Powerful Royalty «zodiaco»

Parte 1

Narra Celina

Las vacaciones de verano han terminado y jamás pensé decir esto pero...¡que bien! es tan emocionante, espere este día toda mi vida. Por fin iré al Instituto Powerful Royalty de echo justo ahora estoy en el autobús camino al instituto, se preguntaran ¿de qué nos hablas Celina? Pues La respuesta es muy fácil: me voy a una escuela para personas con habilidades, o sea poderes, lo curioso es que solo las personas que pertenecen a la realeza son los únicos que poseen dones y yo soy una de ellos, este año es el primero que asisto y es por eso que estoy emocionada.

Salgo de mis pensamientos al sentir que alguien se sentó a mi lado, era una chica castaña con pecas en su rostro, muy bonita cabe mencionar, ella igual me mira y sonríe.

-hola, soy Tabatha Edevane-se presento y me extendió su mano

-mucho gusto soy Celina Hart-tome su mano y al hacerlo un dolor inmenso me recorrió mi brazo-¡agh!-se sentía como si me enterraran agujas por todo el brazo

La solté, me empecé a sobar tratando de disminuir el dolor y por suerte funcionó, Tabatha me veía preocupada y culpable.

-soy una tonta, lo lamento tanto olvide que aún no lo controlo bien-se mordió su labio nerviosa

-¿cómo hiciste eso?-pregunte con dificultad y algo confundida, debe ser su poder

-es mi habilidad,puedo hacer sufrir a las personas cuando me tocan-bajo la cabeza-en serio perdón.

-está bien, no dolió tanto-le di una pequeña sonrisa para que no se sintiera mal

Ella me devolvió la sonrisa débilmente, de su bolso sacó unos guantes los cuales se puso.La mire curiosa sin saber para que son o por qué se los pudo.

-me los pongo para no herir a las personas-me explicó al ver mi cara-sabes aveces me siento como Elsa-se río de su propio comentario

Yo ladee la cabeza-¿por qué dices eso?-pregunte curiosiosa

-por que también controló el hielo-respondió divertida-¿y tú que habilidades tienes?-

-puedo controlar el metal y un súper grito-conteste

-te pediría una demostración, pero eso implicaría quedarme sorda así que será para después-comenzó a reír y yo le seguí

El resto del camino no la pasamos platicando de nuestras vidas, como descubrimos nuestros poderes, etc. Honestamente Tabatha me había caído muy bien, era linda, amable, atenta y parlanchina.

Unas cuatro horas después, muy cansadas por cierto, ya habíamos llegado a la escuela. Mire por la ventana el gran castillo frente a mi que hacía de escuela, se veía mágico y eso me encantaba.

El autobús se estacionó justo en la entrada y bajamos de el, cuando estuvimos todos fuera nos guiaron dentro de la escuela, sus áreas verdes eran muy hermosas y ni se diga del interior de la escuela aun más hermoso, toda la estructura se veía antigua pero cada detalle era asombro. Nos separaron por hombre y mujer para darnos nuestras habitaciones, me formé en la fila correspondiente y una mujer nos decía nuestras habitaciones conforme íbamos pasando.

-nombre por favor... -pidió cuando fue mi turno

-Celina Hart-