yo… ma… – tartamudeo Tony – pero…
-El señor elocuencia sin palabras – dijo Steve – esto es memorable. Debería grabarlo. A Natasha y a Bruce le va encantar – dijo en tono burlesco
-Cállate capipaleta – dijo Tony sonrojado
-Vas a adorar a los niños – dijo Steve – Peter tiene ocho años es fuerte y valiente para su edad, tiene un gran sentido de la responsabilidad
-Como tú – dijo Tony
-Harley tiene cinco – siguió Steve – es un genio para inventar cosas
-Igualito a su papi – dijo Tony
-Y Morgan – dijo Steve – solo tiene un año y medio y tiene unos enormes y precioso ojos chocolates, pero con un carácter…
-Quiero conocerlos – dijo Tony – por favor…
-¿no tienes una canción para eso? – dijo Steve.
-De hecho si – dijo Tony con picardía
-¿Por qué no me sorprende? – dijo Steve
-¿quieres escucharla? – dijo Tony sonriendo
-Tengo miedo – dijo Steve
-Familiares del niño Peter… – dijo el doctor
-Roger – interrumpió Tony – Peter Roger Stark
-Perdón – dijo el galeno – pero este niño viene…
-Viene del orfanato Estrella de Mar – dijo Steve – pero mi pareja y yo lo estamos adoptando – y la monja los miro sorprendida
-¿Qué tiene nuestro pequeño? – dijo Tony
-Un resfrió – dijo el médico –, es poco fuerte, pero nada grave. Es normal en esta época del año – y los tres adultos exhalaron – lo tendremos hoy en observación y mañana se lo pueden llevar
-Gracias doctor – dijo Steve
-Doctor, quiero que lo atienda bien – dijo Tony – por el dinero no es problema
-No se preocupe señor Stark – dijo el galeno y este se fue
-Mucha gracias señor Stark – dijo la monja
-Dicen que el dinero es para facilitar la vida de las personas ¿no? – dijo Tony – pues que lo haga
-¿Por qué dijeron que son sus padres? – dijo la monja intrigada y la pareja se miró sonriendo

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La torre era un hervidero. Todos iban y venían acomodando cosas

-Thor, ten cuidado – regaño Loki cuando un florero se le cayó – deja de usar tus músculos y usa tu cerebro
-¿Y los dulces? – dijo Sam
-Bruce – dijo Clint – tráeme los chocolates de la cocina
-Aquí están los pañales – dijo Wanda
-Necesito los juguetes – dijo Natasha
-Este globo ira perfecto aquí – dijo Visión arreglando varios de estos en una esquina
-Llegaron – grito Fury
-Ya saben que hacer – dijo Bruce

Cuando salieron del ascensor ambos adultos sonreían radiantemente. Tony cargaba a la pequeña Morgan, mientras Steve agarraba con cada mano a Peter y a Harley

-Bienvenidos – gritaron todos a la vez asustando a Morgan que lloro
-Ya cariño – decía Tony meciéndola – solo son los energúmenos de tus tíos diciendo hola. Ya, no llores
-Tú debes ser  Harley – dijo Bruce sonriendo – yo soy el tío Bruce
-Bienvenido – dijo Pepper abrazando a Peter
-Es mi turno – dijo Clint
-¿Te duele? – pregunto Harley mirando a Fury
-¿Puedo alzarla? – dijo Wanda – por favor
-Yo también quiero – dijo Natasha – ¡es tan linda!
-Ni parece tu hija – dijo Loki
-Cállate Cuernitos – dijo Tony
-Pareces un peluche – le dijo Peter al mapache