Subió a la cima del edificio más alto de la ciudad y estudió el relieve citadino con detenimiento. "Nada es verdad...", iniciaba el Credo al que había dedicado su vida. Se irguió y la capucha le ondeó al viento. Tras saltar como un águila se percató de su error: estaba drogado.
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Historias de Tuit
RandomRecopilación de historias cortas que publico por Twitter (un tuit por historia). Temas variados. Escritos originalmente en mi cuenta personal de twitter.