BLOODY WALL [[KOOKMIN]]

03

El agradable olor a tierra mojada llegó al olfato de ambos chicos que iban caminando por la tranquila calle dirección a la universidad. 

— ayer llovió bastante. — dijo Jungkook mientras miraba el suelo húmedo debido a la fuerte e inesperada lluvia que cayó sobre Busan. 

Jimin asintió mientras caminaba junto al más alto. A él se lo iban a decir si llovió ayer bastante. A él, que deseaba haber salido con el chico a la calle para que este conociera poco a poco los alrededores del lugar.  La tarde concluyó con una larga siesta por parte del pelinegro y con una película y palomitas por parte del rubio.  

Pero aquello ya era pasado. Ayer fue ayer y hoy, es hoy. Martes; primer día del curso de la uni.  ¿Y que si estaban nerviosos? Al menos Jimin lo estaba, y mucho. Ansioso y nervioso describirían justamente al más bajo. Mientras que Jungkook... el muchacho era la tranquilidad en persona. 

Al poco tiempo, ambos chicos entraron por las grandes y amplias puertas de aquella universidad. La universidad de Busan.  Aquella prestigiosa y recomendada universidad, era también, hermosa. El edificio tenía un diseño gótico, con altas columnas, grandes y redondos ventanales, grandes arcos que formaban un hermoso pasillo bajo ellos, y el gran espacioso, verdoso y bien cuidado jardín. Aquella universidad era una maravilla, tanto por su bella imagen exterior e interior, como también por su magnífica y alta cualificada educación.  Jimin agradeció a aquel arquitecto italiano y al duro y exigente, pero buen sistema educativo coreano. 

Jungkook y Jimin se detuvieron en secretaría para consultar donde quedaba su clase. Por suerte iban sobrados de tiempo. 

— buenos días. — dijeron ambos a la misma vez, haciendo una reverencia. 

La mujer de cabello castaño y metida en la treintena, al menos eso pensó Jimin sobre la edad de aquella mujer, sentada en una silla negra giratoria detrás de un largo y amplio escritorio, les sonrió y devolvió el saludo. 

— ¿qué necesitan, chicos?

— oh, verá usted. Somos de primer año y no sabemos donde está nuestra clase. 

— si, ya veo que sois novatos, se os nota la cara de pollitos perdidos, sin ofender. Ahora decidme, ¿qué carrera habéis tomado?

— estudios ingleses, interpretación y traducción. 

— doble grado... debéis de emplear mucha dedicación, eh. 

Ambos asintieron, aunque Jeon era el único que hablaba. Si bien era cierto lo que aquella mujer decía, un doble grado conlleva más dedicación a que uno solo, pero te abría mas puertas al mundo laboral.  Jimin se lo planteó mucho. Él estuvo pensando por mucho tiempo estudiar estudios ingleses (filología inglesa) y sacarse el título como profesor. Pero años después se dio cuenta de que aparte de enseñar, le encantaba traducir y hablar esta, fuese para lo que fuese. Y decidió hacer aquel grado, ya que ambas carreras le gustaban demasiado.  Claro que sabía las consecuencias de ellas. Aquella carrera era explorar la lengua inglesa profundamente. Sus raíces, su literatura, el famoso abecedario inglés con su origen anglosajon, traducir el inglés adecuadamente y rápidamente al español, hablarlo correctamente y con soltura... aquello no era fácil, pero para eso estaba allí. Para aprender y poner en práctica lo aprendido.

La mujer al poco rato les dio la indicación de su clase y estos con un gracias y una reverencia, salieron del lugar.  La clase se encontraba en el segundo piso. 

Una vez llegaron a dicho piso pudieron ver como el pasillo estaba repleto de alumnos.  Unos conversaban, otros buscaban su casillero, otros aseguraban que este fuera el suyo, otros apoyados en la pared, solos y callados, esperando a que la clase fuera abierta, y otros haciendo tonterías.  El rubio estaba tan sumergido observando a los chicos y chicas que algunos serían sus compañeros, que no se pudo apartar cuando un trío de chicos golpearon su hombro al pasar.